Balance of Yin-Yang© »Pausado...«

2.- ¡Maldito seas, Tadashi!

Narrador.

—Srts. Megami... Srts. Megami... ¡Srts. MEGAMI!

—¿Eh?...¡¿EH?! ¡¿QUÉ PASO?! ¡¿QUÉ PASO?! ¡¿QUÉ PASO?! 

Digamos que la chavala estaba perdida en sus pensamientos, mirando hacía la ventana desapercibida y en meditación, haciendo que llamara la atención hacía la maestras y que rápidamente llegara a tierra firme.

—¿Puede continuar con la lectura? —añadió la maestra con molestia.

-He, He... ¿c-cuál lectura, Sensei? —sonrió ésta con nervios, ya que ni sabía que leían...

Sólo escuchando risas y murmureos de sus compañeros, la maestra inhaló con profundidad, de la actitud de la joven y sin pensarlo dos veces, la manda directo a la dirección.

—¡¿QUÉ?! —se levanta del asiento de golpe con sus ojos cristalizados—¿¡Pero por qué maestra!? —pretextó.

—Por su actitud. ¡Ahora, vaya! —señalando la puerta.

—Como voz diga.. Sensei...

Al escuchar su orden, esta recoge sus pertenencias triste y sale lentamente de clases, pero algo extraño pasó entre los oídos de ellas.

Como sus compañeros murmuraba y echaban risitas, pudo oídlos con claridad haciendo que ésta se sorprendiera.

—Esa es una buena para nada...

—No merece estar aquí. ¡Estúpida niña!

—Que torpe es ella, ¿cómo es que ella paso a 2do? Es más, cómo la dejaron entrar aquí...

—No lo se, parece que la pagaron o solo su...

Narra Anyika.

¿Cómo es que pude escuchar todas sus conversaciones? No sé como, pero juró por Dios que ellos hablaban bien bajito, como para yo escuchar de a lejos. No lo sé, pero pude escucharlos con claridad.

Pero cambiando de tema, ya estoy en problemas....

Al llegar a la dirección, me encontré con el director de la escuela, la secretaria y un chico alto de unos 1.77 metros, de cabello azul marino con anteojos de ese mismo color pero con negro en la parte de la patilla del anteojos y sus ojos eran de color verde esmeralda. Estaban con unos papeles de información o algo así y al entrar, ellos me observaron de arriba a abajo, claro con la mochila en mi brazo. El director se molesto, el chico solo se quedo mirándome con una ceja arqueada y la secretaria se quedó extrañada.

—¿Pero qué voz ha pasado? —comenzó ella.

—Me sacaron del curso... -musité con la cabeza abajo.

—¿Y se puede saber por qué? —escuche la voz del chico, era una voz algo grave, pero me dí cuenta que era un Gamer.

—Por... Por mi actitud. —contesté.

—¿Qué hiciste?

—No me puse atender a la clase de la maestra de literatura y pos, me quedé pensando en otra cosa... —me puse un poco histérica, porque no sé si me iban a regañar.

—Hmm... —suspiró el director— ¿Cómo voz llamáis?

Genial.

—Anyika Megami —contesto con decepción.

—¿Megami? —dijo el chico con sus ojos dilatados y sorprendido— Pero... ¿cómo?

—¿Qué pasa, Kiroto-san? —miró el director extrañado por su expresión.