Soldier

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   Pensar tanto en los demás, a veces no te deja ni pensar en ti. En el caso de Sadie, pensar tanto en su familia no le deja pensar en si misma. ¿Por qué tanta importancia en que piense en ella? Pensar en ti también es bueno. Muchos suelen creer que es egoísta; no lo es, también eres importante, hacerlo demuestra cuanto te valoras y seguro que vales mucho. Como todos. La pelirroja tiene esas ideas locas de que ella es lo de menos, que pensar en su bienestar no es importante. Su mejor amiga, Rose, suele pedirle que piense por un momento en sí misma; le cuesta.

Ahí se encontraba ella, atendiendo a cada cliente con su mejor cara, pasando productos de un lado a otro para escanear su código y que el alto o bajo precio salga en la pantalla. Estaba presente en ese supermercado, pero su mente en otro lado; pensando en sus trabajos pendientes de la escuela, los medicamentos que tiene que comprar a su papá, llevar alimento para la semana, e incluso pensaba en la depresión que a veces le da a Rose. Todo lo que pensaba era sobre alguien más, ¿Dónde quedaba ella?

Rose: ¡Sadie! -Se escucho gritar desde lejos. Capto la atención de la pelirroja, quien ríe al verla con su pijama. Su mejor amiga es divertida y ama que nada le de vergüenza-  Carajo, ¿por qué estas en la última caja? -Se acerca a la chica y al estar a su lado se toma un momento para respirar, corrió tres calles, eso la agita-

Sadie: Estoy trabajando Rose, pudiste mandar un mensaje

Rose: Esto es importante

Sadie: ¿Pagará con tarjeta? -Le pregunta al cliente frente a ella, Rose gira sus ojos. Llego urgente y Sadie parece no darle mucha importancia- ¿No puedes esperar Rose?

Rose: No. Obviamente no, por algo corrí en pijama -Suspiró de la frustración, ella quería que Sadie la viera para saber que le prestaba atención y lo hacia, sin embargo no la veía- Vinnie me invito a una fiesta

Sadie: ¿Vinnie qué? -En menos de un segundo dejo de atender a cierto cliente para girarse y ver a su amiga rubia-

Rose: Ahora si me haces caso

Sadie: Cállate. ¿Hablas enserió?

Rose: Te lo juro -Sonrió pillina y Sadie la imito al verla hacerlo- ¿En mi casa?

Sadie: Si, dile a Alex que nos lleve

Rose: Perfecto

X: Señorita ¿ya casi?

Rose: ¿Se espera un momento? ¿Si? Gracias -Mira a Sadie de nuevo y sonríe- Esta noche será fabulosa

Sadie: Espera, ¿esta noche?

Rose: Si, esta noche. Por cierto, ¿te hacen descuento en condones por trabajar aquí?

Sadie: ¿Que?

Rose: No importa, tomaré unos, los pagas -Sin mas, la rubia se va a la farmacia del supermercado y obviamente pide sus preservativos a nombre de Sadie-

X: Señorita -El cliente llama a Sadie de nuevo y esta al fin sale de su trance-

Sadie: Si, lo siento señor

La pelirroja sigue atendiendo a cada cliente, ahora sin dejar de pensar en que ponerse para esa misma noche. Tenía que verse bien, más si era para que el chico que la trae loca la vea. Vinnie, un compañero de la universidad la tiene enamorada, aunque solo han hablado unas cuantas veces y por cuestiones de tarea, ella está enamorada. A pesar de que su mejor amiga le dice que él no es una buena opción, ella está ahí viéndolo como si fuera un gran monumento. Cuando se llegó su hora de salir, tomó un taxi y se dirigió al departamento de Rose, donde se vestiría para la ocasión. Al llegar fue a donde debía, entró y vio que ya se encontraba ahí su mejor amigo, Alex.

Alex: Hola Rojita -Besa su mejilla y le hace espacio junto a él en el sofá para que pueda sentarse a su lado-

Sadie: Hola -Sonríe y gustosa se sienta en aquel lugar-

Rose: ¿Listos para esta noche? Seguro que será grandioso

Alex: Yo no soy muy fanático de las-

Rose: Si, también nos emociona -Lo interrumpe y la pelirroja ríe ante esa acción; la rubia le es muy divertida- Tenemos que ir vestidos iguales, ¿algún color como opción?

Alex: ¿Iguales?

Sadie: Sería divertido. Como en los viejos tiempos

Rose: ¿Alguna opción? -Insiste y suspira al no oír una respuesta-

Alex: Yo traje todo color negro, no sabia que íbamos a vestir igual

Sadie: Negro me gusta

Rose: Yo iba a decir rosa pero supongo que negro esta bien

Desde ese momento todos comenzaron a vestirse, ambas chicas con ropa de la rubia y el chico con la ropa que anticipadamente trajo. Él en cuestión de minutos estuvo listo, en cambio, ellas tardaron horas; el maquillaje lo es todo para su vestimenta, debía ser perfecto. Cuando al fin estuvieron listas, todos subieron al auto del pelinegro y con música a buen volumen iban cantando en dirección a esa fiesta, riendo porqué Rose llevaba sus preservativos en el sostén; según ella uno nunca sabe cuando pasará su momento. Aún así ella está lista. Por otro lado, la chica de cabello rojizo iba con intenciones de hablar con Vinnie, al fin hacerlo sin tarea de por medio