Cap 31 pasado o futuro?

47 6 4
                                    

Escapar de su esposa nunca fue sencillo pero conocía la forma, al final del día él era un mago uno de los más experimentados en el mundo.

A veces agradecia su curiosidad nata, el saber cómo ocultarse de la magia fue algo que Erizo le enseñaría y que justo en este momento estará muy molesta de haberlo hecho.

Un chasquido como su madre le había enseñado y una ilusión le daría una apariencia nueva, haberes la magia podía ser tan conveniente.

Tras haber manejado algunas horas Oscar llegó a una gasolinera en la autopista, el lugar era enorme con diferentes locales que atendían a curiosos y turistas, este llegó a una de las cajas y le mostró una tarjeta el cajero solo señalo con la mirada para que Oscar entrara por la puerta de servicio.

Al acercarse se escuchó como una cerradura electrónica se abría dando la vista a una escalera y un corto pasillo revelando lo que parecería una vieja biblioteca, una enorme cúpula bajo tierra cuya estructura daba ese aire medieval, iluminado por esferas de clara naturaleza mágica.

Oscar se acercó a un monstruo que estaba leyendo plácidamente.

— El famoso Oscar Peltzer en persona, el terror de la isla en mi humilde morada — El monstruo habló con cortesía.

— Que me delato— Pregunto curioso Oscar desvelando su ilusión con un chasquido.

— El olor, amigo hace cuantos días que no tomas un baño — El monstruo señaló exageradamente.

— Viniendo de un experto como tu — Oscar sonrrio — Lo tomare encuenta —

— Y dime que tienes para mi — El monstruo comento emocionado mirando el maletín.

Al abrirlo dejó a la vista un artículo único, un tesoro que la vista de ese monstruo casi hacia que se le cayera la baba — damelo.... — Oscar cerró el maletín — Cuanto quiere por esa preciosura —

— Esto, una edicion original y completamente intacto de calabozos y dragones de Mil novecientos setenta y cuatro con sus sellos originales e intactos — Oscar sonrió ante la emoción de su amigo — es raro verte tan emocionado —

— hey ya basta dime que es lo que quieres? — El monstruo comentó.

— Una bolsa de habichuelas — Oscar señaló.

— Otra vez con eso — El monstruo comento — son interesantes pero nunca te muestran lo que quieres solo lo que no quieres, pero si insistes — Este lo sacó de una cajonera y se lo dio a su amigo — En lo personal prefiero los jarrones de recuerdos son más vívidos y reales —

— Cierto pero tienen sus limitantes — Oscar señaló destapando la bolsa — a menos que sepas cómo usar las semillas realmente —

— ¿Realmente? — Su amigo estaba indeciso.

— Una vieja cancion perdida en la historia pero facil de encontrar — Óscar comenzó a tararear unas notas sin sentido —

— Buena suerte, muchos las han estudiado y siguen con lo mismo — El monstruo comentó mientras admiraba su nueva posesión..

— Tal vez, pero vale la pena intentarlo — Oscar señaló mientras sacaba cuatro semillas — Una semilla para vislumbrar tu presente, otra para cuestionar tu futuro y otra para ojeas tu pasado y una mas para ve mas alla de tu vida —

— Sabes que no funcionara lo que sea que intentes — El monstruo señaló esperando que lance las semillas y les revele alguna escena de su futuro pero cual fue su sorpresa cuando miro que este las tomó y las comenzó a masticar y tragar de golpe, su rostro cambió de inmediato — Maldición, escupelas, escupelas tenemos que provocarte el vómito las semillas son venenosas —

Oscar claramente se miró afectado de inmediato, aunque su rostro era estoico su expresión de dolor era innegable — No es tan malo, solo me está rasgando las entrañas —

El monstruo busco un frasco de medicina — Tómalo te ayudará a vomitar y aliviar el dolor —

— No hace falta solo un poco mas — Oscar señaló pero el dolor fue tan intenso que tuvo que sentarse en uno de los sillones, las piernas le temblaban pero no queria ayuda —

— Maldición, maldición — El monstruo corrió desesperado hasta el teléfono — No te preocupes Oscar la ayuda viene en camino —

Oscar colapso por un momento en el sillón, pero cuando abrió los ojos él no sentia el dolor de hace unos momento, su forma incorpórea flotaba en un atisbo, un mundo Oscuro donde pequeños fragmentos reflejaban momentos de su vida, no eran pocos era una infinidad de ellos cualquier mago se habría vuelto loco pero él no era cualquiera, con un simple chasquido los cristales se apartaron y dejaron solo a uno de ellos aislado, Oscar se acercó y lo tomo.

De inmediato pudo ver a su madre, o su silueta ella por algún motivo estaba borrosa y no podía distinguirla pero si identificaba a Erizo y en ese momento estaba aprendiendo un hechizo muy poderoso, uno tan complejo que muy pocos podría usarlo y menos dominarlo.

Para Oscar solo fue algo simple, de inmediato lo comprendió romperlo sería fácil pero doloroso para quien lo lanzó — Sólo un mes hace falta y Erizo no podrá mantener ese hechizo y lo podría romper fácilmente —

Solo basto un poco de su concentración para regresar donde los cristales flotaban, lo medito un poco — Tal vez no suceda de nuevo — Oscar pensó por un momento, suspiro y enfocó su magia para aislar tres cristales más que estaban a su alcance.

Al tomarlo pudo notar la escena era él mismo o el joven Oscar era imposible de saberlo, los que lo rodeaban y su entorno era borroso incluso no podría determinar si era o no su recuerdo, algo impedía diferenciarlos, al final decidió observar.

Oscar tuvo que esforzarse para que esa imagen fuera mas nitida pero era incluso demasiado para él, solo podía enfocarse a su yo y a Erizo, se veían un poco diferentes aun jovenes pero mas altos, estos parecían reírse de algo, se ocultaban, tal vez era un juego uno de sus infantiles juegos, en un momento corrían nuevamente a toda velocidad ocultándose en un armario y entre risas nerviosas estos se besaron.

Oscar salió de ese recuerdo — Maldición no logro diferenciarlos —

De algo estaba seguro él era una reencarnación, murió protegiendo a sus hijos y ahora tenía una nueva oportunidad para hacer la diferencia pero las semillas le seguían mostrando que la tragedia se repetía o era su propia tragedia.

— Así que este es el precio a pagar — Oscar comentó para sí mismo — tus propios recuerdos para ver lo que buscas, pero ¿son los míos o los de mi contraparte más joven?--

Oscar dudo unos momentos, podría ver su tragedia o su nuevo destino, tal vez estaba mal y aun podría enmendar su error o tal vez era el futuro de su contraparte.

Aun con dudas Oscar se acercó a otro de los cristales y empezó a visualizar una escena que solo el recordarla le llenó de alegría — espero que este el joven oscar no cometa este mismo lío — Erizo estaba en pánico y Oscar estaba en pánico —

— Pero no lo comprendo cómo pudo pasar esto — Erizo se jalaba el cabello del nerviosismo.

— No lo se tambien tome precauciones no comprendo — Oscar comentaba mientras daba vueltas por toda la habitación—

Erizo estaba literalmente hecha bolita sobre la cama — Ahora que voy hacer.. haaa — la pobre joven estaba al borde de las lágrimas.

El Oscar de esta visión no dudo en abrazar a su amiga — vamos animate podremos solucionarlo —

Tan pronto como lo dijo Erizo se enojó y comenzó a darle golpecitos a Oscar — Todo es tu culpa, como se supone que vas a solucionarlo si me dejaste embarazada — La pobre chica estaba en lágrimas unas tan primales que casi parecía una niña llorando.

CambiosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora