Date Experience

CAPÍTULO 5

ZOE

-Hola, preciosa...- me besa y se sienta junto a mí, la cara de Elsa, es un poema- Hola...- no parece recordar su nombre, ni a ella parece importarle.

-Thiago...- susurra, confirmando que es él y no su amigo- No esperaba verte por aquí...- pasa su brazo por mi hombro, sorprendiéndonos a ambas.

-Vine a verla...- vuelve a sonreírme, mi corazón, se acelera más- Espero que no te moleste.

-Claro que no.

-Bien...- alza la mano, la chica viene enseguida y toma su pedido ¿Va a comer con nosotras? Sigue conversando como si nada, dejando claro que sabe desenvolverse en cualquier ambiente. Elsa, termina antes de tiempo y me guiña antes de levantarse.

-Los dejo, debo hacer una llamada.

-Adiós...- una vez solos, se acerca más.

-Me alegra verte.

-Yo también...- me sale una risa nerviosa- Anoche, me quedé dormida y no pude pagarte...- su cara se desencaja, haciéndome sentir mal.

-Zoe...- suspira- No fui a verte como clienta...- me siento tan avergonzada, que no puedo mirarlo- Lo hice porque te deseaba...- mi corazón da un vuelco.

-Lo siento, yo...- muerdo mi labio con fuerza, tal como hizo en la playa, coge mi barbilla y tira para que suelte.

-Anoche, debí explicarme, antes de nada...- sonrío, tratando de esconder mi nerviosismo.

-Nos dejamos llevar por la pasión...- sus ojos, reflejan el mismo deseo que siento. Si no estuviéramos en un sitio público, haría una locura ¿Desde cuándo pienso estas cosas? No hace falta pensar... Thiago, es la respuesta.

-Así es...- pasa su dedo por mis labios, deseo que me bese y lo hace, un beso dulce, tierno y rápido... Deseo más- No quiero que pienses lo que no es...- enreda mi cabello entre sus dedos y cierro los ojos, disfrutando sus caricias, deseando que vuelva a besarme...

-Lo siento...- me disculpo de nuevo, demasiado avergonzada...

-Zoe...- me hace mirarlo a los ojos- Quiero conocerte mejor...- mi corazón, vuelve a acelerarse.

- ¿A qué te refieres?

-Salir juntos...- casi me quedo sin respiración.

- ¿No te importa que sea madre? – entrecierra sus ojos.

- ¿Por qué debería? – vuelvo a avergonzarme, en estos tiempos, no es nada raro.

-Tienes razón... Yo...- suspiro más avergonzada si cabe- Hace tanto tiempo que no tengo citas...- digo en un susurro, coge mi mano y la aprieta.

-Ya que sacas el tema, me gustaría saber qué pasó con el padre.

-Nos divorciamos hace casi un año...- asiente en silencio y sigo- Vive en Madrid y apenas tenemos relación...- vuelve a apretar mi mano.

-Si es difícil, no tienes que hacerlo.

-No lo es, simplemente, cuesta aceptar que perdiste 12 años de tu vida junto a un hombre que no te veía...- vuelve a besarme, dejándome con ganas de más, otra vez.

-No supo valorarte, el único que ha perdido, es él...- susurra sobre mis labios, casi se me saltan las lágrimas de la emoción. Hacía mucho que no me sentía así... Sin duda alguna, es un hombre que merece la pena conocer- Ahora, yo tengo la oportunidad de tenerte...- una sonrisa, escapa de mis labios.

-Eres tan perfecto...- no puedo evitar sonrojarme, él sonríe más.

-No más que tú...- otro beso rápido.