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28 de Diciembre, 1523
Caminaba tranquilamente por los pasillos de aquel Palacio, iba en camino directo a los aposentos de Beyhan Hatun debido a que la Concubina había dado a luz finalmente en la fresca mañana del día vigésimo quinto del mes doceavo del año mil quinientos veintitrés...
Fue una situación muy preocupante gracias a qué la Hatun tan solo tenía 8 meses de embarazo, claro que corría un gran riesgo ante morir en el parto, ella, su bebé o ambos podían morir en el proceso...
Aunque estaba feliz ya que Beyhan Hatun había tenido a una niña, no sabía que nombre le podrían pero eso era de menos, lo que más quería era recibir una noticia sobre el nacimiento de una niña y Allah se lo concedió...
Aún tenía tiempo de buscar aliados para la guerra que se podía avecinar, no quería llevarse sorpresas así que comenzaba actuar desde ya...
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—— Tranquila Beyhan, aún tienes tiempo, el Sultán no te mantiene olvidada y eso es una ventaja para tí —— Decía una de sus criadas
—— Esque estaba segura que sería un varón, un Príncipe, yo sentía en mi interior que cargaba a un niño en mi vientre, pero lamentablemente resultó ser una niña —— Reprocha enojada mientras ve a su hija
—— No te desquites con tu hija, Reyhan no tiene la culpa de nada y eso debes de saberlo, aún tienes tiempo no se porque actúas así ——
—— Ayse, si estuvieras en mi posición lo entenderías todo más sin embargo no lo comprendes ——
La mujer suspira cansada, era algo tedioso tener que tratar con la Hatun, pero debía encontrar la manera de llevarla por buen camino y no dejar que se marchitara en el olvido de aquellas paredes del Harén...
—— Tu hija te necesita Beyhan, es solo una bebé que acaba de nacer, ¿Acaso le negaras tu leche solo por tu coraje? ——
Finalmente Beyhan Hatun mira a su hija con un extraño brillo en sus ojos, cierra los ojos mientras suspira profundamente, extiende sus brazos dando a entender que quería cargarla. Ayse victoriosa por lo que había logrado, le entrega la bebé con una sonrisa cálida...
Beyhan mira a su hija detalladamente, una lágrima cae sobre la mejilla de la bebé, Ayse tenía razón, Reyhan no tenía la culpa de nada, lo seguiría intentando pero mientras eso pasará ella cuidará de su hija como si su vida dependiera de ello...
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—— No esperaba esto, pero Beyhan es joven y podés darle muchos hijos a mi león en un futuro, claro si es inteligente —— Comenta la Valide
Hatice roda los ojos pues estaba harta de las palabras de su madre, le hostigaban demasiado, parecían hacer eco en su cabeza, un eco que le era tortuoso, un eco que era horrible y dolor de cabeza para ella..
—— No lo sé, nunca sabremos eso, Mahidevran es la única que tiene el amor del Sultán, Hürrem es solo un capricho y Beyhan es una mujer de un sola noche, no me sorprende para nada que solo quedará embarazada en la única noche que visitó a nuestro Sultán —— Opina Hatice sin contenerse
—— ¿Otra vez Hatice? —— Pregunta enfadada la mujer mayor
—— Todos me darían la razón madre, Mahidevran es una Sultana, Hürrem es solo una Kadin y Beyhan es solo una Hatun, es claro el gran poder que se llevan de la mano las tres ——
La mujer furiosa hecha de sus aposentos a su hija menor, maldiciendo el momento en el que Hatice se volvió unida con Mahidevran, pues le ponía mal y enojada de tan solo pensar en el futuro evidente que Hatice podía pasar...
