Monstruos con piel de humano

I

*Nota de autora*

Hola, y sean bienvenidos a este One-shot, que me sentí en la obligación de escribirlo. Esta historia está inspirada en un doujin que encontré en Internet, en el cual Eren está escondido en los antiguos cuarteles de las Tropas, y sufre de las atrocidades que puede cometer el ser humano. No pretendo que sea una lectura agradable para muchos, pero espero le den una oportunidad a esta historia corta

Voy a situar un poco el contexto de esta historia

-Los acontecimientos se situan después del juicio de Eren

-Eren permanece escondido y sirve como "ramera"

-¿Que diablos es esto?-había preguntado un pelinegro de baja estatura y ceño fruncido a su superior, mientras señalaba un informe, arrugado entre la fuerza de sus manos, con las que ha matado personas y titanes por igual. El hombre al otro lado del escritorio, un rubio alto de ojos celestes fríos y calculadores, le dedicaba una sonrisa de aspecto profesional

-Quiero que te encargues de la educación del sujeto en cuestión-señaló, sin dejar aquel tono condescendiente y estrictamente mecánico.

El sujeto en cuestión no era más que un muchacho de 15 años de nombre Erenn Jaeger, al cuál le habían visto la cara unas muy contadas veces; la Policía Militar quería hacerse con el muchacho, para poder experimentar con él, o más específicamente, de experimentar con aquella capacidad con la que el muchacho había sido maldecido: La capacidad de volverse titán. Por supuesto que el Comandante Irvin Smith, de la Legión de Reconocimiento, debía interferir; poseer a aquel chico entre sus filas sería una pieza perfecta para sus planes, pues sabía que las altas cabezas del reino temían a aquellos seres de prominente estatura

...Desaprovechar el tener a alguien como ese joven sería llanamente estúpido...

-¿Y? ¿En lugar de tirarlo en el frente, vas a dejarlo como alimento para los cerdos?-repuso el pelinegro, con la tonalidad más venenosa y mordaz que pudo manifestar

-Levi, aunque esa no es la forma más elegante para decirlo...exactamente es eso...-contesto el rubio, mientras apoyaba un codo en la mesa

Levi arrugó el papel y miró a su superior, con cierto recelo en la mirada de color grisáceo

-Es solo un mocoso de 15

-No está en tu posición interferir en las decisiones de los demás-Irvin se levantó del escritorio y caminó hacia la puerta, dándole la espalda al más bajo-Además, ya está decidido. Significará más trabajo para tí, pero estoy contando contigo en esto, así que no me falles Levi-Irvin se acercó a la puerta y esperó paciente la respuesta. Alcanzó a escuchar un chasquido de lengua y el "Sí señor" afirmativo, señal para salir de aquella oficina

"Maldito fenómeno", pensó Levi y salió de la habitación al poco rato, pensando en cómo decirle a un chiquillo que de ahora en adelante, iban a utilizarlo para satisfacer los deseos sexuales más retorcidos

Eren estaba ayudando a Petra en las caballerizas. En sus manos cargaba una pila de heno, para alimentar a los caballos de sus superiores; no era el trabajo más gratificante, pero en compañía de aquella menuda y amable pelirroja se le hacía más relajado

-Eren-clamó una voz profunda a la distancia

-¡Capitán!-exclamó asombrado el pelicastaño al ver a Levi. Hizo el saludo de la Legión y lo miró fijamente, acción que imitó la pelirroja

-¿No importa que te lo quite un segundo?-preguntó el pelinegro a Petra, a lo que esta asintió sonriente-Sígueme, a mi habitación-había ordenado al menor, a lo que este lo siguió a paso veloz