Hilos de sangre

9

Daphne

Taylor me acompañó hasta casa, por el camino hablábamos de todo lo ocurrido tras estos últimos días.

-El pueblo se ve un poco... triste. Me lo esperaba un poco más animado, como me lo describiste.- a Tay le había dicho lo hermoso que era el pueblo, pero cuando había pasado algo trágico se volvía triste. Era como si la madre naturaleza supiera como estábamos pasándolo.

-Recientemente hubo un fallecimiento, y era una persona muy querida por todos.- le comencé a informar.

-Oh, lo lamento mucho.

-Y el pueblo está consternado, no ha sido una muerte normal.

-¿A qué te refieres con eso?

-Fue asesinada, cerca de mi casa.

Taylor guardó silencio.

-Solo espero que esté descansando en paz, como debe ser.

-Seguro que sí.

Nos sonreímos y seguimos el camino, esta vez hablando de cosas más alegres. Llegamos a casa y nos recibió el olor del bizcocho de limón.

-¡Mamá, traigo visita!- avisé antes de entrar.

-¡Estoy en la cocina!- entramos hasta allí la vimos partiendo el bizcocho.

Los ojos azules de mamá se posaron en Taylor y una sonrisa asomó.

-¡Taylor! Creí que no llegarías hasta el fin de semana.- le dio un abrazo cariñoso.

-Al final he podido venir antes.

-Pues llegas justo a tiempo para probar mi bizcocho de limón.- dijo mientras se daba la vuelta y coger el bizcocho.

-Es el mejor de todo el pueblo.- le dije como si fuera un secreto.

Taylor se rió. 

-A parte de ser el mejor, también es primer premio de la feria del pueblo durante tres años consecutivos.- le informó con gran orgullo.

-Vaya, si que debe de estar bueno el bizcocho.- exclamó Taylor.

-¡Delicioso!- le corrigió mamá y los tres nos reimos.

Taylor se quedaba en el pueblo hasta el domingo, iba a aprovechar para mostrarle el pueblo antes de que se fuera. Cuando estaba en el instituto, él se quedaba con mamá en casa hasta que yo llegara. Le iba mostrando a Taylor las zonas más transitadas por los pocos turistas que pasaban por el pueblo. Eran pocas pero tenían vistas preciosas.

Taylor se había fijado en la zona más frondosa y peligrosa del bosque y su curiosidad se mostró.

-¿Qué hay más allá del bosque?- miré el bosque con preocupación.

-Nadie sabe, está prohibido pasar más allá del bosque, además... allí se encontró el cadáver de Danielle.

-Vaya, lo siento.- miró el bosque -¿Y por qué está prohibido?

-Esa zona del bosque, es mucho más profunda de lo que parece. El sol apenas se muestra de lo frondoso que es, además, entrar ahí significa dos cosas: o perderte y no volver a encontrar la salida, o ser asesinado.- Taylor me miró con seriedad -Se dice que ahí se ocultan las personas más horribles del mundo, por eso está prohibido.

-¿A caso han comprobado todo eso?

-Si, y nunca han vuelto esas personas. Danielle fue la excepción, estaba casi en el principio de la zona peligrosa, no se había alejado mucho.