(TERMINADA) LUJURIA: SANTO PECADO

5 PARTE: SACRILEGIO SAGRADO (+18)

Era domingo y era el día en que se tenía que ir a la iglesia, como cada fin de semana.

- Nanon! Nanon!

Su madre casi derriba la puerta al notar que su hijo no respondía.

Después de tocar tantas veces la puerta de la habitación de su hijo, al fin Nanon se despertó adormilado. Su cuerpo estaba totalmente adolorido.

- Ya voy, madre.

Se puso de pie y fué hasta la puerta sacándole el seguro, algo que jamás Nanon había hecho antes.

- ¿Estás bien hijo? Ya son casi las 9 de la mañana y aún estás en cama.

- Perdón mamá, me quedé dormido. Estaba muy cansado.

La mujer acarició las mejillas de su hijo y Nanon se asustó, recordó de pronto todo lo que había pasado la noche anterior con el ente.

Al notar que su hijo se puso rígido ante su toque, la mujer se sorprendió.

- ¿Qué sucede?

- Nada.

La mujer lo dejó pasar, creyó que su hijo estaba así porque ayer se quedó hasta muy noche limpiando la sala.

- Bueno, vamos, ve y dúchate, te cambias y vas al comedor para desayunar en familia. Ya sabes que tenemos que ir a misa.

Apenas escuchó lo último, sintió que algo dentro de él se derrumbó. Un pánico empezó a colarse en su interior.

Apenas cerró la puerta, Nanon corrió hasta su baño y se miró directamente el cuello, pero no había ninguna sola marca, su piel estaba pulcra como siempre.

Respiró profundamente y se calmó.

Limpio el espejo con la mano y empezó a llorar. Había hecho algo asqueroso ante los ojos de dios. Bajó la cabeza y empezó a rezar por su alma.

Después de haber derramado su corazón, Nanon se miró al espejo y trató de que sus pensamientos no lo hicieran sentir peor de lo que ya se sentía.

Se duchó y cambió de prendas tal como su madre dijo, luego bajó al comedor a tomar el desayuno.

- Buen día papá, buen día mamá.

Ambos padres miraron orgulloso a su hijo, estaban felices al ver que el fruto de su amor ahora era un hombre respetable y centrado.

Cuando llegaron a la iglesia, Nanon sintió que la vergüenza y el asco lo invadieron por completo. El sacerdote leía que dios perdonaba cualquier pecado si se arrepentían de verdad y Nanon sintió que su espíritu se tranquilizaba.

Hasta ese momento todo iba con normalidad para Nanon quien dejó de pensar en el pecado que ayer cometió, hasta que se dió cuenta que asientos más adelante, el señor Pawat estaba sentado con su esposa. ¿Quién diría que el chico respetable del que tanto estaban orgullosos, estaba teniendo sexo con un incubo que había salido de su mismísimo sueño tal como lo pidió en su deseo, materializándose en aquel actor, hijo del señor Pawat?

La palabra que se impartía calaba en el espíritu de Nanon, pero se vino abajo cuando el hijo del señor Pawat llegó a la iglesia.

Nanon desvió la mirada completamente cuando los recuerdos de ayer regresaron a su mente con fuerza. Cada gemido y presión en su interior surgieron con fuerza.

Sabía que con quien tuvo sexo la noche anterior no había sido el verdadero Ohm Pawat, sino un incubo que se había materializado con el cuerpo del hombre.

Nanon empezó a rezar en su mente tan rápido como pudo, pidiendo perdón por su horroroso pecado pero Ohm lo miraba intensamente, tanto que no aguantó más y en la mitad de la misa, Nanon salió de la iglesia. Sentía sus ojos arder por todos los sentimientos que lo abrumaban.