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Lion

Cuando vi como Laran se llevaba a Taylor y Daphne se iba con aquel chico que no recordaba su nombre, algo dentro de mí dijo que algo iba mal. Y en efecto, algo iba muy mal cuando vi a Daphne llena de pintura roja, simulando sangre. La ira inundó mi cuerpo y mi sangre comenzó a hervir.

Emily y yo corrimos hacia Daphne en cuanto se pringó de pintura. Emily le soltó una bofetada a Laran, ella se quedó sorprendida con la mano sobre la mejilla mientras la insultaba. Me puse frente a ella y se soltó la mejilla mientras sonreía seductoramente.

-¿Y tú que quieres, guapo?

-Estás mal de la cabeza, ¿cómo se te ocurre hacer eso? Eres una mierda de persona.

-¿Perdona? ¿A caso sabes cual es mi relación con esa?

-Si, tú eres la zorra que le jode la vida y ella es la víctima, ¿me equivoco?- se quedó callada -Lo suponía.

Me giré y corrí hacia Emily y los demás. Llevaban a Daphne, ¿pensaban ir andando? Saqué las llaves de mi coche y lo abrí.

-Metedla en el coche.- Emily y los demás me miraron y asintieron, Daphne estaba en shock.

La llevamos hasta su casa, Emily estuvo insultando a Laran por todo el camino. Los dos chicos cuidaban a Daphne -entre ellos había una tensión algo extraña-, Emily ayudó a Daphne a subir las escaleras. Nosotros las seguimos, pero Emily se giró antes de entrar al baño.

-¿A dónde creen que van?- su ceja se enarcó.

-Ayudar.- dijimos los tres a la vez.

-Ni hablar, les aviso cuando hayamos terminado.- y nos cerró la puerta en nuestras narices.

Decidimos esperarlas en la habitación de Daphne. Yo me senté en su cama, el tal Taylor en la silla del escritorio y el otro chico se estuvo de pie y de brazos cruzados.

-¿Alguno sabe por qué Laran ha sido así de zorra?- pregunté para cortar aquel silencio.

-Laran y Daphne no se llevan muy bien que digamos,- comenzó a informarme aquel chico -desde hace años le hace la vida imposible. La última vez fue hace casi un año, publicaron una foto de su exnovio besándose con otra por todas partes, hasta en el instituto.- su expresión se entristeció ¿a caso él era el ex? -Durante meses no salió de casa porque se reían de ella, soltaban comentarios sobre aquello y la insultaban. Hasta iban a su casa a tirar huevos. Estuvo tan mal que tuvieron que ingresarla en el hospital...

Esa información fue bastante triste e interesante.

-¿Y tú que eres de Daphne?- le solté al tal Taylor, él me miró con una pequeña sonrisa.

-Soy un amigo suyo, nos conocimos hace unas semanas en el hospital.

-¿Te gusta Daphne?- soltó el chico apoyado en la pared, se veía serio y ninguno supimos a qué venia la pregunta.

-¿A qué viene esa pregunta?

-Responda: ¿Te gusta o no?

Taylor y este tío se miraron fijamente, la tensión que se formó era tan gruesa que podría romper un cuchillo.

-Es una amiga simplemente.- respondió Taylor.

En ese momento entraron Emily y Daphne. Llevaba el pelo húmedo, aún quedaban algunos restos de pintura roja sobre su piel, su mirada estaba perdida en el suelo. Emily frunció el ceño.

-¿Qué hacen aquí?

-Decidimos esperarlas aquí.

-¿Y si hubiéramos entrado en toalla?- dirigió a Daphne hacia la cama.

-¿Qué tal se encuentra?- preguntó el chico.

-Aún no ha dicho nada, ha llorado.- Emily se llevó las manos a la cara -Si pudiese estrangularía a esa zorra.

Daphne se acostó, metiéndose bajo la manta. Me dio la espalda, pero sabía que su mirada estaba fijada en la pared.

-Será mejor que se vayan, su madre llegará en cualquier momento y debe descansar. Gracias por venir.- los tres asentimos, Taylor se fue por otro lado del pasillo mientras que el chico y yo salíamos por el otro lado. Antes de salir de la habitación, miré a Daphne por última vez.

Bajamos en silencio las escaleras hasta que por fin estábamos fuera, el frío nos golpeó pero no nos importó.

-¿Y tú que eres de Daphne?- pregunté mientras encendía un cigarro y le ofrecía, pero me lo rechazó.

-Soy...- dudó si decirlo -su ex.

-Oh, el que le fue infiel ¿No?- tensó la mandíbula -No te juzgo, cada quién sabe lo que hace.- inspiré humo y lo expulsé a los pocos segundos -Espero que al menos esa chica hubiese valido la pena, porque engañar a Daphne con una que sea una mierda es cagarla...- me reí e inspiré humo.

-Fue con Laran.- casi me atraganté con el humo, lo expulsé y lo miré.

-Wow, si que la cagaste entonces.

-Ya lo sé, no hace falta que me lo recuerdes.

Bajamos las pequeñas escaleras del porche, se metió las manos en los bolsillos mientras yo apagaba el cigarro.

-Te voy a dar un consejo, amigo mío: aléjate de Daphne si no quieres hacerle daño.- su ceño se frunció.

-¿Y tú que sabes si le hago daño o no?

-Solo es un consejo, ahora tómalo o déjalo sobre este frío suelo lleno de tierra.- miré al cielo mientras suspiraba -Hace frío, me voy a casa antes de resfriarme. Buenas noches, ex capullo de Daphne.

Su rostro se tensó al completo, quiso decirme algo pero no le dejé porque ya me había marchado hasta mi porche.

Hilos de sangreDonde viven las historias. Descúbrelo ahora