Mi Pequeña Lili (Jenlisa)

Nuevo Familiar

Los chicos esperan ansiosos la comida. Todos se miran sin decir nada ya que no saben ni siquiera como empezar la conversación. La menor se siente tranquila, después de aquella reunión se dio cuenta de muchas cosas de sus hermanos. Justo ahora tiene al frente su hermano menor, nunca pensó compartir una mesa con él, se le hace raro pero en una pequeña parte lo disfruta

Su mamá le enseño a diferenciar a sus hermanos de una manera demasiado fácil. Malai, valiente, fuerte y decisiva. Sunan, temperamental, orgulloso y demasiado difícil de llevar. Lamai, miedosa, callada pero demasiado explosiva, y Malee, cariñoso, amistoso pero es un hombre fácil de manipular. Los cuatros son demasiado diferentes a su hermana mayor, que su madre la describió como calmada, compresiva y un poco insegura pero valiente al enfrentar cosas. De cierto modo cada uno carga algo de su madre. Aprender de una manera a otro el perdón

Sunan no cayó bien, ver a su hermano le recordó a aquel hombre que les hizo un infierno a su madre y ella. Se paraban igual, con el pecho al frente, la cara levantada y los brazos en el bolsillo. Siempre a la defensiva. Lamai es más como su madre, con tantos secretos, pudo verlos por la manera que presionaba sus labios, de la misma manera como su madre hacía cuando quería decir algo pero no podía. Malee es como los dos. Cuando enfrento a su hermano pudo ver un poco de aquel hombre pero a lo demás como justo ahora ve a su mamá

La morena no podía dejar de ver a los hermanos de su chica. Son tan iguales como gotas de agua. Cuando vio desde lejos cada uno los observo atentamente. El chico que salió primero no tenía ni un rasgo a su madre, la otra chica si los tenía, pero estos tres son tan iguales que parecen gemelos. Podría jurar que está viendo a su novia en aquel chico, que a diferencia de Malai, se parecen totalmente en todo incluso en esa hermosa sonrisa. Lo que le causa un poco de ternura es que justo ahora ese chico le recuerda en los tiempos que conoció a su novia, tan tímido, callado y a veces regalando sonrisas

_ Disculpen la demora – sonríe la chica – tengan su comida – deja la gran pizza en la mesa. A todos se le mojan la boca cuando ve la delicia al frente de sus ojos
_ Gracias – dice Malai con una sonrisa – bueno, a comer – el chico dudaba de coger un trozo, su cara está tan roja como las sillas – vamos Malee come – el chico sonríe y coge el trozo de pizza. Su estómago ruge con desesperación que no duda en darle un buen mordisco a la pizza. Las chicas lo miran impactadas
_ L-lo siento – hace una reverencia – e-es que no comía desde hace tiempo – definitivamente para la morena el chico era Lisa solo que versión hombre
_ Tranquilo Malee come – dice Lisa con una sonrisa, el chico asiente y sigue comiendo
_ H-hoy fue un día un poco pesado – dice suavemente – lamento que Sunan se las haya dejado difícil pero Malai, sabes cómo es él – la chica asiente – no veníamos con intensión de pelear o bueno Lamai y yo no la teníamos – limpia su boca con la servilleta, se queda mirando al suelo y ríe – es loco, pensé que Lamai se había vuelto loca – las mira – pero ella de verdad lo presintió – las chicas fruncen el ceño
_ ¿Qué? – Dice Malai

_ Que Lisa vendría – la alta abre los ojos – desde que llegamos aquí se la pasaba diciendo eso, incluso estaba nerviosa por ello por eso casi no hablo – se quedan en silencio – Lisa – lo mira - ¿e-esa es tu hija? – La menor asiente sonriente – es linda – sonríe – aunque parece mucho a ella – dice avergonzado mirando a la morena
_ Lisa que grosera somos – dice Malai, su hermana la mira confundida – no le presentamos a nadie – ríe – lo siento Malee, es que estábamos muy hambrientas – el chico asiente – mira ella es Isabel, es mi esposa – la chica deja de comer y estira la mano
_ Hola – dice con la boca llena. Su novia voltea los ojos y le da un codazo - ¿Qué?
_ No seas grosera – la chica gruñe y baja rápidamente lo de su boca
_ Hola Malee soy Isabel, la esposa de tu loca hermana – el chico ríe
_ Te creo – su hermana lo mira serio, el chico hace una reverencia – perdón – mira a Lisa
_ Ella son Jennie y Ella, mi mujer y mi hija – dice feliz. El chico asiente
_ Mucho gusto Jennie, hola Ella – la pequeña lo mira con los ojos abiertos – oh – ríe – lamento molestarte – la pequeña chupa su dedo y cierra los ojos – bueno, mucho gusto soy Malee Manoban, el menor de cinco hijos. Estudio en la marina, empecé hace poco así que aun estoy aprendiendo varias cosas – las chicas asienten – tengo dieciocho – las chicas abren los ojos – lo sé soy muy pequeño – ríe – viví con mamá – se le quiebra la voz, respira hondo y se acomoda – viví con mamá hasta el día que entre a mi entrenamiento. No volví a saber de ella hasta que volví y me entregaron la carta de mamá – saca la carta
_ Si sabías de eso ¿Por qué no fuiste? – La mira
_ Porque me la entregaron dos meses después de que ella lo escribió, pedí permiso y cuando fui me dijeron que ella ya no estaba ahí desde hace mucho – baja la mirada – trate de comunicarme con ella pero nadie me decía dónde estaba – suspira – cuando recibí la noticia mi corazón dolió tanto que me dieron una semana de descanso, mañana tengo que regresar
_ ¿Dónde estás ahora chico? – Dice Isabel
_ Estaba en China, fuimos allá para algunas cosas y ya – asienten
_ ¿Sabías que mamá iba a buscarme? – El chico suspira y asiente
_ Mamá duro mucho buscándote. Cuando papá cumplió dos meses de muerto mamá empezó a buscarte, vino aquí pero no se demoro nada, ya sabes. Es un pueblo chiquito así que ya sabes – asiente – después te busco en todo Bangkok pero tampoco, así que empezó una búsqueda por todo país – la menor abre los ojos – fue un tiempo difícil para ella, siempre lloraba en las noches y me rompía el corazón – dice triste – fue cuando nos dieron una respuesta. Nos dijeron que estabas en Corea, antes de entrar mamá me aviso que se iría pero que regresaría – el chico arruga la cara de dolor – no lo hizo – susurra – no sabía de su enfermedad pero lo dudaba, cuando la vi con el cabello corto me asuste pero ella solo decía que quería cortárselo, en los últimos meses se comporto tan raro, se la pasaba haciendo tantas vueltas ahora entiendo que hacía – Malai se queda pensando
_ ¿Por qué mamá no te dejo en los bienes? – El chico la mira
_ Siempre le pedí a mamá que no me diera nada así como no acepte nada de papá – mira a su hermana mayor – sentía que no lo merecía – se acomoda – Lisa, estaba esperando este día para hablar contigo – la alta asiente – primero que nada lamento todo – duce suavemente – papá nos manipulaba de una manera tan increíble sin embargo Malai siempre trato de evitar eso – la chica baja la mirada – así que la escuche pero Sunan – cierra los ojos – él me golpeaba cuando no quería hacerlo, empecé a tener mucho miedo – se tapa la cara – lo siento en serio, solo tenía diez años – a la castaña se le arruga el corazón – lo siento Malai no quería ser ellos, pero Sunan no me dejaba opciones así que por eso lo hice.