Koby (1/2)

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Él quería ser el mejor miembro de la marina.

Aquel que atrapa a los malos,
Aquel que siempre hace el bien.

Pues atraparla a ella sería hacer el bien, pero era justo lo que no podía hacer.

~Mataste a todos los de ese barco, se te acusa de piratería y asesinato.~

~Me declaro culpable, mi lindo Koby... ¿Qué harás al respecto?~

~🌸~

Cuando Koby terminó en las garras de Alvida, su vida entera pasó a ser un infierno.
Creyó que era la persona más desdichada en la faz del planeta. Pero entonces la conoció a ella.

____ A. Devons.

La chica de cabello menta había aparecido cierto día de tormenta en el barco de Alvida, acompañando a aquel renombrado pirata.
Era una esclava, pero una "privilegiada".

—Rescaté a esta muñequita de una isla de salvajes. Les hice un favor al extinguirlos, pero a ella... a ella la conservé.—

Aquel hombre le dio unas palmaditas en la cabeza a la niña, quien mantenía la mirada perdida en algún punto del barco.

—Muy linda, seh seh... ¿Podemos hablar de negocios?—Alvida le señaló su oficina.

Mientras el par de piratas se perdía en el cuarto, ____ se mantuvo en la puerta. De pie. Sin quejarse. Sin emitir ni un mísero sonido.
Fue entonces que Koby se le acercó.

—Hola... ¿Quieres algo de agua?—le extendió un vaso algo nervioso, pues la chica de verdad le parecía la persona más linda que había visto en su vida.

____ apenas lo miró antes de volver la mirada a la nada.

—Deimon no me deja comer ni beber nada sin su permiso.—Koby frunció el ceño con aquello.

—¿De verdad?—ella no respondió—. Ya veo... Pero él no está aquí, y yo no te delataré.—

Entonces ____ notó la cálida sonrisa del chico. La sintió conmovedora.

—¿También te tienen como esclavo?—tomó el vaso al fin.

—Se podría decir que si.—sonrió con cierto pesar.

—... ¿Y nunca pensaste en huir?—

—¿De Alvida? Imposible... Nadie escapa de ella.—____ le devolvió el vaso.

—¿Cómo te llamabas?—

—Koby.—

—Pues gracias por el agua, Koby.—

—No fue nada ¿Quieres algo de comer? Será más difícil, pero puedo conseguirte algo.—

La chica lo miró por unos breves segundos antes de tomar sus manos.

—Ven conmigo, escapemos.—

El pelirrosa rió nervioso, pensando que aquello era una broma tonta.

—Ya te lo dije... Nadie escapa de Alvida.—

Para la chica no fue difícil ver el miedo en los ojos del joven. Tenía pavor por la mujer que lo apresaba.
Sintió pena, pero no tenía tiempo ni ganas de arriesgar todo su plan por él.

—... Entonces no interfieras.—liberó sus manos.

Koby no terminó de comprender aquello, cuando Deimon salió de la oficina. ____ ya estaba en su lugar de nuevo, inmutable.

—Palomita, puedes ir a comer algo.—

—Gracias, capitán...—

La chica le dedicó una sonrisa, una que Koby identificó como falsa.
A paso tranquilo, ____ se alejó del lugar, bajando de la cubierta casi como un fantasma.
Antes de cruzar el tablón hacia el barco ajeno, volteó hacia Koby una última vez. Lo miró en silencio y simplemente desapareció del barco.

~🌸~

—Cuando se hizo de mañana, los gritos de Alvida me despertaron... ____ los había matado a todos.—

Helmeppo miraba a su amigo sorprendido, pues aquel breve relato no se lo esperaba para nada.

—Mató a Deimon y a sus hombres, también a los de Alvida. Pero a ella y a mi nos dejó con vida.—

—¿Por qué?—

—Pues... no lo sé. Solo unos días después escapé con Luffy.—

El rubio miró pensativo el cartel de "se busca" en la pizarra.

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Viva o muerta

—Dices que era dulce y callada... Pues esa chica dulce y callada es una asesina a sangre fria.—Helmeppo lo miró—. Y hoy... Hoy pudiste haberla atrapado.—

—He tenido muchas veces la oportunidad de hacerlo, amigo... ella suele buscarme. Pero no puedo. Simplemente no puedo.—

____ tenía dos caras.
Koby vio la original, la primera.
No todos tenían esa suerte.

—Solo asesina piratas y gente sucia, tiene códigos.—

—La justificas.—

—No lo hago.—

—Si, Koby. Lo haces.—Helmeppo arrancó el cartel y lo estampó en el pecho de su amigo—. Y si de verdad estás comprometido con la Marina, debes cumplir tu deber y entregarla. No dudes.—

El pelirrosa se quedó ahí parado, viendo como su amigo dejaba el cuarto.

Dudar...
Era lo único que podía hacer

~🌸~

—Está en las islas Maruvinas, villa floral.—

Cuando Koby escuchó aquello, sintió algo raro en el pecho.
Habían estado siguiendo por un buen tiempo a la mujer, y finalmente la tenían ubicada y semi rodeada.

—Su tripulación esta desperdigada por toda la villa, y ella se esta quedando en una cabaña sola.—Helmeppo miró a su amigo emocionado—. Es nuestra oportunidad. Si la entregamos, la Marina finalmente nos tomaría en serio.—

—¿Y quieres que yo vaya?—

—Si vas tú, ella bajará la guardia... Incluso hasta podría entregarse por voluntad propia.—Helmeppo notó la duda en el rostro de su amigo—. Koby, de verdad... Es preferible que tú llegues antes que cualquier otro marino ¿No lo crees? No todos le tienen tanta estima como tú.—

En eso tenía razón.
Podía decirse sin exagerar...
Que Koby era el único que se preocupaba por lo de "viva o muerta", siendo la primera opción su prioridad.

—Iré yo... Pero solo.—

—

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~Morgan Davies ~ One shots y cosas variasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora