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UN LUNES tranquilo tuvimos todos los participantes por la semana del dieciocho.

Este día tan importante importante para los chilenos ya estaba llegando a su fin ya que es de noche, pero se sigue celebrando el diecinueve casi que todo bien.

-¿Que pensai hacer?- pregunto la Cony- porque te conozco y se que vas a hacer algo.

asentí con una sonrisa.

-Hablaré, que más puedo hacer- alcé los hombros.

entrecerró los ojos- Okey... ¿pero ahora vas a hablar con la Ale, o mañana?.

-No se, quizás mañana. ¿Que deci' tú?- pregunté.

Ella solo alzó los hombros.

Yo salí de la pieza, me dirigí rápidamente a la cocina donde estaba ella, la Alessia así que yo no perdí tiempo, me serví un vaso de agua rápidamente y me sente en una silla, ella estaba cocinándose.

-Oye, Alessia- la mire.

-Dime mimi- me dijo con su voz tierna.

-Supe por ahí que estabai hablando cosas mías.

Porque si, no solo me trato de pesa y que no merecía estar aquí si no que también contó cosas que yo le había contado con toda la confianza del mundo.

-¿Eh?- frunció el ceño.

-No fingai'- entrecerré los ojos un poco- Ya se todo.

Mentira, no sabía todo

-¡Perdón Mimi, no fue mi...- exclamó y la interrumpí.

-A ver, que me digai pesa me da lo mismo, es tu opinión, me importa un pico. Pero ahí a decir que no me merezco estar acá y contar weas mías, ya po.- hice una mueca.

-Es mi punto de vista, para mi no deberías estar acá, no lo mereci'.

-¿Y quien eri tu para decir que no merezco estar aquí?

Me paré de la silla y la miré mientras apoyaba mis manos en el mesón.

-Porque no lo merecí', no mereci' nada de lo que teni ahora. No mereces el amor de la gente ni tampoco estar pololeando con el Hans, el es muy buenito para ti.

-¿No lo merezco o es lo que tú queri?- pregunté frunciendo el ceño, ella bufó y rodó los ojos-
Alessia tu estai con el Bambino, no me andi mirando al Hans.

-No lo estoy mirando Eymi, solo no lo mereces.

-¿Y por que a ver? ¿Por que dice ella que no me merezco esto?.

-¡Porque no Eymi, no eri buena persona!.

-Y que sabi tu si soy buena o no weon.

-¡Te conozco y se que no mereces estar aquí, no mereces nada de lo que tienes!

-¡Lo que merezco o no no me importa, yo estoy aquí por necesidad, wea que tu nunca vai a saber si naciste en cuna de oro po weona, tu familia te da todo!

Subí un poco el tono ya que ella estaba gritando, yo no quería gritar solo hablaba más fuerte.

-¡Si lo que más queri es que te den todo, pero ella no tiene una familia estable! ¡¡POBREE!!.

-¡Prefiero mil veces no tener una familia estable que ser una MANTENIDA A MIS 21 AÑOS! ¡UNA VERGÜENZA TU VIDA! ¡pfff!

-¡EN-VÍ-DI-O-SA!

-¿¡YOO ENVIDIOSA!?- Me reí sarcásticamente- ¡NI CAGANDO!

-¡QUISIERAS TENER MI VIDA Y DARTE LOS LUJOS QUE ME DOY YO, YA QUISIERAS, PERO CONO NADIE DE TU FAMILIA TE QUIERE TIENES...- la interrumpí.

Timídez |• Hans Valdés.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora