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DESPUÉS DE haber salvado a la Cata varios murmullos y malas caras aparecieron entre mis compañeros.

-Chica, ¿y tu no salvas a Pancho? Tanto que querías que volviera y ahora no lo salvas- me dijo la Pincoya entrando a la pieza

-Con el Pancho no tenemos la misma relación Pincoya. Tu misma te has dado cuenta que él no está ni ahí conmigo, yo intento acercarme y él responde entero pesao' y yo tampoco le voy a rogar atención- alcé los hombros desinteresada

-Si se va va a ser tu culpa- me dijo con un tono enojado mientras caminaba a la puerta.

-Si se va va a ser por la gente, no por mi- dije antes que cerrara la puerta-

Me estaban hartando las actitudes de la Pincoya la verdad.

Fui a la cocina por un vaso de agua, ahí estaban todos. Luego de echar agua en mi vaso me senté junto a Hans que estaba solo en el respaldo del sillón.

-Estoy chata- dije cuando terminamos de hablar de un tema aparte.

-¿Por?- preguntó.

-No se, siento que la mínima cosa que me dicen me harta- suspire y mire a los que estaban en la cocina- Ojalá se vayan todos- dije riendo.

Después de reírnos un rato por las cosas que decíamos nos desviamos a un tema muy lindo; nuestro amor aquí dentro, como se formó, como creció, el desarrollo, los problema, etc...

-A mi siempre me gustaste, desde que la Moni te presento te encontré lindo- me sinceré media tímida, él soltó una carcajada.

-A mi igual me pareciste linda pero no pensé que llegaríamos hasta donde estamos ahora- puso su mano en mi muslo.

-Todo pasar por algo-

Repetí mi frase más dicha en esta casa.

-¡Hans! ¡Hans!- llegó la de pelo café con su voz "tierna" que a mi me daba risa y pena ajena-

-¿Que pasó?- le preguntó él mirándola.

-Ven, te tengo que mostrar algo- le tomo la mano.

Yo miraba cada movimiento que hacía ella siempre intentando tocarlo.

-Espera Estefi, que estoy hablando con la Mimi- le dijo el y ella me miro a mi de reojo.

-No importa, después hablan pero ven que..- la interrumpí.

-Ya te dijo que está hablando conmigo- hable mirándola.

-y que me importai tu, yo solo quiero mostrarle algo-

-Después habla de educación y respeto cuando ella no tiene ni un poquito de eso- dije bajándome del sillón intentando no botar el agua y dándole la espalda.

-No empeci' Eymi- me di la vuelta para mirarla.

-¿empezar que? Si tú viniste acá a wear, nosotros estábamos de los más bien hablando.

-Aaah, ya, chao contigo.- me dijo y nuevamente le tomo la mano al Hans para que la acompañara-

-Estoy hablando con ella Estefi, no me voy a ir- le dijo el Hans.

-¡Pero lo mío es importante!-

-¿Y a mi que chucha me importa?- dije con un tono burlesco.

-Ooooh, ya Eymi weon. Siempre buscando hacer problema, por algo después te dejan sola-

-Ellos se lo pierden- alcé los hombros y sonreía orgullosa, el encierro me puso egocéntrica.

-¿Que se van a perder si no teni nada? mírate- me miro de arriba abajo. Auch, un golpe bajo.

Timídez |• Hans Valdés.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora