Tres Maserati's levante hybrid negros se pusieron frente a la puerta de mi hogar.
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Me acerqué hasta el coche central, y me adentré allí con la ayuda de mis dos guardaespaldas.
Finalmente se repartieron en los otros dos coches, y salimos de la propiedad.
En cuanto llegamos al destino, bajamos hasta la vinoteca del edificio, donde varios chicos de seguridad nos indicaban la zona.
-El Sr. Jack está esperando adentro, señorita-.
Asentí antes de adentrarme en la vinoteca. Caminé entre mis dos guardias mientras escuchaba la conversación entre uno de los guardias y jack.
-Normalmente, el Sr. Miguel no tiene reuniones urgentes. -Comunicó uno de los guardias de Jack-.
-Si. -Respondió mientras asentía. -¿Dónde está el Sr. Miguel?-.
-Debido a la condición de salud del Sr. Miguel, de ahora en adelante, la Srta. Alba estará a cargo-.
Me acerqué hasta la mesa donde el señor Jack me esperaba mientras fumaba un puro.
-Chao, Alba. Todas vosotras sois adultas ahora. Por favor, toma asiento-.
Me senté frente a el, sin perder mi sonrisa.
-Aún así, ¿Te gusta el helado? Traigan helado para la señorita-.
-No gracias, no te molestaré por mucho tiempo-.
*Natalia POV*
-¡Bienvenidos a la coctelería Cosmos! -Saludaba Nina a los clientes. -¡Buenas noches! ¡Hola! Por favor, tomen asiento, señoritas. -Saludaba a la clientela. -¡Natalia!-.
Giré mi cuerpo, encontrándome a tres señoritas en la barra del bar, esperando mi atención.
-Boris. -Llamé a mi ayudante-.
-¿Si?-.
-Para esta chica guapa, Daiquiri de mango, para esta otra guapa un cosmopolitan. -Me acerqué hasta la última chica. -Y para la hada de aquí, un Rainbow... Un poco especial, lo prepararé yo-.
*Alba POV*
-Mi padre no ha estado muy bien últimamente. -Confesé. -Las cosas están un poco fuera de control. Justo hoy, he tenido la oportunidad de revisar las declaraciones de la empresa-.
-¿Qué tan emocionada estás por la gran ganancia? -Preguntó Jack-.
-Lo estoy. El casino está obteniendo mayores ganancias cada año. Tan grande que... Despierta la codicia de alguien, para empezar a hacer trampa. ¿Estás de acuerdo? -Dijo mientras estiraba la mano hacia mi izquierda-.
Uno de mis guardaespaldas, dejó un arma sobre mí mano.
Haciendo que los guardaespaldas de Jack se apuntasen con mis guardaespaldas.
