Del odio al amor (Peter Pevensie)

Capítulo XXI

*Algunos años después*

Estaba sentada en mi estudio arreglando algunas asuntos sobre el comercio del reino, últimamente vivía encerrada en este lugar a causa de mis ocupaciones; apenas tenía tiempo de comer algo durante el día y convivía muy poco con los Pevensie en especial con Peter.

Hace un mes Peter me propuso matrimonio después de 6 años de ser novios y a pesar de que estaba muy emocionada por todo esto, no tenía tiempo de organizar nuestra boda.

Seguía peleando internamente con todos mis asuntos pendientes hasta que escuche unos golpes en la puerta.

-¡Estoy algo ocupada!, cualquier asunto lo arreglo a la hora de la cena- grite para quien sea que estuviera afuera de mi oficina esperando realmente que nadie me interrumpiera, quería terminar todos mis pendientes para antes de dormir.

-¿Le negarás la entrada incluso a tu futuro esposo?- Peter entró a la habitación incluso al escuchar mis peticiones,  pero siendo el o cualquiera de los Pevensie, podía hacer una excepción en mi tiempo.

-Perdóname, no sabía que eras tu- me levante de mi asiento y rodee el escritorio para ir a abrazar al que en algunas semanas sería mi esposo.

-Siempre llevas esa corona en la cabeza, descansa un poco de tus actividades como reina- Peter quito con cuidado la corona de mi cabeza y en su lugar dejo un cariñoso beso.

El pasar de los años ya empezaba a notarse en Peter, ahora, sus facciones eran más marcadas y la barba ya estaba presente en su rostro; todos habíamos crecido demasiado.

-Cariño, otra vez te perdiste en tus pensamientos-

-Lo siento, solo pensaba en lo rápido que pasó el tiempo-

-Lo se, pero estoy feliz de que fuera así, por lo menos, pronto podre llamarte esposa- esas palabras llenaban mi corazón de alegría cada vez que escuchaba a Peter decirlas.

-Regresando al pasado, ¿a qué viene tu visita Pet?- no era común que Peter viniera a mi estudio cuando yo decía que tenía muchas cosas por hacer, el sabía que odiaba terminar tarde o dejar las cosas a medias.

-Antes de decirte a que vine, me pregunto donde esta tu anillo- reí al ver la cara de Peter, odiaba que me quitara el anillo con el que me propuso matrimonio, decía que era la manera que príncipes o reyes de otros lugares supieran que no tenían oportunidad de estar conmigo.

-Esta sobre el escritorio Peter, no quería ensuciarlo con la tinta que uso al escribir- me dirigí a donde tenía mi anillo y me lo puse de nuevo, mostrandole a Peter que no estaba perdido.

-Bien, ahora si a lo que vine; creen haber visto un ciervo blanco por el bosque y quería saber si quieres acompañarnos a buscarlo; Edmund dice que puede hacerlo solo pero Susan y Lucy lo dudan-

-Me encantaría ir con ustedes pero de verdad tengo muchas cosas que hacer Peter, además, tengo que arreglar muchos pendientes de nuestra boda- mire a Peter algo triste pues de verdad quería pasar tiempo con la familia Pevensie.

-Te propongo algo ¿si?, acompáñanos a buscar al ciervo y cuando regresemos te ayudare a terminar todo lo que tengas que hacer, ¿te agrada la idea?-

-¿Me ayudaras a terminar todo?-

-Lo prometo-

-Esta bien, me diste tu palabra así que ahora vas a tener que cumplir-

-Ya lo eh prometido así que ahora vamonos- beso mis labios feliz de que por fin saliera de esta pequeño cuarto para hacer algo distinto a mi rutina diaria.

Tome nuevamente mi corona y salimos en busca del resto de los Pevensie.

-¿También vienes tu Olivia?- Ed parecía molesto de que no lo dejaran ir solo.