𝓔𝓷𝓽𝓻𝓮 𝓮𝓵 𝓪𝓶𝓸𝓻 𝔂 𝓵𝓪 𝓰𝓾𝓮𝓻𝓻𝓪 (𝓤𝓻𝓺𝓾𝓲𝔃𝓪 𝔁 𝓡𝓸𝓼𝓪𝓼)

peticiones denegadas

Todo comenzó el día del comienzo del conflicto...

Naa mentira xD ahora sí va enserio.

Todo empezó el día en qué Urquiza fue a llevarle un mensaje que ya sería como el quinto, insistiendole a Juan Manuel de Rosas de unirse a la confederación Argentina.

Cosa que cuando llego paso nuevamente a su oficina para insistirle de nuevo.

𝕌𝕣𝕢𝕦𝕚𝕫𝕒:Buenas tardes señor de Rosas, nuevamente he venido a insistirle que se usted forme parte de  la confederación, ya que todos unidos seremos invencibles... Por favor acepte de una vez por todas, así ya estemos en paz, si?

Dijo mientras le acerco el contrato hacía el.

ℝ𝕠𝕤𝕒𝕤:Mira Urquiza... Te dije y te reitero nuevamente, NO PIENSO ENTRAR A TU PUT* CONFEDERACIÓN, SI?!

Dijo destruyendo el papel entre sus manos para después tirarlos al suelo hecho trizas.

𝕌𝕣𝕢𝕦𝕚𝕫𝕒: Se va a arrepentir de no hacerlo! Ya verá usted

Dijo retirándose enojado por no lograr su cometido.

ℝ𝕠𝕤𝕒𝕤:Uyy mira que miedo que te tengo...

Dijo el pelirrojo burlándose de su contrario hasta que se fue de la oficina.

Urquiza decidió quedarse en casa de un familiar suyo, mientras que desilusionado pensó ....

𝕌𝕣𝕢𝕦𝕚𝕫𝕒: ESTO ES LA GUERRA!!

Mientras en su cara se formó una mueca de desagrado y enojo total, Urquiza comenzó a planear su venganza.

(El plan de Urquiza:)

Derrocar a rosas:

Entrar a la casa de su enemigo:

Tenía que cuidarse de los guardias.

Cómo entrar:

A las 10 pm es un buen horario.

Siempre hay una ventana abierta que lleva a la habitación de él.

Debo esperar a que su esposa no esté
O que se valla de la casa.

Plato fuerte:

Debo entrar con discreción y cautela para que no me escuche la morsa que duerme plácidamente, y vendarle los ojos.

Mientras no me vea no se puede defender, así que aprovecho mejor para atarlo de pies y manos en la cama así tendrá menos posibilidades de escapar.

Puedo hacerlo mío e irme... Pero me va a denunciar, así que tendré que meterle miedo cosa que no lo haga.

(Fin del plan)

Puso una sonrisa siniestra mientras guardó el papel con el plan en el bolsillo de su saco. Luego se dirigió a la casa de su enemigo y tomar nota de los horarios para concordar con su plan maestro.

𝕌𝕣𝕢𝕦𝕚𝕫𝕒: Bien Juan Manuel, no aceptaste, ahora prepárate...

Dijo mientras se escondió entre unos arbustos con su pluma y su tintero, esperando a que los guardias tomarán su turno y ver cuánto se tardaban en ello, pero de pronto decidio cambiar de lugar e ir a una posicion mas cercana a aquella ventana. Tomándose así con un rosedal enorme, lleno de flores de rosa rojas y grandes que aparentaban moverse, o solo era el viento, Urquiza solo se trepó a un árbol de allí así podía tener una mejor vista y escondite.