Mi alfa

:: Día 4 :: Nido ::

Seis meses ya habían pasado desde que el gran Dynamigth hablo abiertamente sobre su relación con Izuku, ocho meses desde que Camie dio la entrevista, si bien las cosas no fueron tan extremas si tuvieron varios incidentes. Izuku mantuvo la calma pero Katsuki no, respondió las dudas con toda su paciencia pero después de la insistencia regreso a su habitual carácter mandando a la mierda a cualquiera que quisiera opinar, eso ayudo a que disminuyera pero aun así de vez en cuando revivía el chisme.

Y aunque ambos estaban dejando atrás el incidente, Izuku comenzó a notar cierta conducta en el cenizo qué más que alertar le parecía tierna, Katsuki siempre fue sumamente ordenado y limpio, cada cosa tenia un lugar que debería permanecer limpio o de lo contrario él lo notaria provocado su furia pero Izuku compensaba bien pues al igual que el cenizo era sumamente ordenado y limpio, sobre todo con su colección, su sagrada colección de héroes donde Dynamigth tenia su propia pared llena de artículos variables, si definitivamente aun era un nerd pero a Katsuki le gusto e inclusive se unió agregando artículos, así que ya no era solo su colección sino de ambos y le encantaba, pero desde hace un mes hubo un cambio, el ojicarmin seguía siendo igual de ordenado y limpio en todo su hogar a excepción de su cama.


Izuku anteriormente tenia una cama matrimonial pero cuando Katsuki aumento sus visitas fue sustituida por una tamaño King, no le molesto al contrario tenían más espacio aunque ese espacio solo era, obviamente, para ellos, un par de almohadas y las mantas necesarias según la temporada sin embargo ahora había cojines de diferentes tamaños en colores negro, naranja y verde, varias mantas con diferentes texturas con los mismos colores y, lo más raro, ositos de peluche, aunque gracias a eso ahora tiene uno de Dynamigth qué es su favorito y que usa para dormir sobre todo cuando a su alfa le asignan el patrullajes nocturno. Bueno no tendría problema con todo eso que ocupa el 50% de su cama si tuviera un orden sin embargo parecían arrojadas al asar y aunque quiso darles forma en una ocasión Katsuki le gruño como nunca había sucedido provocando instintivamente qué él también gruñera en respuesta, finalmente eran alfas los dos pero entendió que tenia que aprender a vivir con ese nuevo hábito de su pareja, aunque si no fuera por su increíble físico, aroma y lo bien comprobado qué tenia de su casta supondría qué Katsuki creo un nido en su cama, era tierno sumamente tierno si nos basamos en la idea de que los omegas crean un nido donde se sienten seguros y es su lugar sagrado, solo aceptarán al alfa con el que se vincularon y donde sus cachorros descansarán, claro que no era un omega ninguno de los dos y tan poco tendrían cachorros, era tierno pero raro e irracional pero no hacia daño.

Abrazo fuerte su osito favorito en medio del qué parecía un nido desordenado, estaba triste pues Katsuki estaba en una misión de quince días de los cuales ya transcurrieron la mitad, mitad qué transcurrió completamente solo apegado a su rutina, casa – trabajo, no amigos no nada que saliera de eso, todas las noches tenia llamadas con su novio pero no era suficiente y por eso estaba hundido en medio de la cama rogando por que la misión terminará y su alfa regresará con él, sus lágrimas caían sin qué quisiera detenerlas abrazando al osito de Dynamigth, hundiendo su rostro en la almohada qué suele ocupar su pareja y moqueandola de paso, escucho el sonido de la cerradura después de ingresar el código indicando la llegada de alguien, alzó un poco su rostro olfateando y cerrando sus ojos para percibirlo aun mejor, no era su Kacchan.

Gruño quedito, era uno de los amigos de Katsuki, le caían bien, principalmente Denki qué era un amor pero el que vinieran a "checar" como estaba le molestaba, no era un niño pequeño, sabia cuidarse y bueno... Estaba triste y era normal, quizás olvidaba comer bien o comer en general pero su higiene era buena y seguía cumpliendo sus responsabilidades, solo se sentía sólito. Escucho la puerta abrirse – ¿Midobro? – Suspiro, era Kirishima, le vio entrando a su recamara dirigiéndose a las cortinas, abriéndolas y dejándole el paso a la luz de la luna, abrió también la ventana pues sus feromonas amargas inundaban toda la habitación y después cometió un error, un gran error.

Solo tenia que ir a ver a la pareja de su mejor amigo, le parecía gracioso como ese alfa peliverde fuera tan sentimental pero le sorprendía aun más el como Katsuki le había casi ordenado ir a verle diariamente con tal de que el chico no se sumiera en la tristeza pero él era un buen amigo por lo que acepto a la petición, sin embargo al entrar a la habitación por primera vez el desorden de esa cama lo asusto, mantas, almohadas, cojines, peluches y un alfa sollozando hecho bolita, asumió completamente asustado qué Izuku estaba deprimido a grados alarmantes, no podía dejar las cosas así y como impulso de una madre qué había encontrado a su cachorro en ese estado comenzó a tomar las mantas más cercanas a la cama o al menos eso intento, solo pudo medio agarrar una de las mantas naranjas cuando escucho un gruñido qué solo podía ser comparado con los de Katsuki en su estado más violento, rápidamente las feromonas pasaron de ser amargas a picantes, un alfa enojado, no entendía y aun menos cuando dicho pecoso alfa salió de su enredo de cobijas mostrando sus blancos colmillos y un tono dorado cubría el precioso verde, estaba jodido.

No podía dejar de reír, le dolía inclusive el estómago de tanto hacerlo pero es que ver a su mejor amigo con un ojo morado e hinchado junto con el labio roto siendo su peculiaridad la qué le permitía endurecer su jodido cuerpo y protegerse, era sumamente gracioso, sumado a la ecuación su pecoso con la cabeza gacha avergonzado por su comportamiento, ¿que tan furioso tubo que estar su nerd para lanzarse a los golpes contra un jodido héroe profesional? No lo sabia y estaba seguro de no querer presenciarlo, aunque quizás seria sexy de verlo siempre qué él no fuera la causa, volvió a reír.

Ahora Katsuki estaba molesto por dos jodidas razones de mierda, tras poder calmar su risa y escuchar la causa de tal evento se encontró con dos detalles, primero su pecoso aseguro que lo que había hecho con su cama era un puto nido, como si fuera un jodido omega, claro que no lo era y el no hacia nidos aunque lo que le siguió en la verborrea del peliverde enfoco su furia a otro hecho, el imbécil había tocado su manta naranja ¡Su jodida manta naranja! Todo en su linda cama había sido colocado estratégicamente por él, hasta su nerd lo respeto no tratando de mover nada del perfecto y armonioso lugar donde él eligió y el maldito pelos de mierda se atrevió no solo a entrar a su puta guarida sino que también toco una de sus pertenencias, ese era su... Debatió un poco al no saber que palabra serviría para definir su trabajo, por ahora seria su "nido" después pensaría más a detalle, pues no era un nido.

Estaba molesto e ignorando a los presentes se dirigió rápidamente a su habitación topándose con su "nido" deshecho, todo estaba fuera de lugar,  y ahora entendía el porque del comportamiento del peliverde, inclusive considero que era insuficiente un ojo morado y labio roto – Si quieres vivir ¡Largo de aquí Kirishima! – Gruño, el contrario entendió el mensaje pues en segundos abandono el departamento - ¡Nerd! ¡Trae tú puto trasero aquí! – En ese momento Izuku deseo haber seguido a Kirishima pero fue lento, muy lento, al llegar a la habitación fue arrojado sin delicadeza alguna a la cama – Escoge tú maldito lugar y no te muevas o te juro que te mato – Obedeció, era la mejor opción, observó como Katsuki ordenaba el "nido" nuevamente en completo silencio, se mantuvo quieto como nunca hasta que su osito favorito estaba en camino de ser acomodado fuera de su alcance, si lo permitía jamás podría volver a tenerlo sin una pelea de por medio, temeroso pero decidido recuperó a Dynamigth oso escuchando un gruñido - ¡Es mío! – Grito abrazándolo y ubicándose en la posición anterior, no tubo respuesta así que se limito a obedecer sin soltar a su protegido y sin más se quedo dormido mientras a su alrededor Katsuki hacia un nuevo "nido" donde su Deku era la pieza central.