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Sumido en sus desastrosos pensamientos, sintió una mano revolver sus cabellos. Dirigió su mirada a la beta que le regalaba una sonrisa. —¿Otra cerveza? —Señaló mientras acariciaba sus sedosos rizos.

El asintió con una pequeña sonrisa, realmente el ambiente era acogedor, hace mucho tiempo no sentía una calidez como esa fuera de la academia de ballet.

—Saldré a fumar —El rubio se levantó del sofá, estirándose.

Yoongi lo miró, necesitado de alguna distracción. —¿Puedo acompañarte? —Preguntó levantándose también.

El beta asintió, un chico se acercó a Joshua, sentándose a su lado y dándole un abrazo. —Los espero aquí —Dijo mientras sonreía y correspondía el gesto del castaño.

El pálido asintió, saliendo de la casa junto con Taehyung. En el patio trasero habían algunas personas, quienes estaban bebiendo y riendo, el rubio se acercó a ellos, saludando con total confianza. Fue entonces cuando Yoongi observó a los chicos más detenidamente.

Ahí estaba él, un chico de una peculiar sonrisa que achicaba un poco sus ojos. Lo miró con curiosidad, y a su cabello color naranja encendido.

—Hey, chicos. Este es el pequeño Yoongi —Tae le ofreció su mano con una sonrisa.

El pelinegro la tomó y se acercó tímidamente, se inclinó ligeramente, saludando al grupo de personas.

—Ah, Min, ¿Verdad? —El pelinaranja reconoció, dirigiendole una sonrisa suave.

Yoongi asintió, algo cohibido por las miradas de todos en él.

—¿Tienes un encendedor? Voy a fumar —El rubio pidió, el otro chico le sonrió mientras sacaba un mechero de su bolsillo, extendiendolo al más alto.

Después de encender su cigarro, Taehyung se alejó para hablar con dos chicas que estaban al otro lado del patio, charlando entre risas. El pelinegro se quedó en el mismo lugar, recargando su cuerpo contra el marco de la ventana.

—¿Y que hace en un lugar como este un príncipe real? —Preguntó el pelinaranja, lo que ocasionó las risas del resto de personas.

—No soy de la realeza —Dijo el omega, mirándolos brevemente con un semblante cohibido, que no era notable bajo sus lentes.

—Perdona mi atrevimiento —Comentó aún entre risas.

Siguieron charlando sin incluirlo realmente, se sentía un poco fuera de lugar, estos chicos no eran como Haru o Joshua, parecían creerse superiores.

—¿Fumas? —Preguntó otro de los betas presentes.

El bajito, quien mantenía su mirada gacha y concentrada en sus uñas, lo miró bajo sus lentes.

—Oh, bonitos ojos —Dijo, mientras le ofrecía un cigarro, con una mirada arrogante, casi desafiandolo.

El omega tomó el cigarro entre sus dedos, mirándolo fijamente. No eran exactamente los mismos que Taehyung le había ofrecido más de una vez.

—¿Qué pasa? —Preguntó una chica con un tinte de cabello demasiado vibrante, casi dejándolo ciego.

—Está apagado —Dijo el pálido como si fuera lo más obvio del mundo, actuando como ellos lo hacían con él, con un gesto desinteresado y una mirada plana y aburrida.

El resto soltó una carcajada. —Eres un idiota, Jay —Dijo el pelinaranja, tomando el encendedor de uno de sus amigos.

A diferencia de lo que Yoongi creyó, el chico encendió el objeto en una posición cerca de su rostro, mirándolo retadoramente, se sintió algo ofendido ¿Acaso creía que no era capaz? Puso el cigarro en su boca, tomándolo con sus dedos e inclinándose hacia el frente, para poder alcanzar el fuego. Al subir su mirada, se encontró con los ojos del chico, llenos de fuego, como si su acción hubiera provocado algo en él, lo miró fijamente, y aunque tuviera lentes oscuros, no despegó su mirada de los ojos del contrario.

As Long As I'm Alive [Kookgi]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora