Esto es imposible | TERMINADA

" Caminos peligrosos "

POV LOREN

Seguimos a su madre hasta la sala, justo cuando íbamos a pasar una fuerza me empujo dentro, mientras que el resto se quedó fuera.

Clarisa comenzó a decir palabras extrañas, sentí como una especie de barrera se formó alrededor de nosotras. Deje de escuchar a los demás, las páginas del libro comenzaron a moverse solas.

- Ven aqui- me estiró su mano.

Admito que me daba miedo, una parte de mi no se fiaba, pero la tomé.
Saco un frasco con sangre, derramó unas pocas en un mapa que había en la mesa y volvió a pronunciar unas palabras.

Sus ojos se pusieron en blanco, una oleada de aire cubrió la habitación, tuve que taparme la cara con mis manos para que no se me metiendo nada en los ojos.

- Acércate- dijo sin mirarme- Dame tus manos- me puse enfrente de ella- Dame tus manos Loren- fue una orden.

Mi cuerpo fue solo, ahora nuestras manos estabas juntas. Una corriente eléctrica recorrió mis brazos.

- Esto te va a doler, pero quiero que te centres y la encuentres, intentaré no matarte. Cuando la veas sabras quien es Celeste-

- Me preocupa más la parte de matarme- dije nerviosa.

Sus ojos volvieron en sí, me miró, sonrió. Mi cabeza empezó a doler, sentía como si me la fuesen a reventar. Intenté zafar me de su agarre, pero no pude. Comenzó a pronunciar otras palabras.

- Bas...ta me...due..le- suplique, pero no le importó.

El dolor fue a más, sentía que iba a desmayarme, mis piernas apenas me aguantaban de pie. Cerré los ojos hasta que él dolor desapareció.

Cuando los volví a abrir, ya no estaba en la casa, me encontraba enfrente de una cabaña. Mire a mi alrededor, todo eran árboles.

- Fijate en los detalles, todo lo que puedas ver, describelo- la voz de Clarisa sonó de eco.

- Árboles, estoy en mitad de un bosque, hay una cabaña, voy a entrar- dije acercándome.

Podía notar la magia rodear la cabaña era fuerte, supuse que era magia negra.
La puerta estaba medio abierta, pasé intentado no hacer ruido. Era más grande por dentro que por fuera, seguí andando hasta el un salón.

- Estoy en el salón, hay un montón de libros antiguos- me acerque a las estanterías- Todas tienen un símbolo, un Pentágono con una gota de sangre en el medio-

- Sigue buscando- dijo.

Unas voces se hicieron presentes, me asuste y me escondí, no sabía si podían verme, pero no iba a arriesgarme.

- Tenemos que encontrar a esa niña ya- dijo un hombre de mediana edad.

- Todo a su tiempo Rufus- ambos pasaron al salón.

- Ese es el problema, la luna roja está a punto de salir y si para ese entonces mo tenemos a la niña, seremos hombres muertos- dijo molesto.

- ¿Te crees que no lo sé?- le encaró- Llevo la cuenta todos los puntos días, pero ella es la única que sabe donde está su hija- soltó molesto- Y no me vengas con esas del hechizo de sangre, porque no funciona, la bruja lo ha enmascarado bien- pasó sus manos por su pelo.

- Solo digo que podríamos ir a buscarla, sabemos que ha esta altura tiene los dieciocho, es un verdadero alfa y pertenece a una mañana- dijo Rufus más calamdo.

- Irás tu- le ordenó.

- Esta bien- asintió- Preparo mis cosas y salgo, no olvides darle comida a nuestra diosa- dijo desde la puerta.