Capítulo tres.

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"Despierto gritando de mis sueños, miró directamente al sol, pero nunca al espejo".

Los paramédicos corrían de un lado a otro, la policía evitaba que las personas se acercaran al lugar del accidente, por fortuna el culpable no había huido, había sido el mismo quien llamó a emergencias pidiendo ayuda.

En casa de los Perdpiriyawong, la madre de Nunew estaba tranquila viendo televisión, hasta que una llamada la distrajo.

-¿Hola?.

-Es usted familiar de ¿Nunew Chawarin?. _ Se escucho al otro lado de la linea.

-Si, soy su madre, ¿pasa algo con mi hijo?. _Preguntó con preocupación.

-Lamento informarle que su hijo... Tuvo accidente, lo estamos llevando a Sky Hospital ahora mismo. _ La mujer colgó la llamada de inmediato.

Podía sentir como un dolor se instalaba en su pecho, rápidamente tomó sus cosas y salió de casa mientras le llamaba a su esposo para avisarle lo sucedido.

Las horas pasaron torturosamente lentas para aquellos dos desconsolados padres, desde que llegaron al hospital no habían tenido noticias de su hijo y según lo que vieron en las noticias, fue un accidente grave.

Un hombre con bata blanca salió de los pasillos con un rostro agotado y algunas manchas de sangre en su uniforme.

-¿Familiares de Nunew Chawarin?. _ Dijo el doctor.

-Nosotros, somos sus padres. _ Dijo el señor Perdpiriyawong.

-Doctor, ¿cómo esta nuestro hijo?. _ Preguntó su esposa.

El hombre dió un suspiro pensando en como responder la pregunta, ambos padres miraban con miedo deseando que su hijo estuviera vivo.

-El joven Chawarin, esta estable. _ La madre de Nunew dió un suspiro de alivio. _ Pero, el impacto fue muy grave y me temo que... El no podrá volver a caminar.

-¿Q-qué?, no, no puede ser, mi niño no... _ La mujer comenzó a sollozar y sintió como sus pies se debilitaban, sino fuera porque su esposo estaba a su lado y la sostuvo, quizás habría caido.

Pov Nunew.

Me encontraba en una habitación blanca y vacia, no habia ruido alguno, todo estaba tan silencioso que podía escuchar incluso la caída de una aguja, intente buscar una salida pero no habia nada no importa cuanto corriera, era imposible salir de ahi. En realidad, no recuerdo nada y quiero entender porque estoy aqui.

Seguí caminando sin rumbo durante mucho tiempo, hasta que una silueta apareció, podia deducir que era un hombre, alguien conocido , me quede en mi lugar dejando que él se acercara, y de nuevo, era el mismo chico de mis sueños, una vez más, no podía ver su rostro, no podía tocarlo y tampoco podía escuchar su voz.

Aquella noche... Deseaba tanto quitarle ese antifaz y saber su nombre, pero me fui demasiado pronto.

Ahora, nuevamente estaba tan cerca de abrazarlo pero, abrí los ojos otra vez. Lo primero que vi fue la pared color blanco, tarde un par de segundos en acostumbrarme a la luz, miré a mi alrededor y me encontre con mi madre en sentada en un sofá mientras lloraba siendo abrazada por papá.

¿Hace cuánto no lo hacían?, era difícil para mi recordar la última vez que los vi abrazarse.

-M-mamá... _ Le dije con dificultad.

Ella se levantó de inmediato junto a mi padre. _ Mi niño, despertaste. _ Dijo ella.

Yo solo pude asentir, mi madre tomó mi mano con cariño y me miró, era la primera vez en mucho tiempo que podía sentir amor de parte de ella, yo le sonreí de vuelta. Intente sentarme para estar abrazarlos, pero por alguna razón no pude hacerlo.

-Mamá, n-no puedo mover los pies... _ Le dije con miedo.

El doctor entró en ese momento y me vió con preocupación, mis padres y él se miraron entre ellos como si estuvieran hablando por telepatía.

-Doctor, no puedo mover las piernas, digame ¿por qué? , por favor. _ Le suplique.

El se acercó a mi y miró de una forma que no pude descifrar. _ Nunew... Necesito que estes tranquilo, se que, no es fácil lo que voy a decirte pero-

-Solo digalo, ¿si?.

-El accidente dejó un daño tu columna y... No podrás volver a caminar.

Es increíble como puedes perder todo en un segundo, pero si lo logras recuperarte de ello, te darás cuenta de que valió la pena...

No volver a caminar.

No volver a bailar.

Era como haber muerto en vida, y me preguntaba, ¿qué tan fuerte debo ser para vivir con esto?.

Lo que dijo el doctor me cayó como un balde de agua fría, podía sentir mi corazón romperse en mil pedazos.

-N-no, no, n-no es cierto no. _ Dije entre lágrimas. _ ¡No!, ¡es mentira!.

Por un momento olvide el dolor que sentía en todo el cuerpo, lanzé las almohadas desesperadamente, la furia recorría mis venas, ¡al diablo la tranquulidad!, no puedes pedirle a alguien que este tranquilo si acaba de quedar inválido.

Quería gritar y decirle a todos que desaparezcan, ¿qué más da?, acababan de destruir mi vida, ya no tenía sentido nada.

Perder la movilidad de mis pies solo significaba una cosa, no más baile...

Y sin eso yo soy nada, bailo para olvidar todo y ser feliz, entonces si me quitan eso, ¿cómo voy a ser feliz?, ¿cómo se supone que lo seré?.

Yo no creí que era así, hasta que llegó él

.

Después de varios días, Nunew fue dado de alta, pudo seguir su recuperación en casa y usaría silla de ruedas su estado de ánimo cambio radicalmente, no habla en ningún momento, se negaba a comer y sus padres se sentía demasiado preocupados por él.

Se había olvidado por completo del chico de la fiesta y parecía no sentir emoción alguna al escuchar música.

Algo que sus padres podían soportar, era escuchar a Nunew repitir en reiteradas ocasiones, lo mucho que odiaba vivir y su deseo de haber muerto en el accidente.

Sin embargo, lo que más les dolió fue lo sucedió esa mañana...

La señora Perdpiriyawong preparó el desayuno favorito de su hijo, apesar de pasar mucho tiempo con él, lo conocía mu bien, esa mañana se le ocurrió hacer algo especial y no saldría de la habitación hasta que su pequeño Nunew comiera aunque sea un poco.

Dió dos leves toques a la puerta para avisarle al menor que iba a entrar, giró la perilla y... La imagen que vió fue tan dolorosa que la bandeja cayó al suelo.

Su hijo, su único hijo a quien tanto amaba, estaba inconciente en el suelo con varios cortes en ambos brazos y la sangre brotando de ellos.

-¡Nunew!. _ Gritó aterrada. _ ¡Mi bebé!, mi pequeño bebé... _ Sollozaba abrazando el cuerpo de su hijo.

Gracias por devolvermelo, sin ti, no se que habría sido de él

El padre de Nunew entró a la habitación después de escuchar los gritos de su esposa, pero se detuvo en seco al ver la escena y de inmediato llamó a la ambulancia.

Afortunadamente Nunew pudó sobrevivir después de aquel suceso, sin embargo sus constantes intentos de quitarse la vida no terminaron, sus padres quisieron llevarlo a tomar terapia psicólogica en más de una ocasión e incluso pideron a los doctores que fueran hasta su casa, pero Nunew se negó rotundamente a aceptar la ayuda.

Sin duda todo pasa por algo, pero para los Perdpiriyawong, ver como su hijo se apagaba cada día más, era un dolor demasiado grande, no había nada que pudiera ayudar a Nunew Chawarin... Excepto talvez, un chico pelinegro de corazón bondadoso que amaba tocar la guitarra.

"Pero ahora, lo perdí de nuevo, y esta vez, fue mi culpa.

Tomaste la mejor decision, se que no debio ser fácil..."

𝘾𝙪𝙖𝙣𝙙𝙤 𝙉𝙪𝙣𝙚𝙬 𝙎𝙚 𝙀𝙣𝙖𝙢𝙤𝙧𝙤́ ✰ zᥱᥱᥒᥙᥒᥱᥕ │✘ Donde viven las historias. Descúbrelo ahora