╰►1 O ⸙͎

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— ¡Quiero su jodida cabeza!

Caminaba de un lado a otro sin un ritmo fijo el hombre mayor mientras sostenía el comienzo de la extensión de su nariz, irritado ante la noticia recibida por parte de uno de los hombres de Dmitry. El castaño negó con su cabeza, soltando una inevitable risa cansina mientras se disponía a comenzar con el análisis de ruta del próximo viaje que tomarían en trayecto, Alaska sería el próximo lugar que visitaría parte de los sobrevivientes de la conversión.

— ¿Lukyan?

— ¿¡No se supone que estabas a cargo de Hwang!?, ¿¡A quién mierda tratas de tomarle el pelo, Nikolay!? — El hombre lucía furioso, casi perdiendo todos los estribos que le quedaban, ya que había lanzado la copa de Vodka que sostenía entren sus manos. — ¿Te parece gracioso, imbécil?

— No nos matarán por la muerte de Lukyan, su padre no lo sabrá.

— No lo harán, pero es un desperdicio en la inversión que hicimos en él.

— No debe estar lejos, no es la primera vez que lo hace y lo sabes.

— Y será la última.

El hombre de cabellos largos atados en una coleta alta, observó al hombre mayor de Corte militar y cabello completamente blanco caminar en dirección a su escritorio, lleno de planos, cartas, un par de cuadernos pequeños y un arma sobre la parte más visible de éste. De uno de los cuadernos, sacó una fotografía, la cual entregó a Nikolay, quien desconcertado, observó al pequeño chico en la imagen.

— Cuando lo encuentres, dile de mi parte que tendré la cabeza de ese chico sobre mi escritorio si vuelve a cometer alguna estupidez, porque ya no volveré a tomarla por alto.

— Señor… Tan sólo tiene dieciséis años…

— Y precisamente por eso, Hwang debe aprender a mantenerse al margen, para no dañar a quienes más aprecia, desconozco su relación con ese joven, pero si es necesario eliminarlo para mantener a Lukyan en la palma de mi mano, no duraré en hacerlo.

— Pensaba que usted era el más cuerdo.

— La cordura es un pequeño hilo que cuando no soporta más la tensión y los problemas, se convierte en un tornado arrasador, los actos de Hyunjin serán quienes terminen por lastimar a sus cercanos, no yo.

Finalmente, Nikolay observó al superior marcharse hecho una furia en busca de su llave, y lo sabía muy bien. Hwang Hyunjin era el experimento más capacitado para tomar el mando del Distrito en un futuro, pero éste mismo parecía negarse a su inevitable final. Aquel que alrededor de las tres y media de la mañana, escapó de forma silenciosa de su “Habitación” por no decir celda.

Ninguno de los guardias se percató hasta finalmente encontrarse ahí, buscando por la espesa nieve al chico de dieciocho años que había logrado fugarse nuevamente sin mucho problema.

El Distrito entero entró en Código Carmesí, lo que quería decir una fuga inesperada, había sido en un momento clave de la noche.

Y así pasaron nueve días, nadie tenía noticia sobre el paradero del ángel negro. Como si la tierra lo hubiera devorado, era algo que tanto Nikolay como Minho no tenían ni la menor idea de a dónde pudo haber escapado. Pero si de algo estaban seguros, era que volvería. Y posiblemente no sería recibido con los brazos abiertos.

Aquello fue confirmado por Lee, quien con la poca fe que le quedaba, recurrió al último lugar que pensó colocar un pie, en las fauces del bosque, donde solamente podían recurrir estando armados y con equipo táctico debido a la aparición frecuente de osos y manadas de lobos salvajes. Y así lo encontró.

𝐋𝐨𝐯𝐞𝐫 𝐎𝐟 𝐌𝐢𝐧𝐞 - 𝐇𝐲𝐮𝐧𝐢𝐧Donde viven las historias. Descúbrelo ahora