#16

70 7 2
                                    

Dormí como un bebé, literalmente. Cuando me desperté, por algún ruido, eran las 7 de la tarde.

Rápidamente bajé en busca de la pelinegra, pero me encontré solamente con Ben y Eyeless jugando videojuegos en la sala.

-Oigan, ciberneticos.— exclamé, haciendome notar

-¡No! ¡Perdi! Todo culpa de Jeff...— se quejó el rubio.

—Callate, si no quieres que te mate ahora mismo. ¿Saben donde esta Jane?—

—Pues, arriba. — respondió, secamente, mi amigo enmascarado.

-¿No se fue? - me entusiasmé. Debía admitir que pensé que se había marchado.

-Pues, no. Subió con Clock y con Sally hace un rato. - agregó

Me fuí corriendo, primero, en dirección a la habitación de la pelimarrón. No estaban. Luego, camine dos puertas más hasta llegar a la habitación de Sally, el cual me recibieron con un: "pase".

-Hasta que te levantas, dormilón. -Exclamó la pequeña cuando me vio. Estaba, junto con Jane, peinando a Clock.

-Si, bueno... Estaba cansado. -

-No se ha notado. - agregó Jane, riéndose.

-Jane, pensé que te habías ido. -

- Debo confesar que lo estaba por hacer, pero las chicas me dijeron que cocinemos juntas y pues, me quedé. Y ahora estoy aquí, jugando al salón de belleza.

-Oh, que alegría entonces. ¿Te quedaras a dormir? -

-¡Que buena idea Jeff! ¡Pijamada de chicas! - exclamó sally.

-Ay, Pequeña. Es mucho, ya me quedé anoche. -

-¿y que nos importa, mujer? No te hagas la de rogar. Jeff por primera vez tiene una buena idea. - continuó, la otra mujer.

-Cállate, relojero. Siempre tengo buenas ideas. -

-Bueno, solo esta noche. Mañana ya me voy. - Ambas festejaron. -Pero...No tengo ropa. Debería ir a buscar. -

-Usa la mía, Jane. Todo lo mío es tuyo. - soluciono su amiga.

-Ay..Clock, que amable. Pero debería ser al contrario, yo tendría que devolverte esa ropa. - cierto que yo rompí la ropa de clock....

-Pues, usa la mía. - Dije. -Si no te molesta...-

-¡Ya no tienes excusas, Jane the killer!- exclamó la pequeña que nos acompañaba en la habitación.

- Esta bien, gracias. - terminó.




No volví a hablar con Jane. Había pasado la cena con total normalidad y muchos se habían ido a matar, por algún lugar. Eran al rededor de las 2 de la mañana, cuando había salido del baño y me tope con ella cerrando la habitación rosa que decoraba la casa. La habitación de sally.

-Oh, Jeff. Hola. ¿No vas a matar? -

-Hola, no. Hoy decidí quedarme. ¿Tu no duermes? -

-Recién se duerme sally, así que estoy por ir a mi acostarme. -

De pronto se le cayó el celular, a lo que procedió a agacharse para poder recogerlo. ¿No llevaba bragas? Al parecer ella notó mi mirada en su culo a lo que rápidamente se estiró la no-tan-larga remera mía que la cubría.

-Perdón. No me di cuenta. - susurró por lo bajo, avergonzada.

Me acerqué aún más a ella y agarré su mentón, levantando su rostro que miraba al suelo. La besé.

—Mmh..Jeff—

—Que hermosa que eres, Jane. Mi Jane. —

Seguido de eso, la seguí besando. La tenía acorralada contra la pared.

—¡¿Jeffrey?!—

Ambos nos detuvimos, nos giramos y vimos a Nina parada en el último escalón de la escarela.

En cualquier momento mataba a alguien.

—Puedo...puedo explicarlo. — Intentó excusarse Jane.

—Parece que no te quedaron las cosas claras, Jane...¡Jeff es mio! — gritó. — Llegas a esta casa, te crees la reina y te revolcas con MI hombre. ¿¡Quién te crees que eres?! ¡Puta de mierda!—

—Cállate, si no quieres que te mate ahora mismo, Nina. — Exclamé. Estaba harto. ¿Quién se cree esta puta niña para tratar a si a Jane? —Vuelves a tratar así a Jane y te juro que te descuartizo. —

—Jeff..Querido...Tu eres mio, lo sabes, ¿No?— Dijo, con la voz más maniática que había escuchado de su parte. Vaya que aprendía bien de mí.

—Cállate, perra. Vete de aquí y deja de joder. Tengo asuntos más importantes con Jeff, que estar soportando a tí, niña malcriada. Claro, si sabes a lo que me refiero. — Soltó, Jane; con toda la seguridad de mundo. Vaya mierda, eso me prendía aún más.

—¿Qué esta sucediendo aquí?—

Era Slenderman, metiéndose a la discusión.

—Oh, hola, Slenderman. Disculpa por molestarte tan tarde...no es por ser exquisita pero estaba haciendo unas cosas con Jeff y Nina nos interrumpió, armando una pelea sin sentido. Pero la entiendo, ¿sabes? Cuando tenía su edad era igual...— contestó, Jane, culpando a la niña.

—¡¿Qué dices, loca?!— Intentó defenderse.

—Nina, no trates a nuestra invitada así. No es educado de tu parte. Si no quieres ser castigada mejor ve a tu habitación, ¿si?— En silencio, la pelinegra hizo caso, a lo que el hombre en traje siguió. — Jane, disculpa las molestias. Nina a veces suele ser un poco...intensa, con lo que se refiere a Jeff. — Luego me miró. — Y tú. Deberías dejar de ser un niñato y cuidar a tu mujer. —

—¿Ah?, ¿Mujer? Eh...no, Slenderman. Creo que..— Intentó corregir la pelinegra.

—Los despido, tengo que salir. Cuídense, chicos. — interrumpiendola, alejándose.

—Mi mujer, eh. — dije para mi mismo, aunque mi compañera me haya escuchado.

—Eres un imbecil, nunca cambiarás. Y pensar que casi me matan por tu culpa. — exclamó. Y aunque lleve la máscara, yo sabía que estaba nerviosa.

—¿Y tú crees que yo dejaría que alguien te haga algo? —

—Claro, nadie más puede hacerme algo, excepto tú. —

— Eres muy inteligente, por eso me gustas. Me alegra no haberte matado. —

—Callate, idiota. Preferiría haber muerto que conocerte. —

—Anoche no decías lo mismo, querida Jane.—

Hizo una mueca de fastidio y se fué a su habitación, así que repetí la misma acción, yendo a la mía.

Que día.

ASESINO // Jane x Jeff // Donde viven las historias. Descúbrelo ahora