La ultima enigma

4. Marcame.

Despierto y sonrío al sentir el delicioso aroma del cabello de mi alfa, de solo pensar en que ya la consideró mía se me eriza la piel, es una alfa hermosa y perfecta, no puedo creer tener la fortuna de encontrarla en mi camino, quizás exagero, apenas la he tratado un día, dos noches durmiendo con ella, y apenas una hora de platica, y creo es demasiado tiempo.
La veo moverse y respirar mi aroma, así como la sonrisa que tiene cuando siente mi olor cercas de ella.

-Buenos días Rosie, ¿Como te sientes?-Pregunto y ella se estira como si nada hubiese pasado, mi alfa si que es fuerte, mas que cualquiera.

-Bien Lisa, gracias por salvarme ayer, ¿Como fue, como fue que supiste, donde estaba?- Pregunta cada vez bajando mas el volumen de su voz sin verme al rostro

-No lo se, algo me despertó, y, cuando no sentí tu olor, sentía como se iba desvaneciendo, supe que tenias tiempo que te habías ido, y luego, luego, mi loba entro en desespero, y me hizo correr, correr hasta que percibí tu aroma, y luego corrí aun mas fuerte y rápido para llegar a ti, sabia, sabia que me necesitabas.- Digo buscando su rostro, ella se vuelve a mi y me besa, se sienta sobre mi y me comienza a besar yo la beso tambien y comienzo a bajar a su mandíbula y luego a su cuello.

-Márcame Lisa, tienes que marcarme para salvarme.- Dice con desesperó.

-Yo, yo si quiero marcarte Rosé, pero no quiero volverte una delta, puedo sentir tu loba sufriendo por esas palabras que dices.- Cuando le digo eso, su rostro se vuelve atónito, y palidece.

-¿Como lo sabes?- Pregunta sorprendida, yo solo levanto los hombros como respuesta.

-No se, simplemente lo se, quizás he leído mucho.

-¿Leído mucho?- Pregunta curiosa y se ve adorable girando su cabeza como cachorro que escucha un sonido le parece familiar.

-Crecí como alfa, mis padres, mis abuelos y los que están atrás de ellos eran alfas, sangre pura.- Digo poniendo los ojos en blanco, y ella asiente sin quitarse de mis piernas.
-¿Me quieres contar tu historia?

-Casi igual, casi, vengo de una larga familia de alfas, los pocos omegas, betas, son prácticamente desterrados de la familia, y olvidados, son una vergüenza, yo no tuve la fortuna de ser una, de hecho, soy de las mas fuertes, Joy, mi prima, es tercera pero crecimos juntas, y al idiota del abuelo cree que sera más pura nuestra sangre si los mismos Park lo hacemos.- Explica con cara de asco, y yo solo puedo verla y continuar asintiendo.
-¿Y tu? ¿Quieres, quieres contarme tu historia?

-Pues lo que te dije, larga lista de ancestros alfas, tengo una hermana y un hermano ambos son alfas, desde pequeños nos hacían jugar quien era el alfa de los tres, yo siempre ganaba por poco, pero a los 13 años creo, los vencía sin siquiera ver, era el orgullo de mis padres, hasta que mi loba, comenzó a crecer, se volvió mas agresiva, mas destructiva, les dije a mis padres que me iría, solo ocupaba donde vivir, tenia 15 años y ellos sin dudarlo, bajaron la cabeza, y me entregaron las llaves de un auto y una casa, me dijeron que tomaría clases en linea, y compraron un gimnasio para que me ejercitara, para que me entretuvieran.- Sin darme cuenta unas lagrimas corren por mi rostro, al recordar esos momentos de soledad.
-Por suerte un día Jennie toco la puerta, con sus maletas y su actitud de perra, entro y me dijo, no tengo a donde ir, ya se hartaron de mi, fue lo que dijo sin darme oportunidad de decirle que no, ya estaba desempacando, fue la primer en no temer de mi, éramos hermanas, una alfa con la que no competía, con la que no peleaba, y la que no me temía, incluso cuando yo me tenia miedo a mi, ella me enseño a controlarme, la ayude a estudiar, yo cubrí sus gastos y ahora es una gran doctora, conoció a Jisoo, se enamoro y caso con ella, yo fui la madrina, y dama de honor de ambas, la ironía, mientras muchas familias luchan por la sangre pura, otras consideran una vergüenza que los vuelvan unos deltas, como es el caso de Jennie, cuando estaba logrando la aceptación de su familia se enamoró de Jisoo, otra alfa y le dieron la espalda cuando fue marcada.

-¡Vaya, si que es cruel la vida con algunas personas!- Dice con un tono de voz bajo y decepcionado.

-Si, así suele ser la vida, y ¿Puedo preguntar, porque quieres que te marque, incluso en contra de tu loba?- Pregunto cautelosa, no quiero que se sienta mal.

-De cualquier manera terminaré con la marca, la alfa mayor es la que marca en mi familia, y en mi caso, Joy es mayor por seis meses, así que para mi desafortunada suerte, ella es la que me marcaría, es mi loba la que esta en contra de ser marcada, pero contigo, se siente bien, contigo ella esta bien, y me siento como nunca con nadie me he sentido, así que no se porque si aceptaría que me marcaras.- Dice segura.

-Antes de hacerlo, quiero conocerte mas.- Digo y ella asiente aceptando las preguntas que le hare.
-Edad, fecha de nacimiento y comida favorita, y luego de responder tu sigues en hacer preguntas.

-Bien, tengo 26, 11 de febrero del 97, y amo la comida a excepción del aguacate.
-Misma pregunta.

-También tengo 26, el 27 Marzo del 97, y amo la comida en especial la tailandesa.
-Color favorito y que musica escuchas.

-Azul y musica Pop, ¿Y tu?

-Amarillo, y musica pop, ¿Quieres tu medicamento?- Pregunto cuando veo su rostro con dolor.

-Si, si lo necesitó.

-Bien porque yo también.

-¿Como que tu también?- Me pregunta sorprendida.

-No es nada, unas heridas pero nada de otro mundo.

-¿En donde Lisa?

-En las plantas de los pies.- se baja de mi y como niña pequeña gatea hasta llegar a ellos.

-¡Lisa! ¿como paso?

-No es nada, mi loba tenia prisa en irnos, pero se recuperan rápido.

-Creo que yo te llame, no se cómo, solo hablaba con mi loba y le decía que seria bueno que estuvieras ahi, para, para cuidarme.- Dice apenada y cada vez mas bajo, yo la tomo de la muñeca y la jalo hacia mi, y la siento en mis piernas tratando de ser lo mas delicada, se qué aun debe estar muy lastimada.

-Toma, te sentirás mejor.- Digo dándole las pastillas y una botella de agua, después ella yo tomo las pastillas y agua, mientras ella comienza a besarme, y por primera vez toma la iniciativa conmigo, comienzo a sentir sus besos húmedos mientras quita mis prendas, hasta que llega a mi miembro, comienza a acariciarlo con su mano su boca, esa poca que siento me volviera loca, trato de no moverme, pero es inconsciente, nadie lo había succionado así, muevo las caderas y sin en nada la tomo de sus delgados y hermosos brazos, la subo hacía mi, y la siento en mi miembro, comienzo a entrar en ella, y ella se recarga en mi abdomen produciendo esos deliciosos ruidos que tanto me gusta escuchar, hasta que reacciono a lo que esta pasando.

-¡Maldición!- Casi grito.

-¿Que pasa Lisa? - Pregunta asustada, y yo la pego a mi.

-Perdón, no quería asustarte, ¿No sientes el nudo Rosie?- Pregunto y recargo mi cabeza en su hombro mientras se me escapan unos gemidos de placer.

-Si.- Responde igual, entre gemidos.
-Pero, no pasa nada, tranquila, no puedo quedar embarazada a la primera anudada.- Me responde tranquila, yo la brazo sintiendo su hermoso cuerpo, y acaricio su hermoso abdomen con mis pulgares, donde se que pronto estará mi cachorro.

-Creo que se sabe tan poco de mi especie, pero por lo que se, es que puedo dejar embarazada a cualquiera en jerarquía a la primera de trillizos Rosie.- Le digo y ella me ve sorprendida.

-¿Estas segura?- Pregunta nerviosa, viéndome a los ojos, y yo continuo acariciando su abdomen, y solo asiento y levanto mis hombros.

-Es lo que he escuchado, quizas sean solo mitos y leyendas, y por lo menos espero solo sea un cachorro, no una camada.

-Lisa no es gracioso, aunque ¡maldición! Ya se debió de haber desecho el nudo ¿no?- Pregunta preocupada.

-No lo se, nunca lo había hecho con nadie, no se cuanto dura, y te lo dije ahora no te muevas tanto no te vayas a lastimas, le digo abrazándola y acariciando su espalda, besando su hombro.
-Amo tu aroma, amo como se mezcla y combina perfecto con el mío.- digo continuando besando su hombro, y ella solo asiente y hace unos deliciosos ruidos en mi oído.

-Lisa, márcame ahora, ya estamos conectadas, ya me anudaste, solo falta la marca, ya soy tuya, y tu eres mi enigma, este es el momento de que me marques.- Me dice tranquila, y yo solo pienso si es lo correcto.