Capitulo 13

73 6 1
                                    

Una vez Blu y Perla llegaron, solo miraron hacia aquel lugar, sabían que no había que bajar la guardia aún, así que ambos ya estaban algo preparados física y mentalmente para lo que sea que se fueran a topar, más luego de aquella cena que les ayudo a subir su energía.

—Ok... Sabía que aún había alguno por ahí— comento Blu a un lado de su esposa, llevando consigo una rama que usaría como arma.

—Si, supongo que a la próxima tenemos que buscar mejor— continuo Perla, acercándose junto con Blu a ese lugar, volando hasta llegar a la entrada del nido, estando afuera, aun se podían escuchar a alguien masticando ahí adentro. Ambos se miraron y asintieron, entrando al sitio empuñando sus armas, pero, solo se encontraron con el cadáver de un guacamayo, sin cabeza, dejando salir parte de sus vertebras por ahí.

Blu y Perla observaron eso, el macho aparto la mirada con una ala en el pico para evitar vomitar, mientras la hembra ni se inmutó, pero, no había señales del zombie que muchos escucharon.

—Que raro, ¿donde estará ese bastardo?— pregunto Perla caminando por el sitio, tratando de buscar un lugar donde se pudo haber metido, pero mientras iba por ahí, se detuvo al observar un charco de sangre en el suelo rodeado de unas plumas azules, para luego, sentir como algo le goteo en su hombro. —¿hum?— lo toco con su otra ala, viendo sus plumas manchadas con sangre.

—Perla, aquí no hay nadie más...— Blu camino hacia ella, pero al ver la sangre sobre su hombro, rápidamente subió la mirada para ver hacia el techo, seguido de Perla, ahora ambos, viendo algo que definitivamente si les sorprendió.

Justo ahí estaba el guacamayo zombie, colgado entre las ramas que atravesaban el tronco, comiendose algo que la pareja no logro ver, pero enseguida la creatura lo dejo caer, estampandose sobre el suelo, era el cráneo del guacamayo que estaba en la entrada, no tenía ni piel ni ojos, solo la humedad de la sangre recién removida.

—Ay dios mío...— Blu y Perla empezaron a retroceder, viendo como el zombie no les quitaba los ojos de encima, empezando a descender, pero, agarrándose con sus alas y garras a las paredes, como si estuviera arrastrándose, mientras sus huesos crujientes aún eran audibles.

—Blu...— Perla empezó a temblar al verlo, poniéndose nerviosa de tener a esa cosa justo enfrente, no se veía como los demás zombies, este era diferente, pues varias partes de su cuerpo estaban estiradas anormalmente.

La bestia sonrió, dejando caer su mandíbula más de lo que cualquier otro guacamayo podría hacerlo, para luego dar un salto hacia Perla. Ella no se movió, aún estaba aterrada, por lo que, fue Blu quien la rescato, empujándola a un lado para que la creatura no le hiciera nada.

El zombie termino chocando contra la pared del árbol, clavando su pico en la madera, quedando ahí atorado, lo que le dio la oportunidad a Blu y a Perla de salir de ahí enseguida, volando hacia otro árbol por si acaso, usando la rama de aquí para descansar un segundo.

—Perla, ¿q-que te paso?— pregunto este, dejando su arma para atender a su esposa, la cuál estaba suspirando con lágrimas en las mejillas.

—No lo se... ¡N-no lo se!— ella solo se agarró la cabeza con sus alas, para luego abrazarse a si misma. —Solo que... Esa cosa N-no debería existir...—

—Ay, Amor... ya lo se, créeme que yo también estoy sorprendido por esto... su cuerpo... y esos sonidos, es como si...— decía el también algo exaltado, pero solo se dedicó a reconfortar a su esposa, acariciando su espalda para ello.

Mientras el hacia esto, vieron al zombie asomándose por el nido del que habían escapado, este dio un gran graznido al aire. Blu solo lo miro mientras abrazaba a Perla, sabía que de una u otra forma, no podía alcanzarlos, estaban seguros y a salvo aquí... ¿o no?.

Nuestro Hogar | Rio FanficDonde viven las historias. Descúbrelo ahora