Esto es imposible | TERMINADA

" Amor maternal "

POV CELESTE

Eran las tres de la mañana y seguía sin poder dormir, la incertidumbre de pensar en dónde podía estar mi hija, me mantenía despierta.
Solo daba vueltas de un lado a otro, pero nada. Al final me rendí y mire el techo.

Dos golpes en la puerta me asustaron, no esperaba a nadie.

- Pasa- dije.

Loren abrió la puerta despacio, su cara de cansancio se hizo presente en la habitación.

- ¿Te he despertado?- negué- No puedo dormir- cerró la puerta, pero se quedó ahí.

- Ven, yo tampoco puedo- abrí el otro lado de la cama.

Ella se acercó despacio, se tumbo a mi lado y miró el techo.

- Tengo pesadillas- soltó- Cada vez que cierro los ojos aparece mi padre o los brujos, yo estoy encerrada y ellos simplemente me torturan y, cuando no soy yo, eres tu o Hayley- agarró las sábanas- Lenox dice que es porque todavía no he expulsado del todo el acónito, pero de día estoy bien, me siento bien-

- ¿Puedo ver tus ojos?- me miró, después asintió.

Sus ojos eran mitad rojo, mitad amarillo. No había visto nada así nunca.

- Puede que tu transición también te esté afectando- confesé.

- ¿Esto significa que seré un alfa verdadero?- asenti.

- No le has robado poder a nadie, así que supongo que tu fuerza interior te ha hecho evolucionar- sonreír.

- ¿Cómo un pokemon?- sonrió.

- No se que es eso, pero si- reí.

El silencio reino en la habitación. Por alguna extraña razón su presencia me calmaba, hasta ñlego a entrarme sueño.

- Celeste...- susurro.

- Dime- conteste de igual forma.

- ¿Puedo abrazarte?- la mire, con una sonrisa.

- Si- respondí.

Estiré uno de mis brazos, ella colocó su cabeza sobre mi pecho. Con la mano que pasaba detrás de su cuello, acaricié su pelo, justo como me dijo que su madre lo hacía. Paso un buen rato así, hasta que escuche su respiración tranquila.

- Gracias...mama- susurro.

Podía ser parte de su sueño o simplemente una alucinación, pero escucharlo me lleno el vacío maternal que tenía desde hace dieciocho años.
Bese su frente y cerre mis ojos, pudiendo dormir al fin.

Cuando los ratos de sol me dieron en la cara, comencé a despertarme. Yo la tape para que siguiera durmiendo, apenas eran las diez de la mañana. Me levanté con cuidado, sin haver ni el más mínimo ruido. Tome mi bata y salí hacia la cocina.

Cuando llegue Hayley estaba allí, bebiendo lo que supuse que sería sangre.

- Buenos días- dije amable.

- Buenos dias- dijo sorprendida.

- ¿Estas despierta muy pronto no?- cogí una taza y me serví café.

- No puedo dormir...- respondió.

- Sin Loren- seguí por ella.

- Si...me preocupa- confesó.

- Ahora está durmiendo en mi cuarto, por si quieres ir- negó, cosa que me extraño un poco.

- Quiero dejarla descansar, de seguro si me huele, se le activan las hormonas y ya si que mo vuelve a dormir- sonrió.