El dia era hermoso para pasear por la playa. El sol brillaba tanto, y las olas estaban tan tranquilas, lastima para los que vinieron a surfear.
Al llegar a casa de la fiesta, mamá le hizo demasiadas preguntas sobre Marlon, y el me cubrio en todo, aunque ambos sabíamos que no se quedó lo suficiente para vigilarme.
La arena en mis pies era tan relajante y ese día no había casi gente.
Cuando estaba por extender una toalla en la área, alguien me rodeo la cintura y me levanto para después darme unas vueltas.
Patalee para que me soltara, y cuando lo hizo le di un fuerte golpe en el abdomen.
Obviamente se quejo y fue cuando me di cuenta que era el señor asecino en persona.
-¡¿Cómo te atreves a asustarme de esa forma?!
Dije dándole otro golpe pequeño en el hombro mientras el se zobaba el abdomen.
-Lo siento, ¿desde cuando golpeas tan fuerte?
-La que debe disculparse soy yo, ¿estas bien?
-Ahora que te veo si, lo estoy.
Mis mejillas tomaron un color carmesí al oír sus palabras, caía muy fácil ante el.
¿Desde cuando el causaba ese efecto en mi?, cada vez que lo miraba sentía una ola de felicidad, una que nunca antes me había permitido sentir, pero con el era simplemente inevitable.
¿A el le pasaría lo mismo?, pero que preguntas, claro que no.
La ultima vez que estuvimos los dos en la playa había, o mejor dicho, estuvo a punto de pasar algo, pero después ya no hablamos sobre eso, ni siquiera en indirectas.
-¿Estas bien?
Pregunto sacándome de mis pensamientos.
-S-si, bien, eso.
Tartamudee
¿desde cuando eso pasa?
-¿Puedo preguntar que haces aquí, pequeña Wesley?
-¿Qué no los asecinos primero averiguan sobre sus víctimas?
-Si, pero contigo es diferente, creo que ya no quiero ocultar tu cuerpo.
-¿Lo planeas dejar a la vista de todos?, pero que cruel.
-No, ni siquiera quiero matarte.
-¿Se puede saber por que?
-No mato a personas lindas.
Me miró con una sonrisa coqueta mientras el acomodaba la toalla.
El rubor volvió y está vez el lo notó, porque sonrió aún más, como si disfrutará de lo que causaba.
Pero esto es un juego que ambos podemos jugar.
-Aah, entonces la amortentia que te di si esta funcionando.
Dije acercándome a él.
-Aunque creo que no la tome cuando me la diste, pero si, esta más que funcionando.
Se acercó más a mi de una manera algo peligrosa.
No me esperaba esa reacción, la verdad pensaba que acabaría cuando viera que yo también estaba dispuesta a jugar.
Nuestras respiraciones chocaban, las suyas eran entrecortadas, como si estuviera nervioso.
Pero no queria que pasara así, aun no, casi no sabíamos uno del otro.
Me separe de el cuando estuvo a punto de juntar nuestros labios. Me miró extrañado.
-No creo que nos conozcamos lo suficiente para...eso.
Admiti.
El asintió estando de acuerdo conmigo.
-¿Qué podemos hacer para conocernos más?
-No lo sé, hablar más en algún lugar.
-¿Este no es un lugar?
-Eso creo, pero, no lo se.
-Entonces, ¿que te parece si vamos a un acuario?, se de uno que dicen tienen mantarrallas, peces...
-Claro, también tienen delfines-lo interrumpi- y animales acuaticos, se oye interesante.
-Claro, me mire muy tonto diciendo lo ultimo.
-Si, algo.
Ir a un acuario se escuchaba muy bien. Desde que le dije a mamá a lo que de verdad quería dedicarme no me a llevado a ninguno.
Me sorprendió el hecho de que se acordara de mi gusto por esos animales cuando solo lo había comentado una vez.
-Es una cita entonces.
No lo había pensado de esa forma, ¿tendría mi primera cita?
Creo que mi rostro se puso serio por lo que el intento reponer.
-O no si no quieres, solo será una salida de amigos, solo una salida, eso está mejor.
Hablaba tan rápido que muy apenas le entendí lo que dijo.
-Si tu te sientes mejor en decirle salida esta bien, pero lo de cita se oye mejor.
En su rostro se poso una sonrisa, una de esas que tanto me gustaba.
-¿Porque no las dos?, digo, a fin de cuentas es lo mismo.
-Entonces es una salita.
-Tendremos una salita, ¿te parece mañana a las cuatro?
-Me parece perfecto.
Se despidió con un movimiento de mano y dio unos cuantos pasos antes de detenerse y darse la vuelta caminando otra vez hacia mi, me dio un beso en la mejilla-casi en los labios- y se volvió a ir.
Me quedé inmóvil por su acto, tarde unos segundos en volver a lo que estaba haciendo lo de antes, aunque solo me acosté y saque un libro de un bolso que había dejado en la arena.
Tendría una salita...
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Pequeña Wesley//Surviving Summer
FanfictionElla solo quería dejar de sentirse sola, pero encontró un tesoro o aun mejor, una familia ☆♡