Locos enamorados [Reescrita] [Payton Moormeier]

Capitulo 10. Vacío

18 de marzo, 2022.

T/n.

No sentía ni frío, ni calor, no estaba triste, mucho menos feliz, sentía esa presión en el pecho.

Me sentía vacía... otra vez. Nos habíamos alejado, y su ausencia era una agria realidad. Pero había sido mi culpa.

Negué con la cabeza.

—No podemos.

Su mirada se entristeció, y mi corazón se partió un poco más. No quería hacer esto.

—¿N-no... no me...? —él frunció el ceño.

—Te quiero. —afirmé—Y mucho. —hice una pausa—Pero sería un gran problema, más que nada para tí.

—¿Por qué?

—Es ilegal. Es... —bajé la mirada y me crucé de brazos—simplemente a los demás no les gustaría.

—Sí me importara tanto la ley y lo que los demás piensan, no estaría declarandote mis sentimientos. —él hizo una pausa— ¿Tanto... tanto te importa?

—Me importas tú. —lo miré.

Nos quedamos en silencio por un rato. El parecía estár pensando, y yo sentía que me caía del peso que tenía encima.

—Tienes razón. —nos miramos—No podemos.

Me desconcertó por completo, pero seguí escuchándolo.

—No quiero tener que escondernos. No quiero... quererte en secreto.

Mi corazón se rompió un poco más.

—No mereces eso. —afirmó.

El silencio volvió a reinar en la habitación, y no me dí cuenta que había comenzado a llorar hasta que Payton limpió una de mis lágrimas con su dedo.

—No llores. —pidió.

—Estoy bien. —afirmé limpiando mis lágrimas, para luego cruzarme de brazos.

El me miró de una manera que me hizo saber que sabía que no estaba bien, que nada lo estaba, pero se quedó callado.

—Deberías irte, Payton. —dije, con un tortuoso nudo en mi garganta que casi me impide hablar. Él apretó los labios y asintió.

—Pero... seguimos siendo amigos, ¿verdad? —preguntó.

Amigos. Nunca odié tanto esa palabra en mi vida.

Asentí mientras pestañaba rápidamente para eliminar mis lágrimas y el ardor en mis ojos.

—Amigos. —afirmé casi en un susurro.

Amigos. Nunca me destruyó tanto esa palabra.

(....)

Me miré al espejo por última vez, acomodando mi cabello y suspiré. Iría a cenar con Charli, Chase, Dixie y Noah, y nos reencontraríamos después de 6 meses.

Salí del baño y tomé mi bolso, metí dinero, algo de maquillaje, perfume, mi celular, etc. Lo necesario. Y luego salí de mi cuarto con Apolo detrás mío.

—El auto está listo, cariño. —dijo mi tía desde la sala, mientras yo bajaba las escaleras.

—Creí que iría en Uber. —fruncí el ceño.

—Libby Lam tiene una camada de fotógrafos vigilandote, es mejor que vayas con el chófer y Aaron. Solo por si acaso.

Visualicé a Aaron, uno de los guardaespaldas de mi tía, junto a ella en la sala.