All x Kanao

Tranquilidad

Tanjiro x Kanao

Leve Nezuko x Kanao.

Leve Zenitsu x Kanao.

Leve Inosuke x Kanao

AU Moder
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Kanao caminaba tranquilamente por los pasillos de la academia con mucho sueño, hace poco que había terminado al fin sus clases de matemáticas lo que fueron para la profe 2 horas para ella y sus compañeros fueron una eternidad.

Nezuko:¿Estás bien Kanao? -pregunto curiosa.

Kanao alzó su vista para ver a su amiga/cuñada Nezuko, la más bajita era un grado menor que ella.

Kanao: si, si... Sólo estoy cansada -dijo agotada.

Nezuko: oh~ mi Onii-chan te envía esto y se disculpa por no poder venir hoy.

Kanao se sonrojo un poco al ver el pequeño bento de comida que su querido novio seguramente había hecho para ella, Tanjiro y ella habían empezado a salir hace 1 mes y el castaño pelirrojo siempre le traía un bento para que lo comiera, pero justo ayer se había enfermado y no podía asistir a sus clases por unos días.

Kanao: deberías decirle que no debería cocinar estando enfermo -murmurro seria.

Nezuko: no te preocupes, lo hice yo...

La más bajita se había puesto colorada ante sus propias palabras, sabía lo importante que era para Tanjiro llevarle Bentos deliciosos a Kanao y no quería que su querido hermano mayor sufriera por ello así que le había dicho que ella lo haría.

Kanao: wow, estoy segura que sabrá delicioso -dijo con una sonrisa.

Nezuko sonrió levemente al oír las palabras de Kanao, desearía que Kanao le dijera eso todos los días o incluso darle Bentos cada día y recibir los besos de Kanao.

Si Nezuko estaba enamorada de la novia de su hermano y no la culpen, todo era la culpa de Kanao por ser tan irresistible que cada que veía sus ojos se perdía en ellos.

Nezuko: gracias... Debo volver a mi clase -dijo sonrojada.

Kanao se acercó a Nezuko y le dió un beso en las mejillas como muestra de agradecimiento, la menor se puso colorada y simplemente se fue a su clase sin poder creer lo que había pasado.

Kanao guardo el bento de Nezuko en su mochila de manera cuidadosa y se fue al jardín, su profesor de economía no había llegado así que quería aprovechar para descansar un poco.

Cuando llegó al jardín se acostó en el pasto rezando para que Inosuke y Zenitsu no se fueron encima suyo como siempre.

No entendía como Tanjiro podía aguantar a esos 2 todos los días de su vida, ella a duras penas los aguantaba y los conocía cuando eran niños.

Sin darle muchas vueltas al asunto cerro sus ojos para dormir un rato pero el grito de Zenitsu la despertó.

Zenitsu:¡Kanao-chan!.

Sin poder reaccionar Zenitsu se colgó encima suyo como si fuera un árbol y él un koala.

Kanao:¿Que pasa? -murmurro cansada.

Zenitsu:¡El jabalí estúpido no me deja en paz!.

El rubio se abrazo más a ella esperando la llegada de su amigo ojiverde, Kanao suspiro cansada y pellizco a Zenitsu para que dejara de sujetarla tan fuerte.

Zenitsu:¿Eh?.

Kanao: no es mi problema -dijo agotada.

Antes de poder terminar Inosuke llegó con esa actitud violenta que caracterizaba al chico de pechones azules.

Kanao suspiro sabiendo que no podía dejar al chico a su suerte, sabía que después se quejaría y no quería aguantarlo o siguiéndola cuando fuera a ver a su querido cabeza dura.

Kanao: Inosuke no golpees a Zenitsu.

La pelinegra sabía que nada de eso funcionaría y es que Inosuke si a duras penas escuchaba a sus hermanos ¿Por qué la escucharía a ella? Pero grande fue su sorpresa al ver que el chico cambio un poco de su carácter violento.

Inosuke: como sea, molestar a Momitsu sin que esté Kompachiro es aburrido -dijo tranquilo.

Kanao sonrió aliviada de no tener que lidiar con el chico, lo que no sabía era que el ojiverde la miraba con un pequeño brillo en sus ojos por aquella sonrisa y también estaba el rubio que tenía una sonrisa de idiota enamorado, aunque siempre la tenía.

La ojirosada creía que podía descansar un rato pero la campana sonó dando inicio al descanso, genial, ahora tenía que aguantar el ruido molesto de sus compañeros con un jodido dolor de cabeza.

Kanao suspiro y deseo que Tanjiro estuviera allí, dándole amor y cariño como siempre lo hacía y también dándole calma y tranquilidad para olvidar el ruido cuando no se sentía bien.

Zenitsu: vamos a comer con los chicos.

Kanao no dijo nada y acepto la invitación de su amigo rubio, los 3 jóvenes se fueron a la cafetería para comer.

Aoi: es raro estar sin Tanjiro...

Genya: ni que me lo digas...

Senjuro: ojalá que mañana vuelva...

Kanao: apoyo a Senjuro...

Mientras que los 4 jóvenes tranquilos hablaban del cabeza dura los otros 2 discutían sobre algo estúpido.

Después del descanso todos volvieron a sus clases y Kanao quería que la tierra se la tragara de una maldita vez para no tener que aguantar la molesta voz de su profesor de física numérica.

Después de una eternidad en las clases Kanao al fin pudo salir de allí, estaba esperando tranquilamente a Nezuko para acompañarla a casa.

Nezuko: gracias por esperarme -dijo con una sonrisa.

Kanao: no hay nada que agradecer, por cierto el bento que hiciste era deliciosos, ahora noto que el talento culinaria viene de familia -dijo con una sonrisa.

Nezuko se sonrojo y le sonrió alegremente a Kanao, ambas chicas se fueron a la casa de la más pequeña.

Cuando llegaron Kanao dejo el bento y se fue al cuarto de Tanjiro.

Tanjiro: Kanao ¿Cómo estuvo la escuela hoy? -pregunto curioso.

Kanao: bien, aunque molesto sin tu presencia -murmurro cansada.

Kanao se sentó junto a Tanjiro mientras le daba cariños en la cabeza.

Tanjiro: durmamos juntos -dijo tranquilo.

Sin darle tiempo de reaccionar Tanjiro abrazo a Kanao de la cintura y la acostó a su lado con una sonrisa poniendo sonrojada a la chica.

Tanjiro: te amo Kanao.

Kanao: también te amo Tanjiro.

Kanao le dió un beso en la frente de Tanjiro y se acurrucó en su pecho, definitivamente Tanjiro era su tranquilidad y nadie podía cambiar eso.