ℭ𝔞𝔭𝔦́𝔱𝔲𝔩𝔬 5: 𝔄𝔫𝔡 ℑ 𝔯𝔬𝔞𝔪 𝔱𝔥𝔢 𝔰𝔱𝔯𝔢𝔢𝔱𝔰

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Al principio Will tuvo miedo de aquella idea. Warren le había pedido que entrara al bosque pues ahí iniciaría su "cita", y mentiría si dijera que no estaba paranoico por el hecho de que un vampiro le haya guiado hasta un lugar solitario donde probablemente si lo asesinaban no encontrarían su cadaver en semanas. Tampoco ayudaba mucho que estuviera anocheciendo.

Pero, luego caía en cuenta de que era Warren, y Warren no le haría daño.

¿Verdad?

—¿Estas bien? Tu corazón esta latiendo igual de rápido que el de un ratón.

La repentina la voz grave hizo que saltara en su lugar, aún no podía acostumbrarse a las apariciones repentinas del vampiro.

—¿Es esta la parte en la que bebes mi sangre y me entierras en lo profundo del bosque donde nadie puede encontrar mi cuerpo?

Bromea Will, aunque ese granito de miedo a estar hablando enserio seguía presente en su estómago.

—Muy gracioso.

—Sabes, me invitaste a salir pero ni siquiera sé a dónde vamos.

—Hay que caminar un poco... ¿puedes correr rápido?

—No lo sé, ¿qué es rápido para alguien como tú?

El de cabello largo se rió y luego Will estaba sobre su espalda y estaban prácticamente volando por el bosque, antes de que el más pequeño pudiera parpadear dos veces, estaban allí, al borde de un enorme campo abierto dividido por una zanja. Luego Will estaba de vuelta en el suelo.

—Eso fue... ¡totalmente asombroso!

Gritó eufórico rebotando sobre sus pies y balanceándose un poco, Warren colocó su mano en la parte baja de la espalda de Will para estabilizarlo y evitar que se cayera. Cuando finalmente tuvo sus piernas en la tierra se dio cuenta de lo que pasaba a su alrededor. Esta era la frontera entre Forgingville y el territorio humano.

—¿Qué hacemos aquí?

—Quería que fueras conmigo a un concierto de una banda humana que me gusta.

—Oh.

Estaba sorprendido, también confundido, le agradaba la idea de acompañar al chico a disfrutar de su música favorita, de hecho era algo verdaderamente tierno de su parte. Pero mezclarse con los humanos podía ser peligroso, si descubrían a Warren estarían en serios problemas, ni siquiera quiere pensar en cómo reaccionaría su padre si supiera que pisaría tierras ajenas.

—¿Estas seguro? ¿Y si nos descubren?

—Pasarás desapercibido y no creo que nadie sospeche de mi apariencia en un concierto de Metal.

Es como si hubiera pensado en cada detalle incluso antes de haber invitado a Will, tenía todo bajo control, y el Stronghold podía confiar ciegamente en eso. Warren volvió a cargarlo y en un salto pasó volando la reja de metal.

De camino al concierto hablaron de millones de cosas insignificantes, graciosas y estúpidas, disfrutaban hablar con el otro, nunca se quedaron sin tema de conversación. Ni siquiera había empezado la noche y Will no paraba de sonreír. Cuando llegaron a su destino el más bajo empezó a ver a los humanos, era la primera vez que tenía contacto con tantos sin embargo, Warren parecía inmune. Inconscientemente tomó del brazo al vampiro quien escuchaba sus temerosos latidos.

—Tranquilo, ellos te tendría más miedo a ti que tú a ellos.

—¿Cómo lo haces?

—Estoy acostumbrado. Mi padre trabaja en los bancos de sangre de la zona humana.

𝚃𝚑𝚎 𝙶𝚘𝚘 𝙶𝚘𝚘 𝙼𝚞𝚌𝚔Donde viven las historias. Descúbrelo ahora