El Doce De Los Heraldos

Cambio de Perspectiva

Después de caminar un rato con Atreys, se detuvo frente a la entrada de una heladería, se volvió hacia mí y comentó con una voz agradable:

—Hemos llegado —dijo, mientras su tono resonaba amistosamente.

Permanecí allí, reflexionando sobre qué decir, cuando Atreys interrumpió mis pensamientos con otra pregunta:

—¿Te quedarás ahí o entramos? —inquirió, mostrando impaciencia en su voz.

Entraron a la heladería y se dirigieron al mostrador. Mientras examinaban los sabores, Atreys hizo su elección.

—Quiero un cono de mora, por favor —solicitó con amabilidad.

Por otro lado, Izuku optó por un clásico y pidió:

—Un cono de chocolate, gracias.

El heladero asintió y comenzó a preparar sus helados. Mientras esperaban, Atreys y Izuku conversaron animadamente sobre diversos temas.

Entre esos temas, Atreys sacó el tema de cuál era su Quirk. Izuku, un tanto sorprendido, le preguntó al respecto. Un breve silencio incómodo se instaló antes de que Izuku finalmente hablara.

—No tengo uno —respondió con sinceridad, rompiendo la quietud con esas palabras.

Tras un breve silencio, recibieron sus helados y decidieron salir a caminar. Mientras disfrutaban de los conos, exploraron la ciudad, compartiendo anécdotas y risas.

—¿Has vivido aquí mucho tiempo? —preguntó Atreys, mostrando más interés en la conversación.

—Sí, toda mi vida. Es una ciudad fascinante —respondió Izuku, mirando a su alrededor con nostalgia.

La charla continuó, creando un ambiente más relajado entre ellos mientras caminaban por las calles animadas.

En esa charla, decidieron dirigirse a un parque cercano y se sentaron en una banca. Atreys, rompiendo el silencio, sacó un nuevo tema.

—¿Tú qué opinas de los héroes? —preguntó Atreys con curiosidad, mirando a Izuku en busca de su perspectiva.

Izuku sonrió reflexivo antes de compartir su perspectiva.

—Creo que los héroes son personas increíbles, dispuestas a sacrificarse por los demás. Pero también creo que cualquiera puede ser un héroe en su propio camino, no necesitas un Quirk extraordinario para marcar la diferencia —expresó con sinceridad, mirando al horizonte del parque.

Atreys soltó una leve risa irónica, haciendo que Izuku se pusiera nervioso por su reacción. Entonces, Atreys decidió revelar algo.

—Me puedes llamar Targtalia —dijo con un toque de misterio. Sacó una tarjeta de plástico detallada con brillo azul, presentando un símbolo intrigante: un hexágono con una estrella de seis puntas en el centro, rodeada de seis círculos más pequeños. La tarjeta tenía impreso: "Llámame si necesitas ayuda con tu problema". Con ese enigmático gesto, Targtalia se despidió y se alejó, dejando a Izuku con preguntas sin respuesta.

Izuku se quedó en la banca, sumido en sus pensamientos tras la inesperada despedida del ahora conocido  "Targtalia". En ese instante de reflexión, su teléfono vibró, rompiendo la tranquilidad del parque y atrayendo su atención hacia la pantalla.

Al revisar su teléfono, Izuku descubrió un mensaje de Amber.

Izuku miró con curiosidad el mensaje de Amber que decía: "Cuidado, alguien podría estar observándote", seguido de un emoticono burlón. La curiosidad mezclada con cierta inquietud se reflejó en su rostro mientras pensaba en el significado detrás de esas palabras.