Básicos

Básico 18: Rechazo involuntario

Nunca había estado tan cerca de un Omega en celo; tal vez no podía sentir sus feromonas pero sí podía sentir el calor que emanaba de su cuerpo mientras me abrazaba, una deliciosa calidez y un olor dulce y tentador, su cuerpo era suave, delgado y podría ser peligrosamente adictivo, la erección de Hoseok se frotaba sobre mi pierna de forma necesitada. Y esto seguramente no era el pico más alto de su calor porque todavía tuvo conciencia para no abrirle al alfa afuera del departamento para que lo calmara.

No sé que hubiera hecho si hubiera llegado y los hubiera encontrado juntos, creo que sería capaz de matar al hombre porque no importaba incluso si Hoseok le había dado autorización, un Omega en estado de celo pierde la conciencia por la necesidad de ser enfriado, de ser calmado y abrazado en su celo, y el alfa solo diría que respondió a sus instintos. No podía volver a dejarlo solo en estos días.

La mano traviesa de Hoseok jugo con el cuello de mi camisa, poco a poco sus dedos tocaron mi cuello de forma sensual y se deslizaron por mi pecho mientras intentaba desabotonar la prenda. Su calor me contagio de inmediato y me tomo todo lo que tenía para no empujarlo sobre el sillón.

Tome sus manos y las aleje de mi cuerpo. Le di un pequeño beso y luego otro en la frente.

—Tu no querrías esto sino estuvieras en celo —comente tratando de tranquilizar mi propio corazón que empezaba a latir con furia. Si tomaba a Hoseok está noche nadie podría decir nada, es mi esposo después de todo, pero Hoseok seguramente estaría furioso conmigo una vez que su celo pasará.

Hubo un rastro de decepción en su rostro y luego asintio, se alejo poco a poco y se metió a la habitación, una vez dentro, me apresure a asegurar la puerta para que nadie entrara y corri al baño, abrí la regadera en frío y me metí a bañar. El agua fría no funcionó, tome mi pene erecto entre mis manos y empece a sobarlo de arriba a abajo mientras me imaginaba encerrado en la habitación haciendole cosas poco éticas a mi esposo.

Como meter mi pene entre sus rosados labios y callar su boquita molesta, tomando su cabello y obligandolo a mirarme mientras me chupaba, me corrí sintiéndome un pervertido.

Hoseok tenía razón, soy un maldito cobarde.

Me quedé los siguientes tres días en casa y todos y cada uno de ellos fue un martirio, los sonidos que Hoseok hacia consolándose a si mismo al otro lado de la puerta iba directo a mi polla poniéndola dura y necesitada de joder. Me masturbe muchas veces y todas esas veces solo pude pensar en una persona, en Hoseok, en mi esposo. Incluso cuando intenté concentrarme en otra persona, en la persona a la que decía amar, se sintió incorrecto e insano y la imagen de Hoseok regresaba con fuerza cuando llegaba al climax. Lo peor de todo es que no podía asegurar que Hoseok no me escucho con todo el ruido que hice, esperaba que no, no podría verlo a la cara si eso hubiera pasado.

—Gracias por dejarme de comer todos los días —Hoseok dijo, en medio del desayuno, ahora que su celo había pasado parecía mas relajado y más fresco, hermoso por dónde lo viera. No podía decir lo mismo de mi, seguramente tenía ojeras por no poder pegar el ojo e incluso el hambre se me había quitado, aunque cocine todos los días para Hoseok y le dejé la comida en su puerta, y la cereza del pastel fueron todos los moretones que tenía en mi cara por la pelea.

—Era mi deber, en algo tenia que ayudar.

Hoseok asintio de acuerdo pero aún así me regaló una sonrisa cariñosa.

—Mañana empezaré mi trabajo, hoy iré a hacer algunas compras y haré el súper.

—Esta bien, ten cuidado y asegura bien tu collar. Estaba pensando en mudarnos pronto, aún lugar donde solo estemos nosotros dos, nada de alfas.

—Te duelen —Hoseok puso su mano en mi cara, específicamente en el moretón más grande en mejilla, negué sin apartarme—, lo siento mucho Taehyung.

—No es culpa tuya, pronto todo mejorará ya verás —como un gato moví mi mejilla sobre su mano y luego la tome entre las mías para besarla, Hoseok me miró extraño, confundido. Probablemente lo estaba, incluso yo también me sentía así.

—Estas actuando muy extraño Taehyung.

—Tu también actúas extraño Hoseok, creo que ambos estamos cambiando, me gusta este cambio ¿A ti no?

Asintió y no dijo nada más, siguió comiendo mientras lo observaba.

Por la tarde me reuní con Jackson, el muy insolente se negó a regresarme oficialmente las acciones.

—No, no Taehyung, escucha antes de hacer cualquier cosa, dices que estás avanzando para bien con Hoseok y creeme que no hay nada que haya querido más que eso, somos amigos y te aprecio. Gracias a ti ahora estoy con Jimin al que he llegado a amar demasiado y como un amigo que se preocupa por ti, te lo digo: no será nada creíble que te hayas ido a la quiebra y luego recuperado todo en menos de dos meses. Hoseok dudará, se pondrá a investigar y una vez que se entere que le has mentido todo se irá al caño.

Mientras lo escuchaba tuve que darle la maldita razón, no había forma de justificar que recuperará millones en menos de dos meses, Hoseok y yo tendríamos que aguantar un poco más, hasta que ideara un plan que fuera creíble.

—Tienes razón, pero tampoco quiero ponerlo en peligro.

—Estoy de acuerdo con eso, en todo caso si próximo celo será en tres meses, por lo que tenemos tiempo para pensar en algo y también de fortalecer su relación, que tal si Hoseok decide regresar a cómo era antes y alejarse de ti nuevamente, por lo pronto es bueno que ya estén teniendo sexo, el sexo siempre unifica más la relación.

—Estas confundido Jackson, dije que avanzamos en nuestra relación pero no que teníamos sexo.

Jackson me miró perplejo, como si no pudiera creerme.

—Estas bromeando Taehyung, entonces cuáles son esos supuestos avances entre ustedes.

En encogí de hombros, él parecía bastante decepcionado.

—Pues ya no nos queremos matar cada que nos vemos y ciertamente, empiezo a sentir cosas por él, eso es mucho por él y está vez en su celo, parecía que quería que lo ayudara, no lo hice por supuesto, se que un Omega en celo no puede dar un consentimiento verdadero.

Jackson volvió a verme perplejo por mis palabras. Ahora la decepción parecía que se había convertido en rabia.

—Eres imbécil Taehyung —dijo sin tapujos—, eres mi amigo pero eres imbécil. No mereces a Hoseok, como es que te casas con un Omega dominante y no investigas siquiera como son, definitivamente no lo mereces, renuncia a él y deja que encuentre un alfa adecuado.

—Que mierda estás hablando sobre mi esposo. No sé lo daré a nadie, no ahora que le quiero.

—Si lo quisieras sabrías que un Omega dominante es diferente a otros omegas porque no pierden su raciocinio en el celo, ellos son conscientes de todo, y ahora seguramente el cree que lo rechazaste determinantemente. No volverás a tener una oportunidad así, te lo aseguro. Dioses, me haces enojar Taehyung.

Me sentí bastante avergonzado de mi mismo que me quedé sin palabras. Ahora sí no iba a poder ver a Hoseok a la cara. Era tan ignorante respecto de mi esposo, no la ignorancia no era el problema. Yo era el problema porque nunca me detuve a pensar un poco en Hoseok y en sus necesidades, cegado por mi deseo de venganza y una venganza estúpida.

Después de todo Jimin no era para mí, debí olvidarme de él, debía luchar por mi matrimonio y solo lo jodí, hasta este punto. Solo podia esperar para que Hoseok no pensara que lo había rechazado porque no lo deseaba.