Love Cure || ChanSoo [Terminada]

I

La luz de la luna ingreso por la ventana, sus dedos se doblaron debido al placer. Sus uñas se clavaron en la ancha espalda de su amante mientras mordía su labio inferior para evitar gemir en alto el nombre del hombre que lo estaba llevando al cielo.

El cosquilleo delicioso recorriendo su cuerpo le aviso de lo inevitable, en el silencio de la noche llego a su orgasmo y el hombre sobre su cuerpo termino dentro de él.

Ambos con alientos acelerados se besaron, no dejaron espacio alguno para dudas, preguntas incómodas o silencios vacíos. Se necesitaban y aquel sentimiento incrementaba con el paso de los días.

Kyungsoo ya no lo podía negar, estaba enamorado hasta la médula de Park Chanyeol. Su paciente. Un hombre que le doblaba en edad, casado y con una hija de cinco años.

Sí, no era moralmente correcto lo que estaba haciendo y sin duda alguna no estaba dentro de sus planes enamorarse perdidamente de aquel hombre serio y con sonrisa solitaria. Claro que no, pero la convivencia continua por medio año, las caricias sutiles bajo la mesa, las invitaciones con voz ronca a dormir juntos... fue simplemente un cóctel de roces, palabras y sentimientos mezclados que hicieron ebullición en una gran necesidad de obtener mas del alto.

—Lo siento Soosie, creo que el condón se rompió nuevamente... deberías de ayudarme a comprar unos de otra marca —, Chanyeol susurro rompiendo el cómodo silencio.

Kyungsoo emitió una pequeña risilla, ayudo al "gigante", como le gustaba decirle en la intimidad a Chanyeol, acomodandolo justo al lado de su cuerpo. Aprovechando que la luz de la lamparita sobre la mesa de noche estaba encendida miro hacia sus muslos. Había un completo desastre de fluidos, su lubricante natural estaba goteando de su ano, combinado con la semilla blanca y espesa del semen de Chanyeol.

Realmente le gustaba verse así, lleno de la marca de Chanyeol. Era como si fueran el uno para el otro, al menos en esas horas que se daban amor.

Mientras limpiaba el exceso de fluidos miro a Chanyeol, acurrucado a su lado entre las suaves sabanas negras. Sus ojos eran azul claro producto de la ceguera, aún así no dejaban de ser hermosos. Brillantes y sinceros.

Acomodo mejor su cuerpo para poder abrazar a Chanyeol con brazos y piernas, despejó el cabello que se pegaba en la frente del alto y suspiro.

—¿Porqué estás suspirando Soosie? No creas que porque soy ciego no puedo entender las expresiones que haces... seguramente estás con un puchero tierno y los ojos ligeramente cerrados.

Kyungsoo sonrió, Chanyeol había atinado a su descripción. Besó sus labios y frotó sus narices.

—Quisiera hacer más por ti Yeol...

—¿Hablas de Rika o de mi hija?— con sus largos dedos comenzó a hacer corazones en la espalda de Kyungsoo —. La última vez que trate de terminar mi matrimonio... digamos que las cosas no salieron muy bien. — Sonrió con tristeza —. Te mereces algo más que una relación secreta, sabes que te he dicho que eres libre de cruzar esa puerta y no volver. No te juzgaria... eres muy joven, tienes una vida por delante. Estar conmigo solo... la trunca.

Kyungsoo frunció las cejas, se sentó en la cama y mordió su labio al sentir una leve molestia en su espalda baja. Golpeó sin fuerza el pecho de Chanyeol y exclamó aún en un susurro.

—No te atrevas a decir eso nuevamente Park Chanyeol. No se qué tipo de personas te has encontrado en tu vida, pero algo que debes de saber es que no soy como Rika. No te voy a dejar, voy a protegerte y amarte incluso si es lo último que hago en esta vida.

Chanyeol suspiró, busco a tientas la mano de Kyungsoo y al encontrarla la guío a sus propios labios para besarla.

—Eso me temo... porque sé que eres diferente deseo que seas libre. Soy una prisión... soy invidente, no tengo trabajo, dependo de mi esposa... no podría obtener la custodia de Irene aunque me arrodillara en el tribunal.

Kyungsoo iba a continuar con la discusión pero decidió solo suspirar, beso varias veces los labios de Chanyeol. Acarició su cabello y se levantó de la cama para limpiar lo mejor posible, abrió las ventanas de la habitación y se puso su pijama.

—Vamos... es hora de que te lleve a la habitación no queremos que tu mujer al llegar de su cóctel empresarial se de cuenta que estás en la habitación del enfermero.

Al pronunciar aquellas palabras no solo estacas de madera se clavaron en el corazón de Kyungsoo sino que también lastimaron a Chanyeol, pero el mayor sabía que era verdad.

—Esta bien...

Kyungsoo miró su reflejo en el espejo, su abdomen estaba ligeramente abultado. Frunció sus cejas y suspiro. No podía alejarse de Chanyeol, no ahora que su bebé pedía sentir el calor del cuerpo del alfa a todo momento, sentir su aroma a bosque y sus grandes manos acariciándole el cuerpo. Debía mantener el secreto.