𝚃𝚑𝚎 𝙶𝚘𝚘 𝙶𝚘𝚘 𝙼𝚞𝚌𝚔

ℭ𝔞𝔭𝔦́𝔱𝔲𝔩𝔬 7: 𝔗𝔥𝔞𝔱 𝔦𝔰 𝔫𝔦𝔠𝔢 𝔱𝔬 𝔢𝔞𝔱

La escuela necesitaba un poco de ayuda para los preparativos del baile de bienvenida, la directora Powers eligió al azar estudiantes de niveles bajos para ayudar a los de último año, fue una terrible coincidencia que enviaran a Will al grupo de los vampiros de año superior, y aclaró "terrible" pues en aquel grupo de cuatro inmortales y una Yetii no estaba, o mejor dicho aún no aparecía Warren. Solo faltaban unas semanas para aquella fiesta, Will se encuentra en una mesa rodeado por todos, supuestamente Peace vendría en cuanto alguien pudiera encontrarlo.

Los cuatro estaban discutiendo sobre lo que harían en las vacaciones de invierno, Will no estaba prestando mucha atención a la conversación, solo captando palabras ocasionales sobre el nuevo tipo que le gustaba a una de las vampiresas llamada Penny, y los consejos de la Yeti llamada Brittney Wilson sobre cómo invitarlos a salir. La rubia tenía una presencia fría, su piel pálida y azulada parecía brillar por la escarcha de su cuerpo, aunque ella siempre usa un collar de cristales de hielo para mantener su entorno directo a una temperatura adecuada para ella. El castaño había escuchado muchas historias sobre las criaturas legendarias que eran los abominables hombres de las nieves, y sin duda la chica era demasiado bonita para creerse que era familia de algo nombrado "abominable".

—¿Y tú, Brittney? ¿Alguno ha llamado tú atención últimamente?

Penny le devuelve la pregunta y Will hace lo posible por ignorar la conversación y seguir escribiendo cosas nuevas en una lista y tachando las ya hechas, aunque la chica solo se encoge de hombros en lugar de poner los ojos en blanco.

—No, eso creo...

Dice con calma. Inmediatamente, las dos vampiresas y el chico restante llamado Onnoval comienzan a bombardearla con preguntas sobre este tipo misterioso, y por una vez, Will tiene un interés silencioso. Era mejor que mirar fijamente al techo y esperar a Warren, o tener que escuchar a Penny hablar de las viseras que sirvieron en la cafetería.

—¡Sé lo que eso significa! Te gusta alguien, oh, dinos quién.

Grita la segunda inmortal llamada Karenina, con su largo cabello negro moviéndose de un lado a otro mientras sonríe emocionada. Como intuyó, Brittney puso los ojos en blanco por la insistencia, pero incluso Onnoval parecía interesado. Parecía que no era todos los días que a la rubia le gustaba alguien.

—Te ríes como una hiena.

Brittney dice crudamente. Karenina se curva de nuevo en sí misma y se encoge de hombros con una pequeña sonrisa.

—¡Vamos!, solo queremos apoyarte.

—Sí, Bri. Somos tus mejores amigos. Además, lo menos que podemos hacer es tratar de reunirlos.

Penny menciona, Brittney sacude la cabeza y se ríe sarcásticamente.

—Sí, porque ustedes dos tienen un historial tan bueno de mantener novios, como si yo tomara consejos de personas que no pueden conseguir una tercera cita.

Dice y Will no puede evitar reírse de eso. La morena estrecha los ojos juguetonamente al castaño, sin contener malicia.

—¿Eso es gracioso para ti, Stronghold? ¿Dónde está tu novia, eh?

Ella dice, pensando en más insultos ingeniosos pero el chico solo sonríe perezosamente.

—Bri, si no nos lo dices, ¡te arrepentirás toda tu vida!

Karenina llora. La rubia no parece impresionada.

—Oh, ¿sí? ¿Y eso por qué?

—Oh, ¡solo dinos ya! Deja de ser tan difícil.

Penny afirmó. Si hubiera venido de alguien además de ella, Bri tendría carne fresca para toda la semana. Por suerte, la chica Yeti cedió.

—Bien, pero si alguien se ríe o se lo dice al chico antes que yo, les juro que conseguiré agua bendita y los rociaré. Eso no es una amenaza; es una promesa.