Campione Di Magnolia.

Epilogo. Vol 1: Hermano Mayor.

Los días de Kusanagi Godou, comienzan realmente temprano. Se levanta con los primeros rayos de la mañana, toma una pequeña colación y rápidamente parte, rumbo a las calles de la ciudad.

Caminando, observa los escaparates de las tiendas. El hambre le invade siempre a mitad de camino.

Extrañaba la comida de su hermano menor.

Según su abuelo, él llegó en algún momento de la madrugada, por lo que en este preciso momento estaría durmiendo plácidamente.

No podía evitar sentir envidia de su hermano por poder dormir hasta tarde, mientras que él caminaba hacia el parque cercano a su casa.

Tomaba cerca de una hora llegar, tomar un autobús sería más rápido, pero caminar servía como calentamiento.

Suspiró de celos nuevamente, dentro de unas semanas, comenzarían las clases nuevamente, por lo que las actividades extracurriculares verían un parón momentáneo.

Le gustaba jugar, pero hacer un poco el vago no esta mal de vez en cuando. Así que sonrió sabiendo que tendría una buena cantidad de días de descanso.

Aceleró el paso una vez sus ánimos fueron devueltos. En unos minutos más, terminó por llegar al parque en cuestión.

A esta hora del día, la tranquilidad de los lugares como estos es bastante. Usualmente más tarde está abarrotado de niños jugando por doquier.

Motivo que complica un poco la situación, además de que a Godou le distraen un poco.

No era extraño que este, se perdiera jugando con ellos al beisbol o las escondidas.

Más de una vez Shizuka tenía que devolverlo a casa de la oreja, o su manager del equipo sorprenderlo por que llegaba tarde a los entrenamientos.

Pero no cambiaría eso, la actitud infantil en él era adorable a su propia manera, era popular entre los niños, su figura de hermano mayor despreocupado parecía agradarles.

Pero ahora esos niños estaban recién despertando, para partir hacía la escuela, por lo que las únicas personas que estaban en este parque eran aquellas con el mismo objetivo que él.

Al llegar había comenzado a estirarse, unos minutos de estirar sus músculos hasta que estos estuvieran en su totalidad listos para su entrenamiento matutino.

Así Godou corrió por toda la extensión del parque cercano a la estación de trenes.

Los minutos y los kilómetros avanzaron hasta que las nueve de la mañana se había hecho, comenzó a las ocho. Una buena marca personal, se sentó en los bancos de las inmediaciones.

Si cabe la posibilidad estaba aún más desolado de lo que estaba en un inició, hasta el mediodía cuando los niños salían de la escuela, a partir de este horario, el parque estaba vacío.

La bonita vegetación del parque, se erguía cuidada y majestuosa, cautivó por unos segundos al distraído Godou.

Se recostó mirando directamente a los arboles que se encontraban justo sobre el banco que eligió para sentarse.

Relajó su cuerpo.

Ahora que tenía un poco de tiempo para pensarlo, después de que Ky se había ido, todo volvió a como era antes de que apareciera.

Y fue algo aburrido, las incesantes peleas con Shizuka no eran lo mismo, si no había alguien que intentara calmar las aguas.

Tampoco tenía alguien que estuviera ahí para ayudarlo y encubrirlo cuando se escapaba de los entrenamientos. O salía a jugar por ahí.