━━━ Selena y Leandro se conocieron gracias a un amigo en común de ambos, pero, ¿quién diría que gracias a eso se volverían una de las parejas más queridas de Argentina?
Selena se volvería una parte fundamental en la vida de los Paredes, tanto que lo...
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Junio 2020
Fruncí el ceño cuando escuché el timbre, no esperábamos a nadie, ni siquiera a Ángel y a Jorge.
—Sigan con la tarea —les dije a los peques, quienes asintieron y siguieron en lo suyo.
Fui a abrir la puerta yo –ya que Lean estaba en el gimnasio con sus auriculares puestos– y abrí los ojos con sorpresa. Solté un grito emocionado después de que Emilia soltó uno igual y se tiró sobre mi para abrazarme, lo que hizo que caigamos al suelo. Nuestras piernas se enredaron cuando quisimos aferrarnos con ellas a nuestras cinturas y reímos.
—¡Madrina! —gritó Gio.
Sentí unos pesos encima nuestro, sabía que eran Kiki y Nanni. Deben haber venido por los gritos a ver que onda.
—¿Por qué gritamos? Díganme así grito con ustedes —exclamó Lean. Salió y al vernos soltó una carcajada mientras se acercaba—. ¿Qué haces acá, loca?
Leo nos ayudó a levantarnos y se abrazó fuerte con su prima, sabía lo unidos que ellos son. Son como hermanos.
—Vine porque tenía que arreglar unas cosas en mi tienda y porque en unos días es tu cumpleaños, bobo.
Se separaron y se miraron unos momentos.
—¿Segura que eso nomas?
Emi esquivó nuestras miradas.
—¿Emi? —la llame preocupada.
—Necesito de su ayuda con algo importante y muy, pero muy, confidencial. Nadie se puede enterar de esto, nadie.
Compartimos una mirada preocupada con Lean y después volvimos a mirarla
—¿Por qué no tomamos unos mates y nos contas? —le sonreí de forma cálida.
Asintió, alzó a Gio y agarró la mano de Vicky con su mano libre. Ellos fueron a la sala y yo fui a la cocina a poner el agua a hervir en la pava eléctrica y preparar las cosas del mate. Tiré la yerba para ponerle una nueva y hacerle la montañota de mierda esa.
Me costo una banda aprender a hacerla pero se pudo, gente.
Cuando estuvo todo, lo puse en la bandeja de madera, y fui con los demás teniendo el cuidado de no tirar nada. Lo dejé sobre la mesa, me senté al lado de Lean y dejé que Vicky se suba a mi regazo. Los escuché hablar un ratito sobre la familia de ellos, hasta que llegó el tema.