¿Izuku Midoriya?

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Capitulo I. Página III

Ya terminaron las clases de la secundaria, la vasija se encuentra caminando junto a Inko Midoriya mientras se dirigian a la U.A, esto para inscribir a la vasija sin problemas.

Mientras caminaban, la vasija observaba facinado la arquitectura de Japón; simplemente era algo que nunca había visto, además de la tecnología, es muy útil y no es tan complicada de usar; fácilmente es capaz de usar un navegador y explorar el internet de forma básica, sin embargo, el celular es algo confuso, tiene muchas funciones y aun no las aprende todas, solo la principal. Recibir y hacer llmaadas.

Japón era una maravilla ante sus nuevos ojos y de cierta forma agradece a su padre, si es que tiene algo que ver, por mandarlo a este lugar.

-Ya llegamos- habló Inko al ver que la vasija estaba en sus pensamientos-. Tienes que seguir de aquí en adelante tu solo, ¿Podrás?- continuó preocupada.

-Sin duda alguna- respondió sin miedo.

-Ten cuidado- mencionó Inko.

La vasija solo siguió a las demás personas, observando lo que hacían y los imitó. Al seguirlas, llegó a un auditorio inmenso donde se sentaban las personas, así que se sentó en un lugar del medio.

El tiempo de espera transcurrió, y el auditorio finalmente se llenó; se podía escuchar los murmullos de las personas hablando entre sí. Finalmente una voz hizo acto de presencia y silenció las voces.

-¡HELLOOOO EVERYBODY! ¡¡SAY YEEEEEEEAAAAHH!!- Un adulto rubió vestido de negro gritó, aturdiendo un poco, pero emocionando a todos. Los murmullos no se hicieron esperar, se demostraba aquella admiración ante esa persona, sin embargo nadie respondió a su llamado.

-Meh, público dificil- comentó al recibir un incómodo silencio-. ¡Bien chicos! En este momento se realizará un exámen escrito, en el cual se te pondrá a prueba tu pensamiento lógico, ¡tienen 30 minutos! ¡Empiecen!- continuó explicando aquella persona.

Por los murmullos pudo identificarlo como el héroe profesional "Present mic", la vasija se preocupó un poco por el hecho de realizar un exámen escrito, puesto que no sabía mucho de la historia de este lugar o su cultura. Le hace falta mucha información. Su preocupación desapareció cuando leyó la primera pregunta:

«Un villano se está escapando, puedes atraparlo pero dejarías una víctima a su suerte. ¿Qué harías?» eran preguntas relativamente sencillas, ponian a prueba tu moral más que tu pensamiento lógico.

La vasija sin dudar tomó un bolígrafo y empezó a escribir respuestas. Pregunta tras pregunta la fue respondiendo con facilidad, pero la ultima pregunta lo dejó helado.

«Una amenaza azota la ciudad, para resolverla tienes que sacrificar a alguien y los demás se salvan. Pero esa persona estaría condenada a lidiar con el problema sola. ¿Cual es tu opinión al respecto?»

Esa pregunta interrumpió su concentración, era increíble la similitud con la situación de Hallownest y la desición del rey pálido. Recordó como subía del abismo llegando hasta la cima, cómo lo entrenó el rey pálido y lo cuidó en ese tiempo, como se convirtió en el hollow knight, y al final. Como fue encerrado en el huevo negro para contener a Radiance. Su sufrimiento, su dolor, su destino.

Por esos pensamientos, notó que aparecieron pequeñas gotas al lado de la hoja, buscando su origen, lo encontró en sus ojos; estaba lagrimeando y era una nueva experiencia para él. ¿Esto es llorar? Agarró su boligrafo y empezó a escribir. Su respuesta, fue simplemente la desición que su padre tomó en ese momento.

Había terminado primero, pero no sabía que debía hacer, así que esperó. Todos empezaron a murmurar de nuevo, parecía un hábito en los humanos, y nuevamente el héroe silenció a todos.

El Caballero BlancoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora