•𝟱•

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Apo había empezado desde hace dos semanas a presentar unos horribles síntomas, tenía náuseas matutinas, mareo y un extremo cansancio que le obligaba a estar en cama.

Estaba pálido y había empezado a adelgazar extremadamente rápido por los vomitos y la pérdida del apetito.

Sabía de que se trataba pero aún tenía la esperanza de que solo estuviera enfermo, se acercó al lavabo con nerviosismo y tomó la prueba mientras cerraba los ojos con fuerza rezando porque fuera negativa.

Abrió los ojos poco a poco antes de leer "Positivo" apareció en la pantalla.  soltó un suspiro pensando en que iba a hacer ahora y de tan pensar como su esposo iba a reaccionar lo hacía temblar.

—Apo, ¿Que tanto haces ahí adentro?—Dijo Mile tratando de abrir la puerta se escuchaba molesto.

—Salgo enseguida—Susurre escondiendo la prueba dentro de mi camisa arreglé mi ropa y salí.

—¿Que tanto escondes?—Dijo acercándose a mí

—Nada, estaba doblando la ropa—Hablé sentándome en la cama—¿Vas a Salir?

Él asintió mientras se colocaba loción en puntos exactos, amaba su olor pero ahora hacía que mi estómago se revolviera, tapé mi boca y corrí al baño a vaciar mi estómago.

—¿Que es esto?—Susurro levantando la prueba que se había caído de mi camisa cuando corrí al baño.

Lo mire con miedo pero no dije nada.

—Te pregunte, ¡¿que qué es esto?!—Gruño tomándome de los hombros con fuerza.

Solloce negando mientras veía la furia escrita en su rostro

—T-Te juro que trate de que no pasará, pero esto es culpa de los dos Mile—

No podía entender como mi dulce esposos se había transformado en un ser que te le tuviera miedo

—¿Mi culpa?, ¡yo no te obligue a abrir las piernas como una fácil!.

Bufé antes de soltarle una bofetada, su mandíbula se tenso pero solo me empujó y se fue dejándole solo mientras sentía como mis lágrimas bajaban con libertad por mi rostro.

(...)

Mile tomaba de su copa de vino mientras veía por la gran ventana de su oficina, su mandíbula seguía tensa estaba demasiado molesto que tiro la copa al suelo dejando los vidrios y un poco de aquel rojizo vino en el suelo.

—Daddy—Sonrió Tawan entrando a la oficina abrazándolo por detrás.

—No es un buen momento Tawan—Bufo Mile apartando.

—Necesito dinero Mile, elevaron la cuota de la universidad—Hablo Tawan sentándose en el sofá.

—No puedo ahora Tawan comprende, no soy tu jodido bancó personal.

Tawan frunció el ceño levantándose bruscamente.

—¡Sabias cuales eran mis condiciones y ahora no quieres cumplir, todo es por ese verdad!

—Ese, es mi esposo y tu también sabias que era casado así que ahora no me jodas y lárgate—Gruño viéndolo.

Tawan levantó su mano para intentar golpear a Mile en el rostro pero fue detenido por la mano del mayor quien lo tomó con brusquedad del cuello.

—Escúchame bien zorra, aquí se hace lo que yo diga y si digo que te calles y te largues es lo que harás, ¡entendiste!

—¡S-Si, Suéltame!—chillo golpeando la muñeca de su amante.

Mile lo dejó caer al suelo alejándose, Tawan trataba de recuperar el aliento.

—Bien, pero después vendrás llorando a mis pies Mile phakphum.

Tawan salió de la oficina de su amante se sentía humillado pero esto no se quedaría así, y le haría una visita especial a alguien.

•••Dɪᴠᴏʀᴄᴇ••• (Mɪʟᴇᴀᴘᴏ)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora