Timídez |• Hans Valdés.

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⸻Me desperté a mitad de la noche, cuando salí de la pieza la Cony se estaba lavando los dientes, me senté en el sillón a mirarla.

-Hola- me dijo con una sonrisa cuando terminó.-

-Hola- le dije-

-Ven- me dijo y se dirigió a la pieza, específicamente a su cama, yo a la mía y saqué el balsamo labial de nivea- ¿De que es ese?- pregunto casi susurrando, por la Moni que esta durmiendo-

-Es el de cherry- respondí-

-A ver, ven- me acerque a ella, ella estaba sacando algo de su cosmetiquero- Yo tengo el de palta- me mostró uno verde clarito.-

-¿Palta? Que asco- dije mirándola como se ponía su bálsamo-

-Es rico igual, ¿como es el tuyo?- pregunto y dejo su bálsamo en el mueble.-

-Rico, mira. ¿Quieres probarlo?- pregunté mostrándole el mío, ella lo tomo y lo dejo al lado del suyo, mire como hacía eso y luego la mire a la cara, no se en que momento pero ella estampó sus labios contra los míos, sonreí en medio del beso y sentí como ella también, cuando nos separamos nos empezamos a reír, yo intenté taparme la boca con las manos para no reírme.

-Agarrai rico weona- me dijo y yo le guiñé el ojo. Después de reírnos un poco más ella salió y yo me acosté en mi cama, me iba a tapar pero se abrió la puerta y no me pude resistí a mirar a ver quien era, era la Cony y se dirigía a mi cama corriendo con una sonrisa.- El ultimo- dijo y yo solté una carcajada y le abrí las sábanas para que se metiera a mi cama.

Se acostó conmigo y me tomo la cara para darme otro, ella con una mano me hacía cariño en la cabeza y con la otra la pasaba por toda mi espalda, yo tenía mis manos en su cuello.

Nos separamos y solté una carcajada, ella me dio un piquito y se paró tapándome.

-Buenas noches linda- me dijo y yo sonreí mientras me mordía el labio, me di vuelta y me dormí.-

Tuvimos que hacer la prueba del presupuesto, había una cancha de voleibol en el patio, el Rai estaba en una mitad tirando las bombitas y nosotros en la otra para atraparlos y ponerlos en unos recipientes que teníamos que llenar.

Después de llenarlos todos el Jorge me tomo con un brazo, en el otro tenía a la Skarleth, nos tiro al barro que había quedado por las bombitas reventadas, empezamos una guerra con las bombitas que quedaban, después el Jorge nos tiro agua con la manguera y quedamos todos empapados. Me saque como pude las calzas y la polera que andaba trayendo ya que estaban llenas de barro, quede en calzones y sostén, me tire a la piscina así, la Cony me siguió al igual que la Skarleth, la Alessia, el Hans, el Jorge y el Ruben.

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Con la Pincoya y la Cony estamos en la pieza, como no teníamos nada que hacer estabas acostadas mientras hablábamos. En la pieza no había nadie más que nosotras tres.

-Anoche me comí con el Rai también-

-oooh, ¿verdad?- pregunté con una sonrisa y ella asintió-

-Igual me da cosa por que la Fran me decía que ese día del congelado el Seba no me dejaba de mirar a mi, ella piensa que le gusto de verdad-

-Si... yo no confío mucho en ella eso si- dije.

-¿pero por qué? Si es tan simpática- me dijo la Cony.

-Puede ser simpática pero no le tengo confianza, estoy segura que si él Rai no hubiese llegado ella no se hubiera acercado para acá-

-Igual hay que darle otra oportunidad-