APUESTA PERFECTA [+15] -Adrien × Marinette

𝓐𝓹𝓾𝓮𝓼𝓽𝓪 𝓟𝓮𝓻𝓯𝓮𝓬𝓽𝓪

Pase algunos días sin ir a la escuela. Porque me sentía mal por engañarla así. Mariette estaba dejando su vida y sentimientos en mis manos, y eso me pesaba.

Pero tarde o temprano debía volver así que cuando regrese con la primera persona desagradable que me encontré fue con Chloé.

-¿Y bien? -Escuche -¿No tienes algo que decirme? -La observe sin entender lo que decía. -El perdón que me debes para que acepte volver contigo. -Ah, ya entendía.

-Estas falta de noticias -Dije -No te pediré disculpas ni volveremos. En todo caso, eres tú la que debes disculparte.

-Adrien, bebé hermoso, escucha -Paso sus brazos por mi cuello. -Yo estoy dispuesta a darte otra oportunidad porque sabes que te amo. Y... - La alejé de mi.

-Basta, ten algo de dignidad. No volveremos Chloé. No quiero nada contigo ni ahora ni nunca. -Pase por su lado para entrar al salón.

Chloé podía ser muy molesta si se lo proponía. Una vez dejé mi mochila en mi asiento mire hacia el exterior por la ventana.

La mañana se veía algo nublada así que podría librarme de las clases de esgrima por hoy.

Mi teléfono volvió a vibrar y vi que se trataba de Lila. Desde el desfile me llamaba constantemente buscando acercase.

-Tu también eres molesta -Susurro y escuche algo detrás mio.

Me gire para ver a Marinette. Desde el beso no la veía así que fue un tanto incómodo para ambos.

-Hola -Escuche y la vi sonrojada.

-Hola -Respondí y camine hacia ella. -¿Como estas?

-Bien -Sonrió -Hacia mucho no venias a la escuela. ¿Te sentias mal?

-¿Eh? ¿como sabes eso?

-Lo... ¿supuse?

-Después del desfile me comencé a sentir mal y tuve que faltar a la escuela.

-Me preocupe mucho -Escuche -quise ir a verte pero no me atreví hacerlo.

-Me alegra que no hayas ido, ese lugar es tan horrible... no es bueno para nadie ir allí. -Note su rostro triste. -Lo siento Marinette... pero si estamos juntos... lo menos que haré es mentirte. -Dije asqueado. -Mi hogar es todo menos eso, un hogar.

-¿No quieres hablar sobre eso? -Negué con la cabeza. -De acuerdo. -Sentí sus manos algo frías en mis mejillas. -Nunca te obligaría a nada, cuando creas que estas listo, te escucharé.

¿Por qué? ¿Como podía quererme tanto? Yo no me lo merecía, no cuando no podía regresarle sus sentimientos.

-No merezco que me quieras Marinette -Cerré los ojos -Solo te haré daño... te arrastrare conmigo hacia una soledad horrible. -Negué con la cabeza.- No es justo.

-Adrien -Abrí los ojos nervioso. -Eres un chico genial, tan sólo no te has dado cuenta de eso.

¿Como iba a ser genial alguien que no podía sentir amor? ¿Que le daba igual estar solo como acompañado?

Ella también solo veía lo superficial de mi. Ese chico que caminaba con confianza sobre una pasarela llena de personas y no el niño vacío que le hacian falta sus padres y había aprendido a vivir sin ellos la mayor parte del tiempo.

-No me conoces -Alejé sus manos de mis mejillas. -Y una vez lo hagas, también te irás -Me gire dándole la espalda. -Como lo han hecho las demás. -Dije -En el fondo eres como las otras... estas conmigo solo por lo que represento. -Confese -Soy una oportunidad enorme para que seas diseñadora, ¿no? -Le dije -No tienes que negarlo, no eres la primera que me utiliza para su beneficio. -No recibí respuesta y me gire.