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Lily habia llamado a James hace un tiempo, le decia que queria hablar con el, pero James siempre la evitaba como si supiera que queria decir su esposa. La cosa es que cuando ambos hablaban asi es por algo muy serio, por eso a James le asustaba pensar de que queria hablar su querida Lily.
Luego de unas semanas, se tomo el tiempo para pensar y calmarse para hablar con ella, su hijo Harry de apenas 5 años se encontraba jugando en el jardin de su casa mientras sus papás hablaban no muy cerca pero tampoco lejos de el (Harry le encantaba jugar a las escondidas y aveces se escondia de ellos)
─James, lo estuve pensando y... quiero el divorcio.─ James la miro sorprendido por la confesión repentina, su "esposa" si aun asi podia llamarla, saco una carpeta con los papeles del divorcio. James comenzo a preguntarle que porque hacia esto, Lily no respondio.
Solo para echarle mas sal a la herida, tambien se quedaria con el niño, que no dejaba de llorar por su mamá. James estaba devastado, se sentia acabado, Harry no paraba de llorar desde entonces, sus mejores amigos cuando escucharon esto fueron a apoyarlo por obvias razones.
Era simple; Sirius y James trabajaban y compraba cosas, mientras que Peter y Remus cuidaban y jugaban con Harry. Obviamente no vivian juntos, esto solo lo hicieron hasta que Harry cumplio 6 y mas o menos no pedia tanta atención.
Desde los 6 James se encargo de cuidar al máximo a Harry, queria mucho a su hijo y luego del divorcio se prometio ser el mejor padre para el.
Al menos hasta que Harry se fracturo el brazo luego de su cumpleaños numero 7.
Su tio Sirius le dio una escoba, si, le compro una escoba a un niño de 7 años. Remus trato de detenerlo pero no sirvio de mucho. James un dia despues de esto saco a Harry a abrir sus regalos en el patio, el niño tenia curiosidad por la escoba que su padrino le regalo y se monto en ella
Pero en ese momento la escoba salio disparada y James trato de atraparlo, al final la escoba quedo atorada a un arbol y Harry cayó no muy alto, pero si lo suficiente para que su pequeño brazo se fracturara.
El menor lloraba desesperadamente y James solo entraba en panico, lo llevo en brazos hasta la casa y de ahi se aparecieron en San Mungo, unos medimagos los atendieron y James espero algo alterado pero ya se empezo a calmar un poco.
Luego de unos momentos llego una de las enfermeras a decirle que su hijo estaba bien ─Supongo que usted es el Sr. Potter, bien, su hijo va a estar en perfectas condiciones en un par de semanas no se preocupe, lo vamos a dejar con un medimago con experiencia en los niños asi que no tema. Es en el que mas tenemos confianza─
James solo asintió a eso y luego se fue en la noche, queria saber si su hijo de verdad estaba bien. Se prometio a el mismo ser el mejor padre para Harry y penso que lo estaba haciendo bien hasta ahora. No pudo dormir hasta las 2 de la madrugada.
