Kagome se encontraba en el parque, penso que quizas Inuyasha estaria ahí. Tenia sus dudas sobre su cara al ver al joven Miroku y tambien sobre su actitud de irse.
Kagome - ¡Inuyasha!
Ya era muy tarde y casi no había personas, por lo tanto, se estaba preocupando. Busco y busco e incluso pregunto por él, pero nada. Termino agotada y tomo asiento en una de las bancas aun lado de una máquina de bebidas.
Kagome - ¿Dónde te metiste?
Sango- ¿Higurashi?
Kagome voltea sorprendida y se encuentra con la psicologa de la escuela, suspira agitada ya que no estaba de humor para seguir con las preguntas de esta mujer.
Kagome – Buenas noches, señorita Sango, yo solo estaba haciendo un paseo.
Sango- Vaya, creo que eso te ayudara si es que tienes problemas para dormir.
Nuevamente se molesto, esa psicologa sin duda era muy estraña. Aun asi Kagome miraba a su alrededor para ver si Inuyasha no estuviera cerca.
Sango- Me parece que buscas a alguien o algo en especial. Lo digo por tus expreciones e inquietud. Puedo ayudarte si quieres Higurashi.
Kagome – No, estoy bien. Siga su camino, supongo que va a su casa.
La mujer solo dio una leve sonrisa pero de algun modo sus ojos mostraron triztesa y saco algunas monedas de su bolsa.
Sango- Gustas algo pequeña, yo invito.
Kagome – Amm no gracias, estoy bien.
Sango saco una soda y la abrio para despues beberla y se pone a un lado de la maquina alejada de Kagome para darle un poco de espacio.
Sango – Higurashi, se que tratas de evitarme y no te culpo. Es raro que un psicolo se interese mucho en un pasiente e incomode un poco. Lo note desde el primer dia en que te vi.
Kagome la miro de reojo y se sonrojo avergonzada por sus actos. Sango siguio bebiendo de su soda hasta terminarla.
Sango- Pero quiero que sepas que mis intenciones no son malas, realmente te quiero ayudar. No menti cuando te dije que tu caso no era nuevo para mi, ya que e visto cosas en algunos pasientes que...
Kagome – No estamos en consulta y este lugar es publico asi que le pido de favor no hablar de los temas con sus pasientes fuera de su zona de trabajo. De lo contrario estaria faktando a su codigo. Se puede meter en problemas.
Dijo molesta y Sango de un movimiento rápido tiro la basura utilizando solo su pierna. Kagome se sorprendió al ver todo en cámara lenta y después Sango volteo a verla aun sonriendo.Sango – Tienes razon, a veces olvido lo que soy o lo fui antes. No puedo explicarlo pero solo te dire que, si algun dia tu problema no te deja dormir nuevamente, yo misma me encargare. No permitire que nadie mas le tema a lo desconocido.
Kagome se levanta nerviosa sin quitar su mirada asustada de esa mujer.
Kagome – Mire señorita yo, no quiero problemas yo solo...
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El Demonio de mis sueños
ParanormalTodas las niñas sueñan en algún momento de su vida, con la persona con quien quieren estar. No tuve esa misma suerte. Mi nombre es Kagome Higurashi y tengo 15 años de edad y estoy cursando tercer año de Secundaria. Siempre e vivido en Tokyo y vivo...