La última realidad (Guapodúo: Roier x Cellbit)

6. Una visita inesperada

Al mirar la fuente del ruido, se encontraron a Foolish en las inmediaciones del bosque con un gran costal a sus pies, inclinado hacia el frente como si no pudiera respirar.

—¡No lo puedo creer! —Hablaba el alfa entre carcajadas— ¡Me los vengo a encontrar aquí cogiendo!

—¡No estamos haciendo eso! —Reclamó Cellbit antes de incorporarse para ponerse de pie.

No pudo evitar un resoplido de fastidio antes de que su esposo le tendiera la mano y lo ayudara a ponerse de pie.

—Papá —se quejó de mala gana, comenzando a caminar hacia él.

*****

Foolish estaba llorando de la risa viendo a su pequeño cachorro acercarse dando pisotones de furia, daba la impresión de que quería arrancarle los ojos, en cambio, su hijo lo abrazó por la cintura y él le acarició la pequeña cabeza sin poder dejar de reír.

—Lo arruinaste —lo escuchó mascullar contra su cintura.

—Lo sé, lo siento —se disculpó repartiendo besos en la despeinada cabellera— ¿cómo lograste que accediera a cogerte en tan poco tiempo?

Lo escuchó volver a quejarse.

—No lo hizo, por eso lo arruinaste.

—Oh.

No quiso responder más porque Cellbit se acercó a ellos, esperaba que mantuviera la distancia de nuevo, aunque el joven alfa rompió su barrera de feromonas con confianza y se paró a su lado para palmear su hombro.

—Hey, Foolish —saludó el agradable chico.

—¿Qué sucedió? —preguntó sorprendido—, ayer eras un pequeño niño perdido y ahora vuelves a ser un alfa con mucha seguridad.

Lo vio erguirse orgulloso como siempre había sido.

—Inspeccioné un poco el castillo —explicó su yerno— y encontré un libro muy útil de biología básica.

—Inteligente como siempre —asintió con aprobación—, ¿y tienen algún plan para hoy además de procrear en vía pública?

—Tuvimos un accidente —reclamó su frustrado yerno—, ¡me caí en un hoyo!

—Porque lo asustó un gatito —explicó Roier, que no soltaba el abrazo y mantenía oculto su rostro en su cintura.

—Creí que era un creeper —continuó Cellbit con el reclamo— en el camino había un hoyo enorme, estaba pensando en creepers y se aparece un gato de la nada, era normal que me asustara.

Se rió con malicia.

—Entonces encontraron un hoyo, Cellbit se espantó con un gato y cayó, y resulta que de la nada estaban en el suelo besuqueándose, claro.

Escuchó la agradable risa de su hijo, quien frotaba el rostro en su cintura.

—Falta una parte de la historia —habló ese chico con un tono más tranquilo—. Roier me dijo "alfa inútil" y yo me concentré en usar la fuerza alfa para poder salir del hoyo.

—Demostrando tu poder para conquistar a tu omega, me agrada —comentó Foolish.

El joven alfa se veía dispuesto a refutar, sin embargo, Roier no lo dejó.

—¿Qué haces aquí? —preguntó su hijo al separarse del brazo y mirarlo con esos dulces ojos cariñosos— ¿Estás ocupado?

—No mucho —respondió con una amplia sonrisa— fui a ver a Chayanne para que me diera unas semillas para el huerto que construí, pero terminé con este gran saco de papas.