Capítulo 6

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Han pasado tres días y aun no he podido averiguar nada, pues no hemos podido movernos con facilidad dado que Seong-Su ha dado aviso a casi toda la ciudad de la desaparición de su hija, y por debajo de lo que los medios publican, ha prometido una suculenta suma de dinero por mi cabeza.

Voy por un café cuando la veo hojeando el diario, leyendo acerca de su desaparición ya publicada. Le veo disimuladamente, sin decir nada, como su semblante se encuentra serio ante el periódico, concentrada.

- ¿Quieres un café?- Interrumpo su silencio. Cierra el periódico y me sonríe.

- Claro. - Es primera vez que tengo compañía y la verdad no sé mucho de cómo tratar a alguien, hace años que no lo hago. Estos días prácticamente no hemos hablado, aunque ella trate de entablar conversación conmigo, pero la evito, nunca he conversado con alguien. Es extraño saber que alguien más está conmigo, pero debo reconocer que no ha sido desagradable, no como yo lo creí. Aun así, mi trato no cambia, simplemente soy así, pero he tratado de ser amable.... Hasta cierto punto, claro.

- Te he ocasionado muchos problemas, ¿verdad? - Me dice cuando recibe su tazón, viendo de reojo el periódico el gran título "Secuestran a hija del empresario Im Seong-Su".

- Si. - Respondo secamente.

- Lo siento... -

- Deberías... no sé por qué dejo que te quedes acá más tiempo. - Veo su reacción, lo que me produce algo de remordimiento mis palabras, pero soy experta en no expresarlo. - En fin... tu padre igual me habría mandado a asesinar. - Digo para alivianar su carga, parece funcionar. Otro silencio prolongado, me gusta así, y ella parece entenderlo porque no ha contribuido con romperlo. Si, su presencia no ha sido tan molesta como imaginé.

- Jeongyeon... - No debí afirmar eso tan rápido.

- ¿Hm? - No le veo y muestro desinterés.

- Sé que no quieres hablar mucho, pero... ¿Por que mi padre quiere matarte?, aun no me lo has dicho... bueno, obviando el hecho de tratabas de matarlo. Es que no entiendo porque simplemente no deja esto a la policía. -

- Tú de veras no sabes quién es tu padre, ¿verdad? -

- Tengo mis sospechas, por eso no quiero volver hasta despejarlas. - Desvía la mirada.

- ¿Eso es todo? Yo puedo despejarlas por ti... tu padre es el hombre más poderoso de esta ciudad, se podría decir que es prácticamente el dueño. -

- Sé que es un hombre de influencias, pero... -

- No se trata de influencias Nayeon, se trata de poder... y el poder se gana no solo con dinero e influencias, sino con sangre. Y créeme, no es tan millonario solo por sus movidas en los negocios limpios. - El rostro de la chica muestra decepción, supongo que ha corroborado sus sospechas.

- Algo así imagine, me negaba a creerlo, pues me mantiene alejada de todos sus negocios, pero ahora puedo comenzar a verlo con mis propios ojos. He pasado los últimos dos años fuera del país, reflexionando sobre ello, pero ya es hora de saber la verdad. -

- Es que... ¿nunca pudiste notar algo extraño? -

- No... una que otra cosa no me calzaba, pero al preguntar siempre ha sido la misma respuesta: "no preguntes sobre negocios", y no insistí más. Pero a medida que crecí, comencé a sospechar y a hilar algunas cosas. - Le escucho con seriedad, sin decir nada.

- ¿Y porque irte con una asesina para descubrir la verdad?, aun sabiendo el precio. - 

- No lo sé la verdad... pero no quiero estar en casa... no con él. No es que no lo quiera, lo quiero mucho, él es un buen padre, pero desde que volví, volver a verle, me hace retomar mis sospechas que no me dejan dormir. Necesito saber la verdad... y si es así no lo perdonaré nunca. -

Ciudad del vicio. (2yeon)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora