06
Will
Después de aquel tiempo que compartimos, decidí llevarla a casa. Quería haber pasado más tiempo con ella, pero dijo que se sentía cansada y quería descansar un rato.
Así que, sin protestar, hice lo que me pidió.
Recordé que había dicho que no solía escuchar mucha música. Por lo que decidí hacer una playlist para ella.
—¡William Brethan! —gritaron de la nada, haciéndome saltar del susto de la banca de una de las mesas del jardín de la universidad.
Levanté la vista de la hoja y me percaté de que una Lu muy enojada, caminaba hacia mí.
¿Qué le ocurrió para que viniera así?
—Hola —alcé un poquito mi mano.
Ella colocó una de sus manos a arriba de mi hoja sobre la mesa, arrugándola.
—Mas te vale, que me digas realmente porque me dejaste hace días en la plaza.
—¿Qué? No te deje y te dije el porque me fui.
—Lo hiciste y según porque tu madre te llamo, pero no fue cierto. Le llame para confirmar y ¿sabes que contesto? Que no, dijo que no.
—¿Por qué hiciste eso?
¿Qué le pasaba?
—Porque me mentiste, te fuiste con una chica ¿No?
No entendía el comportamiento de Lu. De verdad que no.
En ese instante la pantalla de mi celular se ilumino, alcancé a identificar que era de Claris el mensaje. Lo tomé y lo metí a mi bolsillo.
—¿Quién era? ¿era ella cierto? ¡Dame tu celular, déjame ver! —exclamó, Lu, abalanzándose sobre mí de un momento a otro, intentado sacarme el celular.
—¡Lu!, ¿Qué te pasa?, ¡Basta! —forcejé con ella, en uno de los movimientos sentí un golpe en mi brazo lastimado provocándome una ligera molestia—. ¡Lu me estás lastimando!
Al parecer mi intento de que reaccionara eran en vano, parecía no escucharme o parecía importarle en absoluto porque continuó con el forcejeo.
El pequeño malestar se convirtió en un calambre que cada vez se iba intensificando, Intente que ella parara, pero no lo estaba logrando.
—¡No, déjame ver tu maldito teléfono! ¡Ahora, es una orden! —gritó alejándose. Me tome el brazo tensando mi mandíbula ante lo que sentía y sin poder reconocer quien era aquella chica frente a mí.
Pero eso ultimo que dijo hizo que estallara.
—Basta, no sé qué te ocurre, pero no está bien como estas actuando.
De repente su entrecejo se frunció, pestañeo varias veces y dio un paso atrás. Su mirada fue a mi brazo lastimado.
—Will, no, yo no sé...—parecía confundida—. Perdóname no quise lastimarte.
Me levanté como pude, alejándome de ella, tenía mi respiración un poco agitada. Necesitaba irme.
—Solo, ¿Por qué te fuiste? ¿Fue por ella? —continuó preguntando sabiendo la respuesta.
Tomé una bocada de aire, y dije:
—Había quedado con ella desde tiempo antes que contigo, sin embargo, no quería rechazarte porque sabes que la última vez no reaccionaste bien y no quería hacerte sentir mal, pero creo que no sirvió de nada, sé que no estuvo bien que te haya mentido y que actué mal, lo siento ¿ok? — agarré la hoja de la mesa y mi mochila con dificultad por el pequeño punzón que sentía en mi brazo, la miré y pase por su lado.
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Querida Claris
RomanceWill y Claris tenían una perspectiva de lo que era el amor. Y solo les bastaron 6 meses para descubrir lo que en verdad era, para saber que el amor iba más allá de lo superficial. Un mismo cielo, mismas nubes, pero diferentes personas. -No sé que oc...