Capitulo 15 🏀📚: Noche de películas con el enfermo.

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Capitulo 15: Noche de películas con el enfermo.

(Never Knew I Needed - Ne-Yo)


Cuando regrese a casa era de noche y estaba lloviendo, el papá de Mariana me había traído, cosa que se lo agradecía porque o si no me hubiera tocado venirme a pie y encima mojándome con la lluvia.

Suspire.

No estaba segura de sí había alguien en casa, papá probablemente estaba trabajando, mamá estaría en casa de alguna de sus cuñadas y Jake.... Bueno el probablemente este en casa, a menos de que su clase de boxeo haiga terminado un poco más tarde.

Cuando entré a casa me di cuenta de que si, no había nadie, joder, ¿Qué horas eran?

Mire en mi teléfono que eran las 7 de la noche, se suponía que Jake a esta hora ya tenía que estar en casa, también mamá a menos de que ambos se hubieran ido juntos a casa de alguna de las tías de Jake.

Hija <3

¿A dónde están?

Mamá respondió casi al instante.

Mami

Yo estoy en casa de tu tía Patricia ¿ya llegaste a la casa?

Hija <3

Si, ya estoy en la casa, pero Jake no está aquí ¿A dónde está? Su clase de boxeo según yo ya termino.

Mami

Aaa es que me aviso de que se quedaría a dormir en casa de un amigo.

Eso explicaba muchas cosas.

Hija <3

Aaa bueno ¿tú a que horas vendrás?

Mami

Otro ratito, por si no has comido te deje cena en el horno, solo caliéntala.

Hija <3

De acuerdo.

Mami.

Te quiero cariño.

Hija <3

Yo también.

Y termine la conversación mandándole un sticker de corazón. Suspire y me adentre a la casa, tire mi bolsón en un sillón de la sala y fui a revisar que me había dejado mamá de comer.

Y sorpresa ¡Me había dejado lasaña!

Comencé a saltar de la emoción y a reírme.

Cada día me preguntó si tienes algún retraso mental o es que tus neuronas están en recreo de tanta cocaína que te metes o simplemente no tienes.

Saqué la lasaña del horno aun saltando y comencé a calentarla.

Me recosté en la encimera mientras sacaba mi teléfono del bolsillo y revisaba si tenía algún otro mensaje, aparte del emoji de corazón que me había mandado mamá, entre al chat de Mariana y le avise que ya estaba en casa, ella me respondió un está bien y apague el teléfono.

La lasaña ya se había calentado por lo cual me puse unos guantes para no quemarme y la saque del horno, la puse en un plato y agarré un tenedor.

No odiaba cuando estaba sola en casa, solo pocas veces cuando me entraba miedo, pero aparte de eso, me gustaba estar sola, podía disfrutar de ella sola, ningún empleado estaba en casa así que solo estaba yo, mi lasaña y mis libros.

Algún día nos volveremos a ver © #1Donde viven las historias. Descúbrelo ahora