Kayn Heartsteel x Lectora "Amor sinfónico"

Noche en la discoteca... O tal vez no

La noche continuó, y Kayn siguió sosteniendo mi mano mientras caminábamos por las calles de la ciudad. El ambiente estaba lleno de una calma relajante después de nuestro apasionado beso bajo el cielo estrellado. Habíamos roto la tensión inicial y estábamos más cómodos el uno con el otro.

La conversación fluyó fácilmente mientras hablábamos sobre música. Habíamos descubierto que ambos éramos fanáticos del género nu metal, y nuestras voces se llenaron de entusiasmo al mencionar bandas como Papa Roach, Evanescence, Limp Bizkit y Linkin Park. Hablábamos de nuestros álbumes y canciones favoritas, compartiendo anécdotas sobre los conciertos a los que habíamos asistido y las emociones que sentíamos al escuchar esas canciones.

-Recuerdo la primera vez que vi a Evanescence en vivo -comenté, con un brillo en los ojos-. Fue una experiencia increíble. Amy Lee tiene una voz tan poderosa, y la energía en ese concierto era contagiosa.

Kayn asintió, con una sonrisa en su rostro.

-Estoy de acuerdo, Amy Lee es una vocalista increíble. Y en cuanto a Linkin Park, sus letras siempre han resonado conmigo. La combinación de rap y rock en su música es única.

Nuestra conversación sobre música se convirtió en una especie de competencia amigable, cada uno tratando de mencionar la mejor canción o el álbum más influyente. Aunque podía sentir que había química entre nosotros, también era reconfortante saber que compartíamos una pasión por la música que iba más allá de lo romántico.

Mientras caminábamos, hablamos sobre nuestras vidas y nuestros intereses. Y fue en ese momento que mencioné mi disgusto por tener que ir a discotecas y escuchar únicamente música pop, como si fuera la única opción en la ciudad.

-Me encanta la música en vivo, especialmente el metal y el rock -le dije a Kayn-. Pero siempre termino en discotecas llenas de gente y música pop que no me emociona. Me encantaría encontrar lugares donde pueda bailar libremente, como en los conciertos de metal.

Kayn asintió, comprensivo.

-Entiendo lo que dices. A veces, la escena de las discotecas puede ser un poco repetitiva. Pero, ¿sabes? Hay un lugar que te podría gustar. Es una discoteca que solo pone canciones de rock y metal de los años 80 y de la actualidad. Es un cambio refrescante de ritmo.

-Eso suena genial. ¿Dónde está esa discoteca? -pregunté con interés.

Kayn se inclinó un poco hacia mí, su mirada coqueta y sugerente.

-Es en el centro de la ciudad. ¿Qué te parece si mañana, que es fin de semana, paso por tu lugar y vamos juntos?

Mi corazón dio un vuelco de emoción. Mis horarios se acomodaban perfectamente para una salida, y la idea de pasar más tiempo con Kayn me hacía sentir emocionada.

-Me encantaría ir. Suena como una noche divertida.

Los ojos de Kayn brillaron con una sonrisa satisfecha. Continuamos caminando, disfrutando de nuestra conversación y de la compañía del otro.

Finalmente, llegamos a mi apartamento, y antes de despedirnos, Kayn me miró intensamente. Sabía lo que iba a pasar a continuación, y no podía evitar sentir una anticipación emocionante. Nos acercamos el uno al otro, y esta vez, nuestro beso fue más intenso, nuestras lenguas se encontraron en un torbellino de pasión.

Fue un beso apasionado, lleno de deseo y cariño. No había necesidad de palabras, ya que nuestros labios hablaban por sí solos. Mi corazón latía con fuerza mientras nos besábamos en la puerta de mi apartamento.

Finalmente, nos separamos, con nuestras frentes tocándose y una sonrisa compartida en nuestros rostros.

-Hasta mañana, T/n -susurró Kayn.