¿Quién asegura que la tristeza no puede ser eterna?
¿Acaso existe en el mundo algo capaz de hacernos olvidar todo nuestro dolor?
¿Será posible levantarnos un día y no tener que fingir sonrisas?
¿Algún día podremos deshacernos de nuestras pesadillas...
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"Solo se conocen bien las cosas que se domestican"
INVIERNO Londres, Belgravia Día: 13 de diciembre de 2023 Hora: 10:30
Heaven Rizzo
Listen Before I Go de Billie Eilish suena en los audífonos acompañándome en la soledad de las gradas mientras la tarareo bajito. Los futbolistas hoy no están en entrenamiento debido al las temperaturas bajas, por lo que estoy rodeada de tranquilidad sumida en un denso silencio que en otras ocasiones odiaría pero hoy me encanta.
Después de levantarme hoy en la mañana no he vuelto a lograr dormir nuevamente ni prestar atención en clases. Las ganas de que los tres días que le quedan a la semana acaben son inmensos. Pero por otra parte esta el miedo de que llegue el viernes.
Le prometí a Charlotte y Chloé que iría, pero el mal presentimiento que tengo junto con la incomodidad que me genera el imaginarme en un lugar lleno de adolescentes bebiendo y manoseandose me asquean, y es que aunque ellas hayan dicho que no va a ver alcohol es mentira
Es obvio que en una fiesta de preuniversitarios hormonales con padres millonarios el alcohol es lo que va a sobrar junto con los ligue de una noche
Ir a esa fiesta va a ser lo más agotador que habré hecho los últimos meses. Posiblemente en años.
Russell parece haber desaparecido, la última vez que lo vi fue ayer cuando salió del salón. No se presentó en las clases que compartíamos hoy y a mi parecer no vino a la preparatoria.
No entiendo por qué carajos me preocupo tanto, o porque me importa, no lo conozco y solo he cruzado palabras con él en pocas ocasiones.
«Supongo que ya le aburrí»
El pensamiento me hace hundirme en el asiento solitario.
Le he estado dando vueltas a mi comportamiento cuando estoy con él, y me he dado cuanta de que soy mucho más diferente que con el resto. Me abro más y no pienso en lo que digo, simplemente soy yo.
Aún no decido si eso me gusta o no.
—Al parecer, no todo hoy es malo —dicen a mis espaldas.
El corazón me da un salto en el pecho cuando veo a Russell a dos metros de mi subiendo las escaleras, como cuando hablamos por primera vez hace casi dos semanas.
Me quito los audífonos.
No puedo evitar repasarlo con la mirada. Vaqueros negros sueltos pero ajustado a sus caderas con un cinturón del mismo color. Un jersey negro alto en el cuello con la cadena de plata libre y resplandeciente en su pecho, llevaba un anorak negro encima y también unas botas militares del mismo color.
Iba todo de negro. El conjunto era estilo estarboy. Dios, estaba buenísimo.
Alcé la mirada a sus ojos con las mejillas rojas por el pensamiento.
