De Vuelta a Ti

Capitulo 20. ¿Descubiertos?

Bakugo habia estado huyendo de el, evitandole cuando intentaba cuestionarle que habia sucedido en el salón de clases, y algunos alumnos le miraban con bastante intriga, curiosidad, mas de la usual, y unos povos con miedo. No entendía que estaba sucediendo.

-Tal vez Kacchan solo esta estresado- el peliverde no le miraba a la cara al responderle, parecía querer decirle algo pero simplemente no lo hacia

Y no era el unico.

-¿eh? Ah en realidad Bakugo-san no habla mucho conmigo, deberias seguir insistiendole para hablar- la pelinegra se seco el sudor por el entrenamiento que habían estado realizando.

-Mmh Katsuki-chan es alguien con muchos secretos y cargas. Es lindo que intereses en su bienestar Shouto-chan. Pero debes cuestionarle directamente - Mina tenia a Sero con su cabeza sobre sus piernas mientras dormitaba pero le dio la razón a la chica al igual que el energetico Denki.

-Blasty es alguien muy cerrado con sus problemas, aveces me preocupa que cargue todo solo, pero con tu ayuda hombre seguramente sera todo mejor-

Todos evadían la respuesta que queria, pero al igual que en aquel sueño todo indicaba que debía ir directamente hacia el cenizo para obtener algo de claridad sobre las cosas.

"El no confia en ti" "eres muy debil" "solo le estorbas" "deja de darle problemas" "no sirves para principe y mucho menos para emperador" "eres un pésimo prometido que ni siquiera sabes que le pasa a Bakugo"

Aquellos constantes y negativos pensamientos invadían su cabeza haciéndolo perder los estribos. Bajo la mirada al escritorio que estaba parcialmente congelado bajo la palma de su mano haciendolo confundir, su magia no se habia salido de control antes ¿que estaba pasando?

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Estaba demas decir que el bicolor habia estado insistente en cuestionarle que habia sucedido, ni el lograba entender que estaba pasando.

Ninguna vez antes el menor se habia descontrolado de aquella manera fuera de las paredes de la habitación ¿que estaba sucediendo? Necesitaba claridad y respuestas.

Y no era el unico que las queria, Shouto habia estado realmente insistente en cuestionarle que habia sucedido ese dia desde semanas atras, el Emperador Enji se habia encargado de mantener todo lo mas en orden posible entre los alumnos aunque claro no era que tuviera mucho poder en la Academia, por no decir que este era casi nulo.

Suspiro pateando al arbol con el que estaba entrenando con la espada viendo a lo lejos al mitadalbino acercarse hacia el. Suspiro levemente mientras enfundaba la espada y le esperaba de brazos cruzados.

-Katsuki..- el bicolor le miro fijamente, abrio levemente sus labios pero se abstuvo de decir lo que realmente queria cuestionar - te llego una carta del Templo, autorizaron tu visita para hoy-

-¿asi?- tomo la carta leyendo la breve nota del Cardenal Aizawa asintiendo con la cabeza -Partire alli entonces,deberias quedarte a ayudar con los jodidos preparativos del Festival-

-De echo prefiero ir contigo - afirmo acercándosele para tomar su mano con bastante fuerza, el cenizo sintió un gélido frio venir de aquel inocente chico que habia estado intentando proteger y cuidar.

-Mmh ya que, haz lo que quieras- se solto comenzando a caminar para ir a guardar la espada y ordenar un carruaje para partir, escucho los pasos del menor siguiendole y simplemente no dijo nada.

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Uraraka miro a la ninfa entre los jardines de rosas y girasoles del Templo que habían sido plantados por ella, Shinsou y Aizawa, la pequeña rubia vestia una tunica blanca con una capa que cubria incluso su cabeza, era alguna de sus ropas "especiales" para las ceremonias de Oracion, realmente no le importaba que la otra la usara asi que se la habia dado para que pudiera salir de las paredes de la habitación.

-¿como te has sentido Toga-chan?- la castaña se inco a su lado mientras esta cortaba las malezas de los girasoles aquella mañana

-Mmh la herida ya no duele, sorprendentemente. Las baratijas de ese tipo suelen ser muy dañinas, no lo soporto. Daña la naturaleza y eso no me gusta - gruño levemente mientras apretaba la pequeña maleza en sus manos hasta hacerla polvo

-¿por que trabajas para el si no te agrada?- la castaña saco un pañuelo limpiando su mejilla manchada de barro

-No lo se, ha sido asi desde que naci. El estaba alli cuando abri los ojos. Los humanos son destructivos, dañan las cosas bonitas que me gustan y que amo. El prometio no hacer eso tambien si lo ayudaba- se encogio de hombros levemente

-Ya veo...- le miro fijamente y le sonrio- pero ya no tienes que hacer Toga-chan, puedes quedarte aqui, seguro pa...el Cardenal me lo permitira-

-Ocha-chan eres demasiado buena ¿sabes?-

-Por algo soy la Santa ¿no?- le sonrió tomandole de la mano -Deberiamos ir a alimentarte-

-Espera, no creo que...-

-Vamos, vamos, no me digas que no estas hambrienta- la rubia comenzo a discutirle a la dulce y amable castaña mientras ellas caminaban en dirección a la Sala de reso especial

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-¿me diras entonces que esta pasando?- el cenizo salia de aquella Sala especial donde podia hablar con tranquilidad con la diosa, que cabia decir que le regaño por ser tan cabezadura y querer seguir revolviendo todo por si solo

-Tdh ¿tu tambien vas a estar jodiendome estupido principe idiota?- gruño cruzándose de brazos mirando al bicolor

-Solo quiero saber la verdad Katsuki. Los demas solo me evaden la respuesta, los de la clase me miran extraño y...mi magia se descontrola de manera rara últimamente - bajo la cabeza apretando sus puños con fuerza -¿no confias en mi verdad?¿es por que soy un inutil principe y prometido?-

-¿que?¡no! Mierda no es eso- se le acerco tomando su rostro en sus manos y apretándolo con fuerza -Solo estoy protegiendote Shouto-

-Pero no necesito que hagas eso. Últimamente te vez muy cansado, estresado y como si algo te angustiara constantemente- llevo una de sus manos a las del contrario que estaban sobre sus mejillas -Quiero ayudarte, seremos esposos y los que protejan a nuestro Imperio, debemos hacer las cosas juntos-

-Tu...- fruncio el entrecejo con molestia y solto el aire -Bien...te dire lo que pasa, mierda deja de usar esa carita de niño en mi contra- pellizco su mejilla soltandolo, y antes de que siquiera alguno pudiera decir algo mas sobre el tema o alguna otra cosa mas una entusiasta Uraraka llegaba arrastrando a una chica rubia con la que jugueteaba y en algun momento se le cayo la capucha que la cubria

-Oh, Kacchan...- la castaña entonces se dio cuenta de la presencia de ambos y estaba por presentar a la rubia cuando un veloz Bakugo paso por su lado y sujeto a la chica del cuello

-¿¡que hace ella aqui Uraraka?!- le grito con molestia sosteniendo a la pobre chica que ni siquiera opuso resistencia y le sonrió al rubio

-¡BAKUGO SUELTALA!-

-¿¡por que tienes a esta maldita ninfa de la noche aquí?!- gruño mientras pegaba a la pobre chica contra la pared

-Hola....de nuevo Bakugo, volviste- le sonrió la de ojos dorados dejando estatico al de ojos rubie y con la mano temblando ligeramente