𝓐𝓹𝓾𝓮𝓼𝓽𝓪 𝓟𝓮𝓻𝓯𝓮𝓬𝓽𝓪

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-Tu padre llamó -Nathalie me vió con tristeza. -Estará un tiempo más fuera...

-Nada nuevo -Tomé mi libreta -Gracias Nathalie, cena de luego. -Agarré un bolígrafo y comencé hacer mi tarea.

Sin desearlo observe la fotografía de mi familia. Estaba sentado en el regazo de mi madre mientras veía seriamente a la cámara.

Solo tenía cinco años y conocía tan poco a mis padres como ahora. Vivían viajando y dejándome en la casa al cuidado de Nathalie. Esa mujer era prácticamente mi madre.

Siempre tuve todo, los mejores juguetes, la ropa más cara, viajes a tantos lugares que eran imposibles de contar. Pero nunca tuve el amor de una familia.

Mi madre nunca me leyó un cuento ni recordaba mis cumpleaños. Y con respecto a mi padre, eramos dos extraños viviendo en la misma casa.

Bueno, yo lo veía así.

Deje la foto en su lugar y pensé en como conquistaría a Marinette. Era la primera vez que intentaba enamorar a una chica así que estaba un tanto preocupado.

-Supongo que en internet debe haber algo.

Fue un error buscar en internet pues sólo encontré cosas ridículas y que nada tenían que ver conmigo.

-Vamos Adrien, esto les gusta a las chicas. -Comencé a leer. -Las chicas son dulces, así que los chocolates derretiran el corazón de tu doncella. -Hice una mueca de desagrado. -Que asco. -Solo imaginarme dándome chocolates a Chloé me hacía vomitar. -Tks, piensa en Marinette tonto. -Me dije y cerré los ojos.

Y el cuadro que se formó en mi cabeza no fue nada desagradable. Por el contrario, fue, bonito.

Busque información hasta que prepare todo para mi confesión mañana. Si bien sería apresurado funcionaria. O eso pensé.

-¿Como? ¿No quieres los chocolates? -Me quedé de piedra cuando ella rechazo los chocolates con la tarjeta que tenía mi confesión. -Pensé que te gustarían...

-Y me gustan, mucho pero... -Se veía sumamente nerviosa. -¿por qué me das chocolates?

-En la tarjeta dice el porque. -Con dudas la tomó y la leyó.

Una vez terminó miro al suelo con las mejillas tan rojas como un tomate. Creí haberlo logrado de la primera.

Ella me amaba, quería estar conmigo entonces porque...

-Lo siento pero... -Sus ojos azules reflejaron los míos. -no puedo... -Me devolvió la tarjeta junto con los chocolates.

-¿Que? ¿por qué? ¿hice algo mal? -Estaba incrédulo.

-No, no es eso... -Negó con una voz dulce. -Es que... -Bajo el tono de su voz. -no nos conocemos bien... apenas hemos cruzado algunas palabras... y tú -Se movió inquieta. -tu tienes a Chloé...

-No, ella y yo terminamos.

-Aún así, lo siento -Paso por mi lado y me quedé allí.

-¿Me rechazaron?

Era la primera vez que me declaraba y me habían rechazado. Si bien entendía sus razones y eran válidas, ella me amaba, ¿no?

Marinette corrió hacia el baño donde se ocultó mientras calmaba su revuelto corazón. Sus mejillas ardían ante lo que habia pasado.

-Adrien -Sintió su corazon latir con fuerza. -Debo estar soñando...

Su sonrisa desapareció al pensar en la reacción de Chloé cuando supiese de esa declaración. A pesar de todo, se sentía mal de haberlo rechazado.

APUESTA PERFECTA [+15] -Adrien × Marinette Donde viven las historias. Descúbrelo ahora