-¿Te encuentras bien?-pregunta la castaña mirando al chico a su lado, sosteniendo su brazo.-No, no estoy nada bien. Las cosas no salieron para nada bien.-se queja aún tratando de buscar una solución para los problemas que él mismo creó. Eso pensaba.
-Solo tienes que calm...-la interrumpe.
-¡No puedo hacer eso! Estamos barrados en un tiempo que no deberíamos estar. Por mi maldita culpa, mi idea puso que los demás estén quien sabe donde.-Alzando la voz, sacando la frustración que contenía desde el inicio.
-¡Y por esa misma idea todos estamos vivos!
Le dolía verlo creer que los sucesos que pasaban eran por él, peor aún que los demás no pudieran valorar el esfuerzo que hacía para juntar a la familia y pudieran vivir.
Sostuvo el rostro de Cinco con ambas manos, obligándo a que la mirara a los ojos.
-Por ti, y solo por ti seguimos viviendo. No tienes por qué culparte de algo que esta fuera de tus manos.-murmura acariciando sus mejillas.
-Per..
-Te amó.
La mirada de Cinco se suaviza al volver escuchar sus dos palabras favoritas de sus labios. Jamás podría cansarse de escuchar como la mujer que ama y seguía amando le recordará las razones de su propósito.
Salvar el mundo.
Formar la vida soñada con ella.
-Te amo más que cualquier cosa del mundo, nunca dudes de eso porque si lo haces, recibirás un golpe mio por imbécil.
Soltó una pequeña risa al escucharla, era lo que siempre provoca ella en él, sin poder resistir la ansia que se acumuló en cada segundo, unio sus labios que Cinco se le volvieron adictivos con el pasar de los años.
¿Era posible amar alguien más que así mismo?
Una duda para muchos pero no para él.
-Siempre fuiste tu.-confiesa Cinco, separando sus labios que fue una tortura en su pecho.
-¿De que hablas?.
-Salvar al mundo, me dejaría tener la oportunidad de vivir sin preocupaciones de que te pasara algo. Lo hago por ti.
-¿Eso es lo que quieres?
-Es lo que deseo.
-Y tu...-dudando en continuar sus palabras-¿Podrás adivinar cual es mío?-pregunto nerviosa.
-Formar un familia, recuerdo detalladamente tus palabras. Siempre fue tu sueño ser madre-confirma recordando el tiempo de ambos siendo niños perdidos en medio del caos después de saltar al tiempo.
Saltar en el tiempo fue la acción que hizo que Cinco hargreeves cayera ante ella.
Nunca dudo en dejarlo solo, ella estuvo con desde el día uno.
-Y solamente que fuera con la persona indicada.-completa mientras juega con los dedos del chico, queriendo disimular sus nervios.
Cinco suelta una leve risa y vuelve a juntar sus labios esta vez sin intención de romperlo por mucho tiempo, pero la necesidad de aire los obliga aún que no quisieran.
-Haría lo que sea con tal de estar contigo.
-Lo se, porque haría exactamente lo mismo, cariño.
[...]
Cinco
-¿Puedo acompañarte?-trato de no rodar los ojos, fue imposible no hacerlo, de solo escuchar su voz hacia que quiera tirarme de un acantilado.